Inverco cifra en 4.000 millones el ahorro que se ha perdido con los límites en aportaciones a pensiones en los últimos dos años

Dinero, billetes, renta fija
Firma: Imelda (Unsplash)

El último trimestre del año ha sido históricamente el gran periodo de captación en planes de pensiones. Sin embargo, las estimaciones del sector para este año no son demasiado positivas y no solo porque el mal comportamiento de los mercados puede provocar un rechazo de los participes a aportar dinero a sus planes de pensiones sino también porque los que lo vayan a hacer tienen limitadas sus aportaciones a 1.500 euros anuales.  

Este recorte, unido al visto en 2021 cuando se bajó el tope de aportación de 8.000 euros a 2.000 ha supuesto que la industria de planes de pensiones haya dejado de ingresar una gran cantidad de dinero. De hecho, Ángel Martínez Aldama, presidente de Inverco, ha puesto hoy cifras en el encuentro informativo los beneficios del ahorro privado organizado por ING y Europa Press. "En 2020 hubo una masa de ahorro a corto plazo y a largo plazo el problema es que los límites que ya existían han imposibilitado que 4.000 millones de aportaciones que había de más en el año 2020 no hayan podido ir a ese ahorro para la jubilación ni en 2021 o 2022", explica. "La reducciones de las aportaciones no convergen con lo que está sucediendo en Europa. Somos los terceros por la cola. En 30 años nos quedamos con menos de la mitad de lo que se consigue en Europa en ahorro en pensiones", apunta Antonio Fernández Vera, director de Renta 4 Gestora.

De hecho, según los datos de Inverco, solo este año hasta septiembre el volumen acumulado en aportaciones brutas era de 2.039 millones de euros, lo que supone un 17% menos que en el mismo periodo de 2021. Aun así, con nombres y apellidos, el 41% de las gestoras consiguen aún aportaciones netas positivas.

Esta limitación en aportaciones es una de las razones que han limitado el potencial que presenta el negocio de planes de pensiones individuales pero no es la única. "Ya era un mercado con potencial limitado por el envejecimiento de la población y ahora aún más con los límites de las aportaciones", explica Francisco Quintana,  director de estrategia de inversión de ING. Calcula que además es muy poco el ahorro que ante las limitaciones de pensiones se ha trasladado a otros productos de ahorro de largo plazo. "Solo el 7% de los clientes que aportaban por encima del límite han transferido ese dinero a otros productos de inversión sino que han optado por dejarlo aparcado en las cuentas o depósitos", afirma.  Y recuerda un dato abrumador: por cada euro en planes de pensiones, hay 10 en un depósito o cuenta corriente.

Impacto de alargar el cálculo de la pensión

En la jornada también hubo tiempo para debatir de dos de las noticias relacionadas con pensiones que más titulares están ocupando últimamente: los fondos de empleo de promoción pública y la idea de alargar los años de calculo de la pensión de 25 a 30. Sobre lo segundo, la idea general es que este cambio implicará una reducción de la tasa de sustitución de la pensión pública sobre el último salario, que ahora en España es de las más altas de Europa debido al sistema de reparto del sistema público. "La alta tasa de sustitución se va a ir deteriorando debido a las últimas noticias. Alargar los años de cálculo a 30 implica que la pensión se va a reducir. La gente joven tiene que ser consciente de que las pensiones del futuro no serán tan buenas como en el pasado y además los gastos en el futuro van a ser mayores en temas relacionados con la dependencia y la salud", afirma Fernández Vera.

Sobre los fondos de empleo públicos

En cuanto a los fondos de empleo, hay un cierto pesimismo a la hora de pronosticar su éxito a corto plazo. Una de las razones es que no se espera que el sistema esté en funcionamiento en la primera parte de 2023. "En primavera o verano es cuando entrará el reglamento y tenemos pendiente el pliego de condiciones que en el mejor de los casos se adjudicará en mayo del año que viene", explica Aldama. Y otra es que su éxito dependerá mucho de lo que se negocie en los convenios sectoriales. "Tardaremos 4 o 5 años hasta que se revisen todos los convenios salariales para ver si se implementan estos productos. No es la ley que necesitábamos ahora", explica el presidente de Inverco.