Funds People ha recopilado las opiniones expresadas en presentaciones y entrevistas por distintos gestores de renta fija para conocer cuál es la visión de cada uno de ellos sobre un mercado de bonos que se ha vuelto mucho más difícil.
El universo de gestores de renta fija se podría dividir en dos grupos claramente diferenciados: por un lado, estarían aquellos que creen que todavía hay valor en el mercado de bonos y posicionan sus carteras para aprovechar compresiones adicionales de los spreads; por el otro, estarían aquellos que se muestran convencidos de que el valor que ofrece actualmente el mercado de bonos es tan escaso que el hecho de estar invertido en renta fija no compensa las potenciales pérdidas que provocaría una caída de los precios. Esta tesis la defienden sobre todo aquellos gestores cuyo mandato les permite manejar su fondo de manera flexible, posicionando incluso una parte importante de la cartera en liquidez si lo entendiesen necesario.
Uno de ellos es Bill Eigen, responsable del JPM Income Opportunity Fund, quien lleva gestionando renta fija desde 1990. “El mercado de renta fija global está en máximos de valoración. Lo que hemos visto en los últimos meses y los últimos años en renta fija no va a volver. No quiero asustar a los inversores, sino abrirles los ojos en renta fija. Todo lo que va a ocurrir es que volveremos a unos niveles más normales. Muchos gestores no quieren ni oír hablar de subidas de los tipos porque es malo para su negocio, pero lo cierto es que estos no van a estar bajos para siempre. Si el bono americano a 10 años sube al 4/4,15%, ¿alguien cree que la renta fija europea o el high yield lo van a hacer bien? La realidad es que no”, asegura el gestor de J.P.Morgan AM. En estos momentos, el 60% de su cartera está en liquidez.
“Algunos dicen que soy muy conservador. Me critican por la manera en la que me estoy aproximando al mercado. Yo no me comparo no nadie. Mi trabajo es no perder dinero, preservar el capital en periodos de corrección y capturar las oportunidades cuando aparecen. El nivel de liquidez depende de las oportunidades que ofrezca el mercado en cada momento”, explica el experto (leer más). Otro gestor que también está recurriendo a la liquidez es Paul Read en fondos como el Invesco Pan European High Income, fondo mixto que actualmente mantiene el 16% de la cartera en liquidez y en activos de deuda pública a corto plazo. Según explica Read, este posicionamiento les permite aprovechar posibles correcciones del mercado para entrar a precios más atractivos, como ocurrió hace un año, cuando el anuncio del tapering provocó una significativa caída en el precio de los bonos.
“No creemos que se vaya a producir un crash en el mercado, aunque necesitamos ver una corrección para reducir nuestro posicionamiento en liquidez y adoptar una postura más constructiva”, explica. En opinión del gestor de Invesco, la fuerte compresión de los spreads obliga a analizar las oportunidades desde un punto de vista de valor relativo. “Esto te permite descubrir segmentos del mercado que todavía brindan oportunidades interesantes, como determinadas emisiones subordinadas del sector financiero, así como activos a evitar. “Las tires de la deuda corporativa con grado de inversión cotizan a niveles próximos a los del bund, lo que ha empujado al inversor a dirigirse a mercados donde el diferencial es mayor, como el español o el italiano”. Algo muy similar ha ocurrido en el high yield, donde el buen comportamiento registrado en los últimos años ha obligado al gestor a mover ficha y reducir a la mitad el peso del activo en la cartera, hasta dejarlo en el 17%.
Uno de los movimientos llevados a cabo por el equipo del Invesco Pan European High Income para buscar rentabilidad ha sido elevar el peso de la renta variable, actualmente en el 18% (el máximo está limitado al 30%), para lo que han invertido en unas 30 acciones siguiendo una aproximación value. Justo la estrategia contraria es lo que está siguiendo Richard Woolnough en el M&G Optimal Income. El responsable del fondo más popular de M&G Investments decidía recortar a la mitad el peso de las acciones en la cartera, al dejarlo ahora ligeramente por debajo del 6%. “Son un turista en bolsa. Solo compro cuando las acciones están absurdamente baratas. Si los bonos ofreciesen el mismo valor que las acciones en todo el mundo, no compraríamos ni una”, afirma el experto.
Con Woolnough empezaríamos con la lista de gestores que todavía encuentran valor en el mercado de renta fija. El gestor coincide con Read en el hecho de haber reducido posiciones en high yield, pero no en la positiva visión que mantiene sobre la deuda pública, sobre todo del Reino Unido y también de Estados Unidos. Sus posiciones en bunds, gilts y treasuries superan el 20%, niveles muy cercanos a máximos históricos. “El inversor teme subidas de las tires, aunque estamos convencidos de que las rentabilidades de los bonos bajarán todavía más. La actividad está mejorando tanto en Estados Unidos como en Europa y la política monetaria sigue siendo muy acomodaticia. Aunque las tires puedan repuntar en momentos puntuales de pánico, a largo plazo, en un mundo más normal, las rentabilidades de la deuda pública deberían descender”, explica el experto (leer más).
En una línea muy similar se pronuncia Mondher Bettaieb, gestor del Vontobel Fund-Euro Corporate Bond Mid Yield, quien asegura que quien crea que asistiremos a un escenario de fuerte aumento de las tires es por que piensa que estamos ante una nueva crisis sistémicas, como la acontecida en 2008, un escenario que él no contempla. “La gente tiene mala memoria. Si quitas el efecto de aumento de las tires que ha tenido en el mercado de bonos la crisis financiera, los spreads están en su media histórica”, afirma el gestor de Vontobel. En su opinión, es normal que las tires de la deuda soberana de España e Italia hayan caído. Es más, el experto cree que seguirán contrayéndose, que en el caso del bono español a 10 años ve en niveles del 2,5% (leer más).
En este sentido, Chris Iggo, director de inversiones de AXA IM, señala que la parte corta de la curva de la deuda española permanecerá muy estable. “El carry que ofrece es todavía atractivo”, indica. El experto reconoce que “el rally vivido desde enero por los bonos soberanos ha sido la gran sorpresa del año, sobre todo teniendo en cuenta que el consenso apostaba por estar cortos en duración e infraponderar deuda pública”. En términos generales, la estrategia del experto pasa por infraponderar deuda pública y duraciones cortas y sobreponderar bonos corporativos con grado de inversión, high yield y deuda periférica. Eso sí: Iggo considera que, tras tres años de mercado alcista, el entorno será más complicado para la renta fija. “Veremos más volatilidad y menos rentabilidad”, augura.
Esta visión parece invitar a la cautela, que es justo lo que recomienda uno de los gestores de renta fija más reputados de la industria, George Muzinich. El fundador de Muzinich & Co, gestora americana creada en 1988 especializada exclusivamente en crédito corporativo asegura que “tenemos un mercado completamente artificial. No sabes dónde están en realidad los tipos de interés. Por ese motivo, asistir a una corrección del mercado no es, en absoluto, algo descartable. Las aguas están en calma, pero en algún momento vendrá la tormenta. Hacer previsiones sobre cuándo lo hará es imposible, aunque en el actual entorno yo no recomendaría ser muy agresivo”. Su consejo en este entorno es muy claro: lo más adecuado no es hacer predicciones, sino elaborar distintos escenarios en los que poder analizar cómo se comportaría la estrategia (leer más).
¿Qué habrán de tener en cuenta los gestores de renta fija del futuro? Para David Leduc, director de inversiones de Standish, filial de BNY Mellon IM, la gestión activa resultará absolutamente crítica para conseguir lo que quieren los inversores para sus carteras. “Lo importante es cómo se asignan los activos de renta fija dentro de la cartera, hay que aprovechar las distintas herramientas de las que dispones para reducir el riesgo”, afirma. Para él, el acercamiento será cada vez más oportunista, más flexible y más activo para acceder a todas las oportunidades que ofrezca el mercado. “Excepto en entornos donde hay una elevada correlación, existen mercados en los que siempre hay algo que hacer dentro del universo de renta fija. Los inversores deberían buscar la máxima diversificación”, explica (leer más).