El Tesoro Público ha colocado 3.522 millones de euros en letras a tres y seis meses, con una elevada demanda que ha rozado los 9.594 millones, casi el triple de lo finalmente adjudicado. Esto le ha permitido al organismo superar ligeramente sus objetivos de colocación, puesto que, inicialmente, el Tesoro tan sólo esperaba captar, como máximo, 3.500 millones. En concreto, ha colocado 1.577 millones en letras a tres meses (frente a los 4.599 millones demandados por los inversores), así como 1.945 millones en letras a seis meses (con una demanda de 4.995 millones).
El interés a pagar por su deuda a más corto plazo se ha situado en el 1,2% para las letras a tres meses (frente al 1,3% de hace tres semanas) y en el 1,6% para las letras a seis meses (con respecto al 1,7% del pasado 27 de noviembre). Así, ha logrado rebajar el precio general de la colocación de su deuda pública a corto en la última subasta del año.
A falta de dos semanas para el cierre del ejercicio, el Tesoro ya tenía cubiertas sus necesidades de financiación al completo desde noviembre, por lo que, ahora, las dudas se centran en el año que llega. La posible petición de rescate por parte de España a sus socios europeos y una posible bajada de tipos de interés por parte del BCE serán los focos a tener en cuenta en los mercados. Además, la prima de riesgo española se sitúa hoy por debajo de los 400 puntos, donde ronda, aproximadamente, los 399 puntos.