El informe que destapa las vergüenzas de la gestión activa

Inversor
Artemuestra, Flickr, Creative Commons

La industria de gestión activa tiene un problema. En un entorno en el que los ETF están ganando cuota de mercado y ejerciendo una importante presión sobre los precios, el sector se está viendo en la obligación de justificar comisiones y demostrar que las estrategias de gestión activa son capaces de generar rentabilidades por encima del benchmark. Y, a largo plazo, la mayor parte de los fondos activos que actualmente se comercializan en el mercado, esto último no lo están consiguiendo. Así lo revela el informe SPIVA de S&P correspondiente a 2016, que muestra que a diez años el 86% de los fondos de renta variable europea gestionados activamente se han visto superados en rentabilidad por el S&P Europe 350. O, lo que es lo mismo, sólo el 14% de los productos han sido capaces de batir al índice. Durante la última década, estos fondos han generado de media una rentabilidad del 4%, frente a la del 4,9% del selectivo. Pese a ello, la tasa de mortandad es baja. De los 1.208 fondos de bolsa paneuropea que existían en el mercado hace diez años, casi la mitad (el 48%) han sobrevivido y siguen comercializándose.

Este es un artículo exclusivo para los usuarios registrados de FundsPeople. Si ya estás registrado, accede desde el botón Login. Si aún no tienes cuenta, te invitamos a registrarte y disfrutar de todo el universo que ofrece FundsPeople.