El patrimonio gestionado por el sector crece. Pero la rentabilidad de la industria global de gestión de activos no aumenta. En 2020 se mantuvo prácticamente plana en comparación con el año anterior. Las ganancias operativas como porcentaje de los ingresos netos rondaron el 34%. Al igual que otros sectores, las gestoras de activos ahorraron costes relacionados con la pandemia, como los de viajes, personal y marketing. “Aun así, los costes agregados de la industria siguen aumentando. En 2020 lo hicieron un 3% con respecto a 2019”, revelan desde Boston Consulting Group.
Los beneficios aumentaron solo un 1% a pesar del fuerte crecimiento de los activos bajo gestión
Tal y como explican desde la consultora, aunque algunos de ellos, (por ejemplo, los que tuvieron que realizar a nivel de telecomunicaciones o las inversiones adicionales para poner en marcha modelos de trabajo remoto) pueden haber sido temporales, los costes han aumentado constantemente a medida que las gestoras de activos continúan invirtiendo grandes cantidades de dinero en el desarrollo de nuevas capacidades y tecnología.
A pesar del crecimiento año tras año experimentado por el sector, el incremento en los ingresos no fue lo suficientemente fuerte como para compensar la compresión de comisiones, que persistió en todas las clases de activos, siendo más pronunciada en la parte de gestión activa.
Con datos de Boston Consulting Group, los ingresos como porcentaje de los activos gestionados medios disminuyeron en 2020. Pasaron de 25,3 puntos básicos en 2019 a 23,7 puntos básicos en 2020. “La carga que enfrentan las gestoras de activos por la fijación de precios se hace más evidente cuando se considera a largo plazo: los ingresos como porcentaje de los activos gestionados han caído 4,6 puntos básicos en los últimos cinco años, mientras que los costes como porcentaje del patrimonio gestionado han bajado solo 2,6 puntos básicos”, indican.
El ahorro de costes no ha compensado la presión de las comisiones, lo que lleva a márgenes operativos planos
