Ventajas e inconvenientes de invertir en mercados frontera

Africa
Sergio.agostinelli, Flickr, Creative Commons

¿Mercados frontera? Los expertos coinciden en que siguen siendo los grandes desconocidos. “Muchos inversores creen erróneamente que los mercados frontera hacen referencia a países pobres, pero lo cierto es que se trata de una clasificación comercial creada por MSCI que incluye 25 países de Europa, África, Oriente Próximo, Asia y Latinoamérica con perfiles muy diversos y un denominador común: mercados de capitales relativamente nuevos y poco desarrollados”, explica Rami Sidani, gestor del fondo Schroder ISF Frontier Markets Equity.

En un reciente informe de la gestora, Sidani se muestra muy optimista con respecto al potencial de estos mercados: “Los mercados frontera ofrecen grandes oportunidades de inversión porque no son muy conocidos y por tanto aún no están muy explotados, pero presentan unas enormes perspectivas de crecimiento para los próximos cinco o seis años. Se trata de mercados que crecen a una tasa media anual del 6%, que controlan un porcentaje significativo de los recursos naturales del planeta y que cuentan con una población muy joven, algo que resulta positivo para la expansión económica y el crecimiento del consumo”, apunta el gestor.

Mark Mobius, el gurú de los emergentes de Franklin Templeton Investments, coincide en que los mercados frontera son una apuesta muy atractiva. “Teniendo en cuenta que las rentabilidades de los activos más seguros rozan mínimos históricos, el potencial de rentabilidad de los mercados frontera resulta cada vez más interesante para los inversores (el índice MSCI Frontiers Markets ha avanzado más del 17% en 2013) y, de hecho, estos mercados han seguido registrando entradas de capitales estos últimos meses mientras los emergentes sufrían reembolsos”.

Además, como señala el experto en su último comentario de mercado, “los mercados frontera están baratos con respecto a otros mercados más desarrollados, entre otras cosas porque muchos inversores se ven intimidados por la falta de información. En nuestra opinión, este desconocimiento genera anomalías en las valoraciones que intentamos explotar mediante nuestros vastos recursos de análisis y la presencia local”.

Principales obstáculos

No obstante, los mercados frontera no están exentos de riesgos. “Uno de los riesgos más habituales en estos mercados es la liquidez, que puede ser un arma de doble filo”, explica Mobius. “Invertir en un mercado poco desarrollado puede dificultar la negociación a precio justo de mercado pero, por otro lado, la falta de liquidez nos permite comprar los valores que nos interesan a precio de saldo, por falta de demanda, y beneficiarnos de la revalorización”.

Los gestores que invierten en mercados frontera siguen muy de cerca también el riesgo político. “Las estructuras políticas y el grado de estabilidad institucional varían entre los diferentes países de mercados frontera, pero no hay razón para pensar que el riesgo político sea mucho mayor que en los países de mercados emergentes”, afirma Sidani, quien aboga por gestionar el riesgo mediante un proceso de inversión disciplinado y una cartera bien diversificada.

¿Dónde está el valor?

Para el gestor de Schroders, “los factores de crecimiento de los mercados frontera no solo muestran una escasa correlación con los mercados desarrollados y con los emergentes, sino también entre ellos, por lo que ofrecen importantes beneficios de diversificación. En los próximos años, los mercados frontera se convertirán en una clase de activos imprescindible en las carteras de los inversores internacionales”.

En Franklin Templeton se decantan por el continente africano, particularmente por Nigeria, Kenia y Ghana. “Aunque existen otros muchos mercados frontera interesantes, como Catar, Emiratos Árabes, Arabia Saudí, Rumanía, Kazajstán y Vietman”, apostilla Mobius. Schroders también ve valor en Emiratos Árabes, Catar, Kazajstán, Omán, Ucrania, Arabia Saudí, Georgia y Vietnam, pero están infraponderados en Nigeria y Kenia y no tienen exposición a países como Rumanía, Croacia, Túnez o Jordania, entre otros.