El negocio de sicav en Bankinter retrocede un 12% en el último año

Dancausa Bankinter
Imagen cedida

Todas las métricas de gestión de activos, banca privada y banca personal en Bankinter se han consolidado con el paso de los años como una de las agrupaciones de cifras de negocio más rentables para la entidad, dado su crecimiento constante. Sin embargo, en la última presentación de resultados, correspondiente al tercer trimestre de 2017, una de estas métricas ha dado un paso atrás: la de sicav.

Durante el último año, el volumen de los fondos de inversión en Bankinter ha crecido un 21,6% (hasta los 19.100 millones de euros, de los cuales un 57% corresponde a fondos de terceros y un 43% a fondos propios), el de los planes de pensiones un 9% (hasta los 2.400 millones), pero el de las sicav ha hecho lo opuesto, decrecer un 12% (en la actualidad, se sitúa en los 4.400 millones). Según Gloria Hernández, directora financiera, este retroceso en el patrimonio de las sicav gestionadas por la firma obedece “al deseo de los clientes y no a una política comercial del banco”. Parte de este dinero en sicav se está trasladando a fondos perfilados de forma natural, ante la incertidumbre que reina entre los clientes sobre el futuro tratamiento fiscal de estas sociedades colectivas.

Pero lo cierto es que, al margen de la pérdida patrimonial en sicav, la foto global de la gestión de activos en el banco dirigido por María Dolores Dancausa sigue siendo más que notable, con un incremento de las comisiones netas derivadas de esta actividad del 20,5% entre septiembre de 2016 y septiembre de 2017, hasta los 114 millones. Mientras que los recursos de la banca privada avanzan un 15%, hasta los 34.200 millones, los de la banca personal dan un paso al frente en la misma proporción, otro 15%, hasta los 20.500 millones.

Tanto los negocios tradicionales de banca privada y personal como los nuevos negocios digitales de inversión como Popcoin, lanzado en septiembre por Bankinter, verán incrementada su vigilancia por parte del supervisor una vez MiFID II entre en vigor en enero de 2018. A este respecto, Dancausa confía en que la nueva directiva europea favorezca los modelos de negocio de entidades como Bankinter, donde la arquitectura abierta de fondos de inversión es una práctica habitual desde hace años. “Bankinter está muy bien preparado para MiFID II. Somos un banco de cliente, no de producto. Siempre buscamos el mejor producto posible, sea propio o de un tercero”, justifica su directora financiera, quien recalca que “nosotros ya damos un asesoramiento independiente a nuestros clientes en materia de inversión desde hace mucho tiempo, llame como llame a este asesoramiento la directiva”.

Durante los primeros nueve meses del año, Bankinter logra un beneficio neto de 376 millones de euros, un 6% menor respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Aunque, puntualiza la entidad, este beneficio sería un 15% superior sin Portugal, mercado en el que entró en 2016 tras la adquisición del negocio minorista de Barclays.