UBS Asset Management ha hecho una apuesta por la incorporación de criterios ESG en su gama de productos de renta fija. Esta integración difiere sensiblemente de la de renta variable, donde la aplicación de criterios medioambientales, sociales y de buen gobierno (ESG) cuenta con una mayor implantación desde hace años. Hoy en día, existen diversas fórmulas que van desde la más sencilla, la exclusión de algunos sectores e industrias, hasta la inversión directa en proyectos sostenibles, pasando por fórmulas intermedias que tiene que ver con la inclusión en índices con estándares ESG.
“La aplicación de los criterios ESG a la renta fija no es una cuestión baladí, ya que existen algunas limitaciones que no tiene la renta variable; así, por ejemplo, los distintos derechos de los tenedores de bonos, las limitaciones de tiempo de tenencia de los mismos...”, explican desde la firma suiza.
En UBS AM han creado una metodología basada en la integración de equipos, de manera que los analistas de crédito de la gestora trabajan conjuntamente con los analistas expertos en ESG para generar la mayor integración posible. Concretamente, cuentan con una estrategia basada en tres pilares:
1. Todo comienza por el Análisis de Materialidad. “Nuestro equipo desarrolla un estudio de materialidad basado en los estándares de sostenibilidad y de rendición de cuentas del consejo, las metodologías de los proveedores de datos ESG y las conversaciones de cada uno de los analistas de crédito y de renta variable. El estudio cubre los distintos factores que resultan materiales, es decir, que pueden tener impacto en la inversión, tales como temas relacionados con el medio ambiente, las condiciones laborales, los aspectos de gobierno corporativo y de ética empresarial, etc. Todos estos aspectos tienen un potencial impacto en las inversiones a largo plazo, tanto desde el lado del emisor como desde el lado del inversor”, explican.
2. En segundo lugar, una vez se ha llevado a cabo el análisis de materialidad, los analistas de crédito hacen una valoración de las fortalezas y debilidades en términos de ESG de cada uno de los emisores de deuda. Es lo que denominan Análisis de Fundamentales. Para realizar esta valoración se centran principalmente en el impacto que estos factores puedan tener a la hora de conceder un crédito, así como el perfil de riesgo del emisor. También, tienen en cuenta si se ha producido algún tipo de escándalo que pueda comprometer la viabilidad futura del emisor.
A continuación, los analistas financieros determinan el peso que cada uno de estos factores medioambientales, sociales y de gobierno corporativo tienen en la concesión del crédito y les otorgan una puntuación. Después establecen una escala de riesgos de tipo ESG, pudiendo llegar a modificar las opciones de crédito.
En último lugar, llevan a cabo un Registro de Resultados vía UBS ESG Score, que básicamente requiere tres decisiones clave para nuestros analistas de crédito acerca de cada emisor de deuda en particular: ¿qué impacto real tienen los factores de sostenibilidad en la determinación del crédito? ¿Qué dirección tomarán estos factores? ¿Puede el análisis ESG modificar la opinión respecto a la concesión o no de un crédito?
“Integrando los factores ESG en nuestra plataforma de renta fija estamos dando un paso más en la integración de los aspectos sostenibles en nuestra gestión de activos. Apostamos por el largo plazo y las soluciones de futuro, por eso estamos convencidos en que el mundo inversor seguirá dando pasos para integrar la sostenibilidad en el ámbito inversor tanto en renta fija como variable”, concluyen.
