Luxemburgo quiere atraer a clientes españoles de banca privada

Fernand Grulms, consejero delegado de Luxembourg for Finance, la agencia de promoción de Luxemburgo como centro financiero, asegura que el peso de los clientes españoles en el negocio de banca privada en Luxemburgo ha aumentado en los últimos meses. “Los clientes españoles son más importantes ahora. Y vienen a Luxemburgo no por razones fiscales, sino que buscan un mejor servicio y una buena distribución de activos”.

Grulms explica que las bancas privadas en España, como las de muchos otros países europeos, suelen tener un sesgo local importante. “En Luxemburgo nuestro mercado local es muy pequeño, así que hacemos un asset allocation verdaderamente global. Nuestras carteras son muy internacionales y eso es algo que los clientes aprecian ahora más que nunca”, señala Grumls. En total, el negocio de la banca privada en Luxemburgo maneja un patrimonio de 320.000 millones de euros.

En cuanto a las gestoras españolas, Luxemburgo también se ha ido convertiendo en destino preferido para muchas de ellas. Hay 167 productos (incluyendo los vehículos principales y sus distintas clases) de promotores españoles domiciliados en Luxemburgo, con un patrimonio total de 3.900 millones de euros, y el número está creciendo. “Ahora hay 15 gestoras españolas con producto en Luxemburgo y varias más están tramitando su desembarco”, señala Pierre Oberlé, responsable de desarrollo de negocio de Alfi, la asociación de fondos luxemburgueses. Los efectos de UCITS IV, que apenas comienzan a notarse, deberían impulsar este proceso.

Además, la entrada en vigor del nuevo tratado de doble imposición entre España y Luxemburgo no sólo ha facilitado la inversión en SIF y otros vehículos no armonizados por parte de clientes españoles, sino que también podría dar lugar al establecimiento de alguna filial luxemburguesa de entidades financieras españolas.

“Estoy convencido de que algún banco español establecerá una filial en Luxemburgo. Un gran banco español ya pujó recientemente por KBL, aunque finalmente la oferta que prosperó fue la de Qatar”, comenta Grulms.