Lombard Odier apuntala su estrategia en 2023 a la evolución del bono americano a 10 años

Firma: Ethan Sykes (Unsplash).

La entidad ha presentado sus perspectivas para 2023 de la mano de Stéphane Monier, CIO de Lombard Odier, y Samy Chaar, economista Jefe del grupo. En su opinión, 2023 se dividirá en dos fases: antes y después del repunte en la rentabilidad del bono americano a 10 años.

Será un año de transición en la búsqueda del punto de inflexión. Por un lado, las economías se tienen que adaptar a la normalización monetaria de los bancos centrales y, por otro, está la ralentización de la actividad económica. Todo ello se traduce, han dicho los expertos, en un contexto desfavorable para los activos de riesgo. Por este motivo desde Lombard Odier infraponderan (al menos por ahora) los activos de riesgo como la renta variable. Y al contrario, sobreponderan la renta fija, focalizándose en los Treasuries americanos y deuda Investment Grade. Consideran que "las condiciones macro invitan a la cautela y hay que enfocarse en activos que puedan hacerlo mejor en un contexto de menor crecimiento y tipos más altos".

Así, buscan compañías de calidad con ingresos estables y capacidad de mantener sus márgenes. También les gustan las compañías que se adaptan a entornos asimétricos. Han implementado coberturas en las carteras a lo largo de 2022 y avisan de que seguirán "haciéndolo de manera táctica en línea con las condiciones del mercado".

De este modo, buscan esa diversificación a través de los activos alternativos. "Continuaremos favoreciendo estrategias de fondos de cobertura como global macro, diversificación y estrategias cuantitativas", explican.

Una vez se produzca el rebote

La firma dibuja otra estrategia para la segunda mitad del año, una vez que se produzca el esperado rebote en la rentabilidad real del bono americano a 10 años. A raíz de esto, consideran que se incrementará la inversión en oro, con un dólar más debilitado y recesión en China.

Así las cosas, una vez el sentimiento de mercado vaya mejorando, las bolsas irán presentando oportunidades de compra. A medida que la inflación y la amenaza de tasas más altas comiencen a desvanecerse, esperan que las valoraciones de las acciones y los múltiplos se beneficien. También esperan que el crédito High Yield recupere el atractivo con el mayor apetito por riesgo.