Han pasado cuatro meses desde que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) solicitara la suspensión de la operativa de suscripción y reembolso de dos fondos de Esfera Capital, Annapurna y Esfera Renta Variable Internacional, por su elevada exposición a valores poco líquidos del MAB. Algo que también afectó también a siete sicavs y que, en total, dejó pillados a más de 6.500 partícipes. Todos ellos, salvo el del nombre Esfera, tenían delegada su gestión en Q-Renta.
Después de estar suspendidos nueve días y de recuperar la operativa el 27 de junio, la gestora informó a través de dos hechos relevantes de la creación de compartimentos de propósito especial en los que se aislarían los activos de menor liquidez. Y Q-Renta y Trea AM llegaron a un acuerdo por el que esta última pasaría a gestionar ocho IICs.
Para que se completara el proceso tan solo faltaba que la CNMV diera el visto bueno, algo que se ha producido en la última semana para los dos fondos de inversión. Así, Trea AM pasará a gestionar estos productos “con la misma filosofía que tenían pero con la capacidad de gestión de Trea”, cuenta Eduardo Ripollés, responsable de negocio y relación con inversores.
Ambos están catalogados como fondos de inversión mixtos. Mientras Annapurna cuenta con un patrimonio de unos 24 millones de euros, Esfera Renta Variable Internacional tiene apenas 4 millones, según los datos que ofrece Morningstar.
Asimismo, se seguirá el mismo procedimiento de trasvase para seis sicavs, aunque en este caso “el proceso es más lento”, adelanta Ripollés. En concreto, se trata de K2 2006, Geiser Inversiones 2000, Gestió Plus 2000, Global Stock Picking, Sagitari 2000 y Sigma Activa.