La entidad espera una reapertura de las economías durante el próximo año, con tasas de crecimiento superiores al 5% en las principales regiones en 2022 y, posteriormente, entre el 2% y el 3% para el 2023. Un entorno donde la inflación podría seguir repuntando. En los próximos meses, los expertos de BNP Paribas WM consideran que el principal riesgo es que los elevados niveles de inflación puedan provocar un bucle en los precios y salarios. Por eso, aconsejan mirar las expectativas de inflación y el mercado laboral.
Mientras tanto, la presión sobre los bancos centrales sigue aumentando. La Fed ha reducido las compras de bonos en los próximos meses y no esperan que suba tipos antes de mediados de 2022. Por su parte, esperan que el BCE lo haga a mediados de 2023. Entienden que el papel de los bancos centrales es "convencer a inversores y a consumidores de que el actual repunte de la inflación es transitorio y de que disponen de las herramientas necesarias para intervenir", justitican.
"Vivimos actualmente en un mundo que ha experimentado un profundo cambio estructural, acelerado por la pandemia y por los correspondientes confinamientos", ha explicado Ángel Borrego, director de Inversiones de BNP Paribas WM. Por eso, aconsejan invertir en estos cambios: "Para definir nuestros temas de inversión recomendados para 2022 nos centramos principalmente en las oportunidades vinculadas al contexto inflacionista, la innovación, la economía circular - que creemos que se convertirá en algo fundamental para la reducción de los residuos y de las emisiones de carbono-, y la versión futura de Internet: el metaverso", adelanta.
Temáticas
Los incentivos fiscales de los gobiernos y los estímulos monetarios de los bancos centrales conducirán a la recuperación económica. Estas medidas también conducirán a una inflación superior a la de los años pasados, siendo probable que esto continúe en el tiempo. Por eso, desde BNP Paribas WM sitúan la inflación como una de estas temáticas de inversión para el próximo año. Para cubrir las carteras frente a este riesgo de inflación, recomiendan invertir en bonos soberanos ligados a la inflación, fondos de bonos flexibles o absolutos, acciones o fondos de renta variable que puedan beneficiarse de esta mayor inflación, incluidos los valores cíclicos y “value”; así como en materias primas como los metales preciosos y los metales básicos relacionados con la fabricación de baterías eléctricas.
Por otra parte, y en función del perfil del inversor, recomiendan comprar bonos verdes, fondos de private equity relacionados con el crecimiento y acciones temáticas, fondos de renta variable y ETFs (digitalización, inteligencia artificial, blockchain, ciberseguridad, pero también equipos para la extracción minera y de petróleo o en los ámbitos de la salud y la telemedicina).
Al mismo tiempo, citan la economía circular como otra de sus inversiones, que favorece la reutilización y el reciclaje a la vez que tiene como objetivo reducir las emisiones de carbono. Por eso recomiendan incluir en las carteras fondos de renta variable y ETFs basados en la economía circular, fondos de private equity centrados en la sostenibilidad, fondos de energías renovables y fondos de bonos verdes para promover la inversión sostenible.
En gran medida, consideran interesante invertir en las pequeñas y medianas empresas y aconsejan hacerlo a través de fondos y ETF. Y por último, citan los fondos temáticos y ETFs que se centren en el Metaerso. Es decir, temáticas como la digitalización, inteligencia artificial, pago electrónico, ciberseguridad, etc. Así como fondos de private equity con enfoque tecnológico, empresas inmobiliarias y fondos que invierten en torres de telecomunicaciones 5G.
