Los tres consejos de la mayor gestora de renta fija de Europa para invertir en bonos y no perder en el proceso

Eric Brard (Amundi)
Foto cedida

Amundi es la mayor gestora de renta fija de Europa. La entidad mantiene actualmente un volumen de activos bajo gestión de 659.700 millones de euros invertidas en esta clase de activo. Por eso, la visita a España de Eric Brard, director global de renta fija del grupo, ha tenido una gran relevancia para la entidad. En primer lugar, porque su presencia se produce en un momento en el que los clientes de la entidad necesitan conocer todas las ideas y propuestas de la casa francesa para navegar con éxito en el mercado de renta fija actual. Y, en segundo, porque a pesar de lo enrevesado del escenario, Brard tiene un importante mensaje que trasladar: “pese a la dificultad del entorno imperante, se puede generar rentabilidades positivas”, afirma en una presentación a periodistas. El director global de renta fija de Amundi deja tras su paso por Madrid tres consejos muy claros:

1. El primero es apostar por fondos flexibles, que ofrezcan una muy buena diversificación. “Me refiero a productos que permitan moverse con rapidez y libertar por los mercados de renta fija, que estén habilitados para poder adaptar la cartera en función de cuáles sean las condiciones del mercado en cada momento. Es necesario que los inversores recuerden que un entorno de mercado desfavorable para la renta fija no significa pobres rentabilidades. Para demostrarlo, basta reseñar los resultados que han ofrecido en los últimos cinco años estrategias como el Amundi Euro Aggregate, con una rentabilidad anualizada de casi el 5%, frente al 4,3% del ofrecido por su índice de referencia, el Barclays Euro Aggregate; o el retorno anualizado del 6% del Amundi Global Aggregate, el cual casi duplica al del Barclays Global Aggregate en este periodo (3,2%)”, resalta.

2. La segunda idea de inversión que Brard recomienda a sus clientes es pensar en soluciones más específicas e incorporar a sus carteras fondos con objetivo de rentabilidad a vencimiento, esto es, estrategias de buy & hold que lo que buscan es aprovechar los atractivos cupones que ofrecen determinadas emisiones para mantenerlos hasta que expiren y poder aprovechar el carry. De este modo, si el gestor del fondo logra acertar a la hora de hacer la selección de los bonos que incorporar a la cartera y no cae en ningún default, el inversor obtendría un retorno muy similar al objetivo de rentabilidad que el fondo tuviese a vencimiento. Esto sería importante sobre todo para determinados inversores institucionales que necesitan ofrecer determinados niveles de rentabilidad, como es el caso de las aseguradoras.

3. El tercer y último consejo que ofrece el director global de renta fija de Amundi es el de combinar activos en cartera que permitan construir carteras más diversificadas y con un perfil de rentabilidad/riesgo más ajustado. “Para un gestor de carteras de renta fija, ahora mismo es fundamental ensanchar la base de instrumentos que utilizar”, asevera. Concretamente, Brard señala un segmento de mercado muy específico en el que –en su opinión- se debe bucear para encontrar oportunidades: el de los préstamos apalancados (leveraged loans). “A pesar de que existe la creencia de que se trata de un tipo de activo menos líquido, lo cierto es que este mercado se está expandiendo. En 2017 el volumen de emisiones alcanzó los 120.000 millones de euros, superando al mercado de deuda de alto rendimiento (94.000 millones)”, concluye.