“Los riesgos extremos se han reducido, aunque todavía hay margen para sorpresas negativas”

Herve
Foto cedida

El crecimiento global permanece anémico y heterogéneo. Por un lado, la eurozona coquetea con la recesión y el crecimiento del PIB de Japón se contrae de forma aguda. Por el otro, la economía china parece estabilizarse mientras Estados Unidos está mostrando sorpresas macroeconómicas positivas. Según explican desde Amundi, “los bancos centrales del G-4 han llevado la relajación monetaria a un nuevo nivel. Como resultado, los riesgos extremos financieros y macroeconómicos se han limitado, si bien el efecto marginal de las acciones más acomodaticias parece decrecer”.

Las preocupaciones de colapso relativas a la lógica del ataque especulativo que condujo a la escalada de spreads en los periféricos, están dando pie a preocupaciones sobre una extensión de la debilidad macroeconómica, dañando potencialmente una recuperación de los fundamentales de crédito en las economías en crisis. “A pesar de que los riesgos extremos se han reducido significativamente, la interacción de la política, de las decisiones de política económica y de la dinámica de los mercados, todavía alberga riesgos de sorpresas negativas”, afirman.

Particularmente, en Estados Unidos las recientes decisiones políticas de la Fed han conducido a recalibrar las expectativas de inflación. A pesar de que los riesgos de inflación a corto y medio plazo son bajos, los cambios de las previsiones necesitan ser controlados muy de cerca. A nivel global, la visibilidad macro ha mejorado, ya que los riesgos del efecto de una confianza negativa de la crisis de la eurozona se han relajado, y la reducción de los riesgos extremos ha supuesto una reducción de la incertidumbre. Con este escenario sobre la mesa, ¿cuál es la estrategia que siguen en el Amundi Funds Bond Global Aggregate?

La estrategia del Amundi Funds Bond Global Aggregate

Tal y como explicó Hervé Hanoune, director de Estrategia del Global Agreggate, en una presentación celebrada en Madrid, el equipo mantiene una visión constructiva en crédito, sobreponderando crédito a corto plazo frente al de largo plazo para capturar spreads atractivos. Asimismo, mantienen un mayor peso en emisores de Estados Unidos y países del núcleo de Europa, con un reciente reforzamiento de periféricos. “Se hace un uso activo de derivados de crédito para proteger al fondo de escenarios adversos y se hace una selección de emisores apoyándose en un equipo de análisis grande y experimentado”, revela el experto.

En este sentido, Hanoune indica que "una persona individual no puede tener en cuenta todas las correlaciones y volatilidades. Un programa propio asegura la máxima consistencia”. Esta estrategia se combina con una gestión activa de las divisas. A este respecto, la preferencia del equipo del fondo se inclina hacia el dólar frente a las divisas de mercados desarrollados, así como las divisas de mercados emergentes frente a las de mercados desarrollados. “Se utilizan opciones para incrementar la convexidad y se hace una cobertura de los riesgos de cola”, señala el responsable de Estrategia del equipo del Global Aggregate.

Precisamente, las divisas es la clase de activo que ocupa actualmente una mayor parte de la cartera (39% del total), seguido del crédito (29%), bonos globales (19%) y deuda emergente (13%). Por asignación geográfica, la diversificación es muy elevada. Italia y España son los mercados de mayor peso, con un 16% y un 12%, respectivamente. Estados Unidos y Reino Unido se reparten a partes iguales un 20% de la cartera. Por calificación crediticia del activo, el 80% de la cartera la componen bonos con grado de inversión, categoría dentro de la cual el 50% lo integran activos con una calificación BBB (el rating medio de la cartera es BBB+).

Actualmente, el fondo está formado por 190 valores. “Dos tercios de la cartera está invertido en posiciones estratégicas de largo plazo, mientras que el tercio restante se reserva para un posicionamiento estratégico”, asegura Hanoune. El fondo –según explica- es muy dinámico. “Si no me gusta un activo, no tengo por qué estar invertido en él”. El índice de referencia no le condiciona. “A veces tenemos muchos bonos gubernamentales y otras, cuando no nos gustan los fundamentales, no. Preferimos los activos muy líquidos. Es un fondo muy diversificado construido para moverse en cualquier entorno de mercado. El equilibrio es muy importante. No podemos poner todos los huevos en la misma cesta”.

La gran apuesta de Amundi en renta fija para 2013

El fondo, que en los últimos tres años ofreció una rentabilidad anualizada del 11,8%, es la gran apuesta de renta fija de Amundi para 2013. “Creemos que es un fondo particularmente apropiado para inversores que busquen rentabilidad en el ámbito de la renta fija en el actual entorno de bajos tipos de interés”, afirma Nuria Trío, directora general adjunta de Ventas de Amundi para Iberia. “Deuda pública internacional, crédito corporativo, deuda emergente y mercado de divisas ofrecen un universo de inversión amplio y diversificado donde buscar rendimiento, y que ofrece un interesante potencial de rentabilidad ajustada al riesgo”, afirma Trío, quien destaca que este fondo cuenta con cinco estrellas por Morningstar.