En el último trimestre han aumentado la exposición a Porsche y Renault en Magallanes European Equity.
La guerra de aranceles entre Estados Unidos y China y el miedo a una menor demanda de esta última ha provocado el descalabro del sector automovilístico en los últimos meses. Unas caídas que muchos han aprovechado para comprar. Es el caso de Magallanes Value Investors, que en el último trimestre ha aumentado peso en el sector en las posiciones que ya mantenía en Porsche y Renault.
“La incertidumbre afecta, y también la inestabilidad, la guerra comercial y la persecución por el diésel”, confiesan. Ahora bien, como ocurre en muchas de estas situaciones el castigo en los precios “va mucho más allá de lo razonable cuando el mercado se pone pesimista u optimista”, explican desde la gestora.
De Porsche y Renault les gusta la valoración, su buena situación financiera y su capacidad para enfrentar los nuevos retos en cuanto a menores emisiones y coche eléctrico. “Son de los pocos OEMs (Original Equipment Manufacturers) que cuentan con líneas exclusivas de producción para este tipo de vehículos, además de tener la escala para diluir los costes de I+D para producir el coche del futuro”, justifican.
No son los únicos movimientos que ha hecho en el último trimestre. En Magallanes European Equity, dentro del sector industrial también han incrementado posiciones en Shelf Drilling. Igualmente, tras la entrada en cartera el trimestre previo, se ha seguido incrementando la posición en Signify. Con lo que el fondo ha cerrado septiembre con un nivel de inversión del 95,6%, formado por 38 empresas.
En Magallanes Iberian Equity han subido el peso a los sectores de energía, distribución y servicios, mediante el aumento de peso en Siemens Gamesa, Inditex y Prosegur, respectivamente, esta última castigada en mercado debido a la exposición a mercados emergentes. Y para el Microcaps, durante el tercer trimestre el fondo ha incrementado su exposición en los sectores industrial, con el aumento de peso en MPC Container Ships y de KSB, y asegurador, con el aumento en la posición de Wuestenrot & Wuerttemberg.
¿Cambio de ciclo?
Desde la gestora reconocen la creciente incertidumbre que hay en cuanto a un posible cambio de ciclo económico a nivel mundial, empujado por las dudas sobre el crecimiento y la situación de deuda de la economía china, lo que a su vez está teniendo un efecto contagio en otros países emergentes, como por ejemplo Turquía y Argentina, donde se observan fuertes tensiones financieras que llevan a caídas importantes en sus respectivas divisas. Una situación a la que tampoco ayudan la combinación de un dólar fuerte y unos tipos de interés al alza.
“Hay indicios para pensar que algo puede ocurrir: beneficios récord de la mayoría de empresas, acumulación de deuda en el sistema, políticas monetarias expansivas… siendo todo esto una realidad, lo sorprendente es la reacción tan dispar entre unos sectores y otros, también entre unas geografías y otras”, comenta desde Magallanes.
No obstante, creen que la penalización en sus carteras sería más limitada: “La rentabilidad de algunos de los valores que tenemos en cartera refleja ya una caída media superior al 30% desde máximos. Nada que ver con los máximos históricos del mercado americano o de las empresas tecnológicas. No sabemos qué nos deparará el futuro, pero si es malo, una parte importante de lo malo por venir ya está siendo reflejado, con cierta rapidez y dureza, en algunos de nuestros valores”, justifican.