La gestora de este popular fondo de renta fija emergente de M&G Investments revela a FundsPeople su posicionamiento actual, los últimos movimientos realizados en la cartera y su visión de mercado.
La fuerte subida de los rendimientos de la deuda pública y la creciente aversión al riesgo de China han contribuido a aumentar la volatilidad en los mercados emergentes desde hace unos meses. Con la crisis inmobiliaria en China en particular dominando titulares en las últimas semanas, Claudia Calich, gestora del M&G (Lux) Emerging Markets Bond, fondo con Sello FundsPeople 2021, con las calificaciones de Blockbuster y Consistente, no tenía exposición en el fondo a Evergrande desde hace meses. Y hoy tampoco cree que la crisis que atraviesa la compañía vaya a golpear a su cartera. “A pesar de algunos efectos de contagio que causan debilidad entre otros emisores asiáticos de alto rendimiento, las posibilidades de un riesgo de contagio grave parecen relativamente contenidas”, afirma en una entrevista con FundsPeople.
Según explica, los mayores bancos chinos tienen poca exposición directa al mercado inmobiliario. Su hipótesis de base sigue siendo que el gobierno permitirá una reestructuración ordenada si es necesario, para reducir el riesgo sistémico. “El mercado chino de grado de inversión denominado en dólares ha demostrado ser resistente hasta ahora. No hemos observado un pánico excesivo en los mercados de financiación. Esto sugiere que los inversores comparten la opinión de que se trata de un problema específico del sector”, argumenta.
Visión macro favorable para la clase de activo
En términos más generales, la gestora se muestra convencida de que el entorno macroeconómico mundial sigue siendo favorable para los mercados emergentes. “La reapertura mundial, incluidos unos datos macroeconómicos bastante sólidos, a pesar de los persistentes temores inflacionistas, y unos buenos beneficios empresariales siguen apoyando a la clase de activo. Evidentemente, muchos inversores están observando de cerca a los principales bancos centrales por si se produce algún cambio en el sentimiento a partir de ahora. Sin embargo, se prevé que el crecimiento siga recuperándose hasta 2022, y que la presión inflacionista -aunque sea menos transitoria de lo que se preveía en un principio- acabará cediendo”.
También subraya que las vulnerabilidades externas entre los mercados emergentes son menores que en 2013, lo que debería apoyar a muchos emisores soberanos. “Las valoraciones de los bonos emergentes se comparan favorablemente con las de los mercados desarrollados. Estamos encontrando bolsas de valor entre algunos emisores de alto rendimiento y algunas monedas locales en particular”, revela.
Posicionamiento actual de la cartera
Calich sigue manteniendo un enfoque flexible en la clase de activo, con un posicionamiento basado en una cartera globalmente diversificada de bonos gubernamentales, cuasi gubernamentales y corporativos de mercados emergentes en moneda extranjera y local. “Nuestra filosofía de inversión de ir a cualquier parte nos permite seleccionar las oportunidades de inversión que consideramos más atractivas, sin limitaciones por el índice de referencia, entre un universo de bonos muy diverso y en rápida expansión”.
Los activos en hard currency siguen constituyendo la mayor parte de su exposición. Ha sido el segmento en emergentes que mejor se ha comportado durante el tercer trimestre. “Nuestra exposición global se sitúa en torno al 70%, siendo la deuda pública la mayor representada con el 42%”.
La gestora afirma haber mantenido una pequeña infraponderación en la deuda en moneda local, siendo el peso mexicano la más importante entre ellas (3% de la cartera). Está también sobreponderada a los emisores de mayor rendimiento en la actualidad. Aquí ha estado añadiendo selectivamente nombres que ofrecen un valor atractivo, especialmente entre los emisores soberanos denominados en dólares, donde sigue sobreponderada. Por el contrario, está ligeramente infraponderada en la duración de Estados Unidos.
Últimos cambios realizados en la cartera
Calich se ha vuelto cada vez más cautelosa respecto a las valoraciones al alza a medida que avanzaba el año. En consecuencia, ha tratado de reducir el riesgo en algunas áreas. “Por ejemplo, en julio compramos algunos yenes japoneses, adoptando una posición más defensiva en general. También vendimos una parte de la exposición inmobiliaria china que, en nuestra opinión, no se había revalorizado lo suficiente. Mantenemos una exposición pequeña pero muy diversa en el país, dada la actual incertidumbre y las energéticas medidas recientes del gobierno sobre sectores como la educación y el juego”.
Más recientemente, en septiembre, ha sido bastante activa en el mercado primario. Compró nuevas emisiones en Nigeria, Maldivas, Hungría, Egipto y Turquía. Todas ellas operaciones de valor relativo financiadas con la venta de bonos existentes en sus respectivas curvas de rendimiento.
En el ámbito corporativo, compró nuevas emisiones de Adani Green Energy (India), Access Bank (Nigeria), Total Play (México) y el conglomerado sudafricano Bidvest. Vendió su exposición al Aeropuerto Internacional de Tocumen (Ciudad de Panamá) después de haber obtenido un buen rendimiento, rotando hacia bonos soberanos del mismo país. También se salió de Absa Bank (Sudáfrica), Burgan Bank (Omán) y Tabreed (EAU) por motivos de valoración.