Fund Manager Survey: más optimismo, que no euforia, en las carteras de los gestores

Hans Eiskonen en Unsplash

Sigue mejorando el optimismo entre los gestores profesionales, pero aún estamos muy lejos de un sentimiento eufórico. Según el último Fund Manager Survey de BofA, correspondiente a febrero, los gestores siguen estando pesimistas, pero en menor medida. Hay una mejora intermensual de todos los indicadores clave de confianza y un cambio de posicionamiento que pone de manifiesto un mayor apetito por el riesgo. Pero la encuesta a gestores aún no es lo suficientemente optimista como para decir que el posicionamiento es un catalizador de venta.

Un mes más los niveles de liquidez se han reducido, pero tímidamente. Del 5,3% al 5,2%. Ahora el porcentaje de caja medio se sitúa en línea con el nivel en el que se movía justo antes del estallido de la guerra en Ucrania.

Desaparecen los temores de recesión

Esto coincido con el hecho de que las previsiones de una recesión tocaron pico el pasado noviembre. En la encuesta de ese mes el 77% de los gestores veía una recesión en los próximos 12 meses. Ahora, solo el 24% así lo afirma. Es el nivel más bajo desde junio de 2022. Y como bien apuntan desde BofA, los anteriores picos en los temores de recesión coincidieron con el inicio de importantes mercados alcistas en los precios de los activos. Por ejemplo, marzo de 2009 o abril de 2020.

Y es que el sentimiento macroeconómico sigue siendo bajista, pero ahora es el menos bajista desde el inicio de la guerra entre Rusia y Ucrania. Tan solo el 35% (neto) de los encuestados por BofA espera una economía más débil en los próximos 12 meses, la cifra más baja desde febrero de 2022. También mejora desde niveles deprimidos las expectativas de beneficios empresariales.

Expectativa de tipos de interés y posicionamiento

Ese optimismo dovish con la inflación (el 83% neto espera un IPC mundial más bajo en los próximos 12 meses) y la Reserva Federal están aumentando. El 47% de los inversores encuestados esperan tipos a corto plazo más bajos en los próximos 12 meses, la cifra más alta desde marzo 2020. No obstante, el consenso cree que el tipo de interés de los fondos de la Fed alcanzará un máximo del 5,0-5,25%. Esto implica 50 puntos básicos más de subidas de tipos, con la última alza telegrafiada para la reunión de mayo.

Pero de nuevo, toda esta mejora del sentimiento parte de un punto deprimido. La encuesta a gestores aún no es lo suficientemente optimista como para decir que el posicionamiento es un catalizador de venta. Si hubiera que señalar un punto de euforia, sería en mercados emergentes. En febrero se produjo un gran salto en la asignación a los valores de los mercados emergentes. El aumento en tres meses (febrero frente a noviembre) fue de nada menos que 51 puntos porcentuales, el mayor registrado hasta la fecha.

En el posicionamiento intermensual, los inversores se retiraron de los activos defensivos. El 25% neto están sobreponderados en salud, el 16% en utilities. Además, ha aumentado la asignación a activos cíclicos. El 22% están sobreponderados en bancos y el 9% en consumo. En comparación con los últimos 10 años, los inversores están largos en bonos, bancos, mercados emergentes, efectivo e infraponderan renta variable, tecnología y EE.UU.