Según las 10 principales gestoras españolas, los clientes saben que este tipo de servicios ofrecen valor en el largo plazo.
La delegación de las inversiones de los clientes a las gestoras españolas, ya sea en formato fondo perfilado o cartera discrecional, ha sido la principal apuesta de la banca española en los últimos años. Las 10 principales gestoras españolas, en su mayoría pertenecientes a un grupo bancario, han incrementando su patrimonio a través de estos vehículos de inversión.
A pesar del revés del mercado a consecuencia de la crisis del coronavirus, FundsPeople refleja que las principales gestoras confían en que los clientes saben que este tipo de servicios ofrecen valor en el largo plazo.
CaixaBank ha ofrecido a sus clientes la gestión discrecional de carteras no como un producto, sino como una solución dentro del marco de una planificación patrimonial integral a largo plazo asociada a objetivos específicos. Antes de ofrecer ningún servicio, el gestor lleva a cabo un trabajo previo muy exhaustivo con el cliente para hacerle las mejores propuestas personalizadas y ajustadas a su perfil y circunstancias concretas y únicas. Ese trabajo aporta valor precisamente en momentos como el actual; los clientes son muy conscientes de que en la ruta hacia su objetivos puede haber turbulencias, pero están preparados para soportarlas porque se han valorado previamente.
Afortunadamente, los clientes de manera abrumadoramente mayoritaria entienden que el momento actual, de elevada volatilidad y stress de mercados, no es adecuado para tomar decisiones de venta ya que ello puede suponer la materialización de pérdidas significativas. Por el contrario, están manteniendo mayoritariamente sus posiciones, ya que son conscientes de la importancia de mantener la disciplina inversora, especialmente en momentos tan complicados como el actual.
Confiamos plenamente en que este es el servicio más adaptado al cliente y es un vehículo ideal porque adapta la inversión al perfil de riesgo del cliente, lo que es esencial en momentos de volatilidad como el actual. Además, es el producto más diversificado y en este momento, marcado por la incertidumbre, esto es imprescindible.
En estos dos servicios ofrecidos a clientes es donde con mayor facilidad se va a demostrar la importancia de la diversificación y de la gestión profesional de las inversiones. En estas dos soluciones de inversión el cliente está enormemente diversificados, tanto por los activos en los que invierte como por las áreas geográficas, ya sea en activos directos como a través de otros fondos. Por todo ello, estos tipos de productos parecen los sitios más adecuados para afrontar las actuales caídas y la recuperación que todos esperamos.
Cuando se producen cambios bruscos en la percepción del riesgo es precisamente cuando más sentido tienen aquellas soluciones de inversión que ofrecen una gestión activa del nivel de riesgo mediante un ajuste dinámico de la composición de la cartera. Los clientes que se han posicionado en fondos perfilados y en servicios de gestión de carteras de fondos han comprobado el buen comportamiento y la proactividad de estas soluciones de inversión en 2019. La elevada volatilidad y los tipos de interés directores negativos aconsejan diversificar más las carteras, alargar el horizonte de inversión y posicionarse en los activos que presentan expectativas de rentabilidad positivas e interesantes. Sin duda, en esta coyuntura los fondos perfilados y los servicios de gestión de carteras de fondos ofrecen valor y merecen la popularidad que se han ganado.
Ibercaja Gestión
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Como gestores del ahorro de nuestros clientes debemos hacer pedagogía en la medida de lo posible, insistiendo que el tiempo va a nuestro favor para rentabilizar el ahorro y que delegar la gestión en profesionales es la mejor alternativa posible. El haber gestionado de forma activa y seleccionar algunos de los sectores que han tenido un mejor comportamiento ha permitido que las carteras de nuestros clientes estén solventando mejor el temporal.
La mayor parte de nuestros activos bajo gestión se encuentran en mandatos de gestión. Indudablemente, el cliente particular se apoya en los conocimientos, la información y las capacidades de los profesionales. Las estadísticas y la realidad nos demuestran que una cartera gestionada está mejor construida desde un punto de vista de diversificación y control de riesgos. La gestión discrecional sigue generando valor añadido.
Se trata de cómo se hayan vendido estos servicios. Si el cliente entiende que los profesionales a los que han encomendado sus ahorros van a tomar las mejores decisiones en cada momento con toda la información disponible, no hay problemas. En Mutuactivos no estamos sufriendo reembolsos de este tipo de clientes, con los que nos estamos poniendo en contacto de forma frecuente para tenerles completamente informados de los cambios que estamos haciendo en sus carteras para ajustar sus mandatos de riesgo al contexto actual.
Sin lugar a dudas, la clave es que el cliente este correctamente evaluado y se sienta cómodo dentro del perfil de riesgo elegido. El hecho de que en el corto plazo podamos ver caídas significativas no quiere decir que en el futuro, al ser carteras globales y bien diversificadas, los activos no recuperen sus valoraciones reales. Aunque en momentos puntuales las correlaciones aumentan significativamente, a medio plazo la diversificación y la elección correcta de activos cumplen su función de maximizar el binomio rentabilidad-riesgo.
