Guillaume Abel (Mirova): “Vamos a seguir creciendo, estamos en el momento adecuado en el lugar adecuado”

Abel Guillaume
Foto: cedida por Mirova.

La firma Mirova, la filial de Natixis Investment Managers dedicada a la inversión sostenible, ha cumplido 10 años. Guillaume Abel, CEO adjunto de la gestora, reflexiona sobre lo alcanzado y sobre las perspectivas para la inversión sostenible.

Abel comienza recordando los inicios de la gestora: “Fuimos creados en 2012. En ese momento solo teníamos 3.000 millones de activos bajo gestión, hoy contamos con 28.000 millones. Hemos crecido muy, muy rápido”. En su opinión, hay tres razones principales que explican esta expansión. “En primer lugar, creo que está el motivo por el que fuimos creados: nuestro objetivo de participar en hacer del mundo un lugar más sostenible gracias a la inversión” apunta. “La segunda razón es que somos internacionales desde casi el principio. Somos una empresa muy joven, pero ya estamos presentes en ocho países en cuatro continentes”, añade. En cuanto a la tercera razón para explicar el rápido crecimiento, Abel destaca la implicación y el compromiso de todos los equipos de la gestora en su empeño por “transformar la economía y preservar y restaurar los ecosistemas, el clima y promover la inclusión social, la salud y el bienestar”.

Las claves de la estrategia

2022 fue un ejercicio complicado para la inversión sostenible, aunque Abel señala que no tanto para Mirova. “Tuvimos unas entradas netas de 3.300 millones de euros, y hemos seguido creciendo en todo el mundo. Fue difícil, pero lo estamos haciendo bien”, puntualiza.  “Además, hemos hecho adquisiciones importantes, como Sun Funder en Kenia. Se trata de una compañía de inversión que financia proyectos de energías renovables en África y Asia. Supone ampliar nuestro impacto en África”. El directivo explica que terminarán la integración en los próximos meses y que planean hacer más adquisiciones en el futuro. “Hemos invertido mucho en activos cotizados, también y es importante, en activos privados en Europa, pero queremos seguir invirtiendo para tener impacto en los mercados emergentes”.

Otro punto fundamental de la estrategia de Mirova es la investigación y la innovación en ASG. “Siempre hemos sido líderes y queremos seguir siéndolo. Queremos seguir siendo una referencia y vamos a utilizar las nuevas tecnologías para enriquecer el marco analítico y también para tratar de tener una mejor medición del impacto de lo que estamos haciendo”. El último punto de la estrategia se basa en mejorar la protección contra los potenciales riesgos de controversia.

Cómo generar impacto

En un momento en el que ya se habla de impact washing, le preguntamos a Abel, por la creación de impacto para Mirova. “Tenemos activos cotizados, y en este caso invertimos en compañías que actúen en áreas como el cambio climático, la biodiversidad, el capital humano, el desarrollo humano. Y en renta fija, obviamente en bonos verdes”, detalla. Mirova invierte, además, en activos privados. “Aquí la transición energética es algo muy importante para nosotros, pero también el capital natural. Cuando hablamos de capital natural, nos referimos a la restauración del suelo, o a la economía azul, o la economía circular”. Además, en capital riesgo de impacto invierten en temas como ciudades inteligentes, gestión de recursos naturales y tecnologías agroalimentarias.

Para abarcar toda esa labor, Mirova cuenta con más de 18 analistas de ASG. También trabajan con proveedores de datos externos que proporcionan información cuantitativa y cualitativa. Abel explica que “para todas las inversiones hacemos un análisis específico cuantitativo y cualitativo”. La gestora se plantea la forma más eficiente del acceso y la gestión de los datos, así como el uso de nuevas tecnologías como la inteligencia artificial, entre otras “Por ejemplo, la información que podemos obtener de los satélites podría ayudarnos a realizar evaluaciones o informes concretos para nuestros clientes, de modo que estos son temas en los que estamos trabajando y veremos si pueden ayudarnos a ir más allá y mantener nuestro liderazgo en este campo” añade.

La SFDR y los artículos 9

La entrada en vigor del nivel 2 de SFDR ha dado lugar a muchas rebajas de fondos artículo 9 a artículo 8, hasta el punto en el que muchos se preguntan si la intención del regulador europeo es que no haya fondos de acciones cotizadas que sean artículo 9. Además, una firma global tendrá que hacer frente a diferentes regulaciones en distintos mercados. A pesar de esto, Abel se declara optimista y asegura que siempre se adaptarán a la regulación, aunque en ningún caso cambiarán su filosofía de inversión. “Obviamente, sería mejor si tuviéramos una regulación que fuera global porque la heterogeneidad de los requerimientos de los reguladores requiere de más recursos, pero no es un problema que nos bloquee”, subraya.

Abel tiene claro sus objetivos para los próximos diez años: seguir siendo líderes y ser la referencia en inversión de impacto. “Algunos inversores aprecian realmente la inversión ASG y A algunos no les gusta la en absoluto. Pero estoy seguro de que creceremos, queremos alcanzar los 50.000 millones de activos bajo gestión, en tres o cinco años”, asegura.