En una entrevista con FundsPeople, el responsable de la gestora francesa para Iberia y Latinoamérica habla sobre la evolución del negocio de la entidad, el plan estratégico de crecimiento que se han fijado de cara al futuro y su visión sobre la industria en España.
Se han cumplido ya siete meses desde que Juan Rodríguez-Fraile tomase las riendas de Groupama Asset Management en España, un proyecto que -tal y como explica en una entrevista con FundsPeople- ha cogido “con muchas ganas e ilusión”. Durante este tiempo, que ha sido muy intenso, el responsable de Ventas de la gestora francesa para Iberia y Latinoamérica ha aprovechado para preparar el plan estratégico de una entidad que, a lo largo de los últimos años, ha ido experimentando un constante crecimiento patrimonial, que la ha llevado a posicionarse como una de las gestoras internacionales de referencia tanto en el mercado español como latinoamericano.
“Actualmente, en la oficina de Madrid gestionamos 4.000 millones de euros, de los que 1.000 proceden de inversores latinoamericanos, principalmente de Colombia y Perú, donde hemos alcanzado una cuota de mercado muy significativa”, revela. El 2021 pasará a la historia como otro buen año para la entidad. A nivel global, cerraron el ejercicio por encima de los 120.000 millones, siendo la segunda gestora gala por entradas netas. Han captado 9.000 millones, de los que más de 600 corresponden a la oficina que dirige.
Evolución del negocio de la oficina
En lo que respecta a la evolución del negocio local, la ambición de Juan Rodríguez-Fraile y su equipo, del que forman parte Sergio López de Uralde como responsable de desarrollo de negocio, y Maya Montes-Jovellar del departamento de Marketing y Servicio al Cliente, es llegar a los 5.000 millones. “Hay que ponerse objetivos para intentar alcanzarlos. La fotografía actual es muy bonita, pero todavía queda mucho por hacer. En algunos mercados aún no tenemos mucha penetración, como el chileno o el portugués. En estas regiones queremos hacer un gran esfuerzo por desarrollar el negocio promocionando nuestra gama”.
El plan estratégico diseñado por Rodríguez-Fraile tiene como objetivo diversificar por activo, cliente y región para crecer de manera sostenida, consolidar su posición en el mercado y mantener la calidad del servicio. “Todo ello posicionando a la entidad como una gestora multiactivo y dando a conocer la amplia gama de soluciones que ofrecemos, que a veces no son del todo conocidas. A menudo, el inversor se queda con un cliché y no repara en toda la oferta que ponemos a su disposición”. En este sentido, la firma está revisando y actualizando toda la gama. “Estamos analizando la oferta actual para determinar dónde debemos innovar para seguir creciendo en el futuro”.
Los pilares del plan estratégico de Groupama AM
Este ejercicio es uno de los tres pilares incorporados al plan estratégico que la consejera delegada de Groupama AM, Mirela Agache, se ha fijado como prioridad. “En esta tarea, se está viviendo una auténtica revolución dentro de la casa. Para desarrollar la gama de fondos del futuro, se está trabajando a todos los niveles: dirección general, comité directivo, equipos de gestión, comerciales, marketing, comunicación, ASG… Existen muchos retos dentro de la industria. Está el auge de los fondos temáticos, el ser capaces de ofrecer rentabilidades en el segmento más tradicional (monetarios, renta fija…), el cada vez mayor interés por los activos ilíquidos… Hay que darles respuesta”.
En Groupama AM están haciendo el filtrado para determinar con qué capacidades de gestión cuentan ya y de qué manera deben innovar para reforzar su gama. “Esto es clave porque el mundo está cambiando rápidamente y tienes que ofrecerle al cliente soluciones nuevas que cubran unas necesidades que son muy distintas a las que tenían años atrás. No hay más que ver cómo ha cambiado la industria en la última década. Si te remontas a 2011, todo lo que era la ISR prácticamente ni existía y hoy es uno de los pilares fundamentales de la industria. Y lo mismo ha ocurrido con la gestión pasiva. Hace 10 años apenas había patrimonio en estos vehículos. Ahora sí”.
Foco en la innovación
Para afrontar los retos futuros, lo que buscan en la firma es dar con la tecla de lo que realmente necesita el inversor. Un claro ejemplo es lo que están haciendo en el mundo de los alternativos ilíquidos, donde se están centrando en private debt, dándole una vuelta importante a la manera de gestionar el activo. O la innovación aplicada en categorías más plan vanilla, como renta variable value, donde este año han lanzado un nuevo producto. A la hora de presentarles las nuevas ideas a los clientes españoles, en un entorno marcado por el COVID-19, en la entidad se han alejado de los grandes eventos para centrarse en formatos más reducidos, interactivos y personales. “Te permiten generar un vínculo más estrecho con el cliente”, reconoce.
Otro de los pilares fundamentales que está en el plan estratégico de la alta dirección de Groupama AM es la digitalización y la transformación tecnológica de la compañía, así como el gran tema que está sobre la mesa de todos los CEO de la industria, la ASG, una filosofía de inversión donde, según Rodríguez-Fraile, la entidad cuenta con una ventaja competitiva muy clara.
Posicionamiento en el mundo de la ASG
“La ASG está dentro del ADN de la compañía. Nuestra fortaleza en esta materia la demuestran los hechos. Este año estamos celebrando el vigésimo aniversario de nuestro primer fondo ASG. Si lo hemos mantenido durante todo este tiempo es porque es algo que, como mutualidad agrícola francesa, llevamos muy dentro. Fuimos una de las casas fundadora de los PRI, hace años que incorporamos criterios de análisis extra financiero en nuestros análisis e incluso disponemos de equipos dedicados a tratar con el regulador francés para desarrollar la normativa”, argumenta.
Rodríguez-Fraile no tiene ninguna duda de que la SFDR ha sido el gran impulsor de los fondos sostenibles. “Esta regulación ha sido un buen primer paso. Había mucha dispersión entre lo que era y no era ISR. Hasta que no hubiera algo por escrito que homogeneizara todo era complicado que la industria se pusiera las pilas. Antes no tenías que demostrar nada y ahora sí. Hemos pasado de cero a cien en un periodo de tiempo muy corto. El cliente ahora nos pregunta qué fondos tienes en artículo 8 y 9. Por el momento siguen mostrando cierta flexibilidad, pero algunas ya te reconocen que dentro de poco su compañía no le permitirá comprar producto fuera de ahí”.
La transformación de la industria financiera española
A nivel regulatorio, el responsable de Groupama AM para Iberia y Latinoamérica considera que estamos en la industria más regulada. “El tsunami regulatorio que hemos vivido, lejos de parar, va a continuar”. Lo que -a su juicio- debería empezar a echar el freno es la concentración que ha experimentado el sector financiero español, algo que ha supuesto una reducción importante del número de clientes para las firmas extranjeras. “El embudo ha sido brutal. El sistema bancario español es uno de los más consolidados de Europa. Pueden producirse más operaciones de integraciones en España, pero esto es algo que veo más por el lado de las gestoras”.
Este fenómeno no ha sido ningún impedimento para que la industria en España haya seguido creciendo. Para Rodríguez-Fraile, el sector vive un momento dulce. “Los volúmenes en activos bajo gestión tanto de gestoras nacionales como internacionales están en máximos históricos. Desde que entró en vigor MiFID II, las extranjeras hemos crecido con fuerza gracias a la implantación de modelos de arquitectura abierta, el auge de los fondos de fondos, la gestión discrecional de carteras… Todo hace que los fondos internacionales hayan experimentado una demanda muy fuerte. Y todavía tienen mucho potencial para seguir aumentando sus activos”.
El futuro pinta bien para el sector
Su optimismo sobre el futuro de la industria lo fundamenta en ese casi billón de euros que actualmente hay en España en depósitos y cuentas a la vista. “Es un ahorro que poco a poco debería ir pasando a la inversión. Si un ahorrador no quiere perder poder adquisitivo tiene que mover su dinero. No queda más remedio”.
Tampoco se olvida de las grandes empresas, que hoy tienen que resolver el problema de cómo gestionar su tesorería estratégica. “Algunas grandes corporaciones están poniendo esos volúmenes en monetarios. Es una tenencia que existe en Francia. Aquí, en España, vamos a hacer una prueba piloto con distintas empresas para ver cómo podemos ayudarlas. Como casa, contamos con 30.000 millones en fondos monetarios. Tenemos una cuota de mercado en Europa muy grande y, en este segmento en el que de lo que se trata es de ir arañando cada punto básico, las economías de escala son muy importantes. Es lo que nos permite tener fondo bueno, bonito y barato”, concluye.