2021, año histórico. Nunca antes ha habido tanto patrimonio en fondos luxemburgueses. Nunca antes había entrado tanto dinero en un único ejercicio. A cierre de diciembre, los activos netos en fondos de inversión en Luxemburgo tocaron un nuevo máximo histórico: 5,9 billones de euros. Esa cifra ha crecido en 886.000 en tan solo un año. Estamos hablando de un crecimiento del 17,8% en 12 meses.
Son datos que publica ALFI, la asociación de la industria de fondos en Luxemburgo. Inversores tanto institucionales como retail han metido una cifra record de dinero en todas las clases de activos. Se registraron flujos netos de 394.000 millones de euros en los últimos 12 meses. A eso se sumó la apreciación del mercado, valorado en 491.000 millones.
Así, la cifra orgánica de crecimiento del patrimonio (solo contando la entrada nueva de dinero) es del 7,9% mientras que el impacto del mercado explica el otro 9,9% del incremento en activos.
Si miramos atrás los últimos cuatro ejercicios, nunca antes había entrado tanto dinero en fondos luxemburgueses como en 2021. Estamos hablando de 30.000 millones de euros en suscripciones netas cada mes.
Una cosa que está creciendo y otra que mengüa
Aunque la industria de fondos luxemburguesa está creciendo en general, hay clases de activos que están ganando más terreno. Es el caso de los activos privados, la categoría de activos que más rápido está creciendo en Luxemburgo. Un 29,9% en 2021. También es notable la expansión de activos en fondos de renta variable (29,8%) y fondos de fondos (25%).
Una tendencia interesante que detectan desde ALFI está relacionado con los nuevos lanzamientos. “Si bien los gestores de activos mejoran continuamente sus gamas de fondos, también están interesados en racionalizar la cantidad de fondos que se ofrecen”, notan. Así lo ilustra la disminución general en la cantidad de fondos y subfondos. De 14.590 a 14.445 a 31 de diciembre de 2021.
Si a esto se suma el crecimiento en activos, el tamaño medio por fondo o subfondo sigue aumentando de 341 a 406 millones de euros. Esto confirma la tendencia observada en los últimos años. “Las economías de escala permiten que las gestoras organicen sus gamas de fondos de manera más eficiente y reduzcan los costes en beneficio de los inversores finales”, explican desde ALFI.
