Tras la migración, la cifra de activos gestionados en productos que hacen una réplica física será casi 17 veces superior a la que mantenía actualmente la firma, hasta alcanzar los 9.000 millones de euros.
Lyxor AM ha concluido la conversión del resto de su gama de ETF indexados de deuda soberana a réplica física. Estos fondos cotizados representaban un total de 538 millones de euros en activos gestionados el 31 de octubre; tras la conversión, la cifra de activos gestionados en productos de réplica física se situará en los 9.000 millones de euros. Es la segunda migración de estas características que realiza la firma este año, después de haber anunciado en junio que había migrado a réplica física otros tres ETF, entre ellos el que replica al Ibex 35.
Estos fondos se gestionarán haciendo una réplica física pura, es decir, sin recurrir a técnicas de muestreo, a fin de obtener la correlación más alta posible con la rentabilidad del índice. El proceso de gestión excluirá todas las operaciones de préstamo de valores que no aporten un margen suficiente de mejora de la rentabilidad para los inversores respecto a estos índices y justifiquen, por tanto, la introducción de un riesgo de contraparte.
“La técnica de réplica no debería representar un objetivo en sí misma, sino un medio para lograr la mejor eficiencia posible. Esta es nuestra filosofía: la metodología de replicación debe servir al logro de objetivos de rentabilidad y eficiencia”, ha comentado al respecto Juan San Pío, responsable de ventas institucionales de Lyxor ETF en Iberia y América Latina.
