¿Gran rotación? No, estamos ante la gran reversión

Koesterich
Foto cedida

El mensaje transmitido hace un año por Ben Bernanke, ya ex presidente de la Reserva Federal, al plantear la posibilidad de empezar a subir los tipos de interés en un futuro aún indefinido, fue el pistoletazo de salida para las predicciones sobre una Gran Rotación: inversores vendiendo renta fija para comprar renta variable. Sin embargo, tal y como constata el estratega jefe de BlackRock, Russ Koesterich, no se está produciendo este movimiento. De hecho, desde la gestora -la mayor del mundo por volumen de activos bajo gestión- perciben lo contrario, “aunque creo que la historia de la renta variable todavía es bastante fuerte”, puntualiza Koesterich. 

El experto aporta algunos datos. Por ejemplo, en la semana que terminó el 7 de mayo los inversores vendieron 9.000 millones de dólares en bolsa, mientras que emplearon más de 9.000 millones en comprar participaciones de fondos de renta fija, de los cuales cerca de 3.000 millones entraron en fondos cotizados que replica el comportamiento de los treasuries. “Pese a que los beneficios corporativos han permanecido sólidos y los datos económicos han apuntado a una mejora de la economía, los inversores han estado rotando dinero de acciones a bonos”, resume el estratega. 

Koesterich especifica que, durante algún tiempo, “las ventas han sido más agudas entre los líderes de los últimos años, el crecimiento y las áreas con momento del mercado”. En base a los movimientos que ha detectado en las últimas semanas, el experto de BlackRock señala que el patrón que se está dando actualmente es de rotación desde compañías de menor capitalización y de valores con sesgo growth hacia grandes capitalizadas y acciones con sesgo value. 

¿Por qué se sigue invirtiendo en renta fija?

¿Qué ha estado sucediendo mientras tanto en el universo de renta fija? “Los inversores todavía están derramando dinero sobre fondos de renta fija, ayudando a mantener los rendimientos obstinadamente bajos”, afirma Koesterich, que enumera una serie de factores que pueden explicar esta situación. El primero, en su opinión, es que ha caído el apetito por el riesgo: “Aunque los parqués están en muchos casos ignorando los acontecimientos en Ucrania, la aversión al riesgo está ayudando a dirigir dinero hacia los treasuries". De acuerdo con el análisis de BlackRock, el riesgo geopolítico está recortando un 0,25% de las tires. 

La segunda explicación a estos movimientos reside en la política monetaria de la Fed, cuyas acciones y declaraciones están ayudando a mantener bajos los rendimientos. El estratega explica que, al subrayar Janet Yellen en un discurso reciente las preocupaciones en torno al mercado inmobiliario, los inversores lo han interpretadon como una pista de que el banco central seguirá manteniendo su política acomodaticia dada la fragilidad de la recuperación. “A pesar de las ventas, aún creo que las acciones ofrecen más valor que los bonos”, destaca Russ Koesterich. “Dentro del mercado de renta variable, sin embargo, continúo abogando por acoger a algunos de los perdedores del año pasado y adoptar un sesgo general hacia las áreas orientadas al valor, como las grandes capitalizadas y las mega caps”, añade. 

El experto de BlackRock termina su análisis con una advertencia: “A medida que más inversores se muevan hacia áreas relativamente más seguras del mercado, algunos de los sectores defensivos, incluyendo salud, consumo básico y eléctricas, están empezando a parecer bien valoradas. En particular, sugeriría recortar posiciones en eléctricas estadounidenses, que parecen caras y vulnerables a la subida gradual de tipos de interés, que creo que se producirá durante la segunda parte de este año”.