El gráfico que muestra la virulencia de la tercera ola del COVID-19 en el mundo

Coronavirus
Foto: Fusion Medical Animation, Unsplash

La tercera ola del COVID-19 en la que está inmersa un buen número de países a nivel mundial, es lo que ha llevado a Christine Lagarde, presidenta del BCE, a alertar sobre su impacto en la economía. Afirma que este nuevo resurgimiento de la pandemia tendrá su impacto no solo en los datos de la zona euro del último trimestre de 2020 sino también en el primero de 2021. De ahí que la presidenta haya mantenido sin cambios el apoyo monetario por parte del BCE .

No en vano, cuando se analiza la incidencia acumulada a siete días de las principales economías del mundo, se ve cómo esa tasa no solo esta en niveles preocupantes en muchas de esos países sino que además está muy por encima de los datos de octubre y septiembre, cuando el mundo asistía protagonizaba la segunda ola de esta pandemia. Eso al menos es lo que se ve en el Covid Tracker de BlackRock Insititute. La gestora muestra con un mapa de calor similar al que se utiliza en los gráficos de los PMI la evolución de la incidencia acumulada. El resultado es una prevalencia de un color rojo que gana intensidad a medida que avanza el calendario.

Ante esta evolución de la pandemia son varias las gestoras que piden una cierta cautela en este primer trimestre del año.

Al fin y al cabo, según Anna Stupnytska, economista global en Fidelity International, crecen las dudas sobre cuándo llegará el repunte de la economía. “La llegada de ese momento es cada vez más incierto: las nuevas variantes del virus, más transmisibles, y el distinto grado de éxito de los programas de vacunación en cada país apuntan a posibles retrasos en la apertura de las economías no solo europeas, sino mundiales”, afirma.

Optimismo pero con cautela

"Nos preocupa el posicionamiento extremadamente concentrado de los inversores en este inicio del año", afirma Didier Saint George, miembro del comité de inversiones de Carmignac. Eso sí, siguen siendo optimistas con respecto a la evolución de los mercados. Y no tanto por los datos macro que se están conociendo sino "teniendo en cuenta de que los Gobiernos afirman estar dispuestos a reforzar su apoyo mientras el efecto de las vacunas no baste para tomar su relevo", afirma.

Similar opinión defiende Luca Paolini, estratega jefe en Pictet AM. Considera que los mercados de acciones darán una rentabilidad anual del 10% este 2021, pero advierte de la importancia de ser selectivos. "El verdadero riesgo son las valoraciones, favorecidas por el enorme estímulo fiscal.  Prácticamente todas las clases de activos muestran valoraciones significativamente desviadas de tendencia de los últimos 20 años, tanto en acciones como bonos", afirma. Más teniendo en cuenta que esas altas valoraciones pueden no casar con un retraso en la recuperación económica.