“Los fondos convertibles con vencimiento fijo, una buena opción en tiempos revueltos”

Jean_Luc_Hivert
Imagen cedida

En momentos de turbulencias en los mercados, la máxima prioridad del inversor es tratar de preservar el capital. Lo demuestra el fuerte auge que han tenido en España los productos conservadores a lo largo de los últimos años. La renta variable no gusta para el corto plazo, si bien es un mercado que, en opinión de muchos inversores, podría hacerlo muy bien dentro de un par de años. ¿Qué clase de productos se adaptaría mejor a este perfil de cliente? Según La Française Asset Management, la mejor estrategia sería apostar por un fondo de bonos convertibles con un vencimiento fijo, liquidez diaria y gestión activa.

Así al menos lo cree Jean-Luc Hivert, gestor del LFP Convertibles Dynamique y del LFP Convertibles 2015, producto este último dirigido a inversores institucionales que es capaz de ofrecer una rentabilidad constante a los inversores. “Si el mercado cae, el inversor logra una rentabilidad que suele estar en torno al 2% anualizado a vencimiento”, asegura. De hecho, Hivert señala que en 2008, cuando el mercado de bonos convertibles europeo cayó más de un 20%, el fondo cayó solo un 3%, lo que -a su juicio- demuestra su idoneidad en momentos de elevada incertidumbre como la actual.

Dos variables considera las más importantes a la hora de gestionar el fondo. “La primera, el precio del crédito; la segunda, saber apostar sólo por aquellas compañías de las que se tenga la certeza de que van a ser capaces de hacer frente a sus obligaciones de deuda”, indica el experto. Para ello, la gestora dispone de un equipo formado por dos gestores de bonos convertibles y cuatro de crédito “con las habilidades necesarias para aprovechar las oportunidades que brinden los bonos convertibles con vencimiento en diciembre de 2015”.

Pero, ¿qué ventajas puede ofrecer al inversor apostar por un fondo de estas características? Para el gestor de La Française AM, este producto combina las ventajas de los bonos (horizonte temporal de la inversión, rentabilidad al vencimiento…) con los clásicos fondos de bonos convertibles (diversificación del crédito dentro del universo de emisores y una gestión activa que, según Hivert, ha demostrado su eficacia en el pasado y que, en principio, pasa por crear una cesta de 50 bonos en la que la rotación suele ser baja).

“El objetivo es replicar el perfil de riesgo de un bono convertible mixto con vencimiento en diciembre de 2015 y batir dicha referencia aplicando una diversificación activa en términos de exposición a renta fija y renta variable”, asegura el gestor. “Todo ello, con una volatilidad muy reducida”, asevera. En lo que va de año, el LFP Convertibles 2015 ha logrado cosechar una rentabilidad del orden del 6%. Su mejor año fue 2009, cuando fue capaz de rentar un 21%.

Para lograr este comportamiento, Hivert reconoce que la principal apuesta se centra en el mercado francés, al que destina cuatro de cada diez euros gestionados, seguido del alemán, que acapara el 20% del total. Precisamente, es en este último país en el que se localiza la principal posición del fondo, KFW, entidad con rating triple A en el que invierte el 10% de los casi 130 millones de euros que mantiene bajo gestión. No obstante, el desglose por rating del emisor desvela que la calificación media de los activos se sitúa en BB+.

La apuesta de La Française AM por este tipo de productos es clara. Tal y como revela el propio gestor, la firma dispone de una amplia gama de fondos con vencimiento fijo a cinco años tanto en high yield como en mercados emergentes, entre otros. En total, la gestora mantiene activos bajo gestión en esta clase de productos por importe de 800 millones de euros.