El patrimonio en fondos garantizados alcanza los 20.000 millones... máximos en tres años

Dinero
Free pictures of money, Flickr, Creative Commons

El escenario de tipos cero ha obligado a las gestoras a reinventarse para poder seguir arañando algo de rentabilidad. Así es como el fondo garantizado ha vuelto a salir al escaparate de las gestoras, que han aprovechado su carcasa para englobar a aquellos clientes con un perfil más conservador.

Por definición, estos productos aseguran a una determinada fecha futura la conservación total o parcial del capital invertido con la posibilidad de obtener una rentabilidad adicional (que puede estar o no garantizada). Así, se basan en una cartera de renta fija y derivados para construir una estructura que garantice una rentabilidad, que en ocasiones puede ser superior al incorporar derivados sobre algún índice de renta variable. Eso sí, los bancos se están viendo obligados a fijar periodos de permanencia de cinco o seis años para encontrar subidas en la curva de expectativas de tipos y poder ofrecer retornos positivos.

En cualquier caso, la avalancha de registro de este tipo de productos es evidente. Según los datos de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, desde septiembre del año pasado, un 30% de los productos que se han registrado son garantizados. Y esto, a su vez, también se ha traducido en un incremento del patrimonio bajo gestión en la categoría.

Según los últimos datos publicados por Inverco, a cierre de septiembre había 20.100 millones de euros en fondos garantizados. Lo que supone no solo un 5,67% más de lo que había a cierre del año anterior sino la cifra más elevada desde el año 2016 y volver a recuperar la simbólica cifra de los 20.000 millones.

 

Evolución del patrimonio en fondos garantizados (millones de euros)

2016 2017 2018 2019
22.853 19.646 19.002 20.102

 

El crecimiento viene por dos vías: por una parte, por las suscripciones netas de los partícipes (46 millones en lo que va de 2019) y, por otro, por la rentabilidad del 4,47% de la categoría en el acumulado del año, según estos datos (gracias, entre otras cosas, al boom de la deuda española e italiana).

El contexto

Si se contextualiza la cifra se observa que, a pesar del crecimiento, su cuota sigue siendo nimia comparada con años anteriores. Hoy en día supone un 7,5% de los 270.152 millones que hay en fondos de inversión, muy por debajo del 42% que llegaron a representar en el año 2012.

Entonces, la gran dosis de liquidez que se derivó de la laxa política monetaria del Banco Central Europeo (BCE) acabó con la rentabilidad de los productos de menor riesgo, obligando a los inversores a cambiar sus expectativas de rentabilidad y a asumir más riesgo en sus carteras.