El responsable de la gestora se muestra muy optimista sobre la evolución de la industria de gestión de activos, aunque reconoce que el sector se está concentrando. "El ganador se lo lleva todo. Las entidades necesitan escala y tecnología para sobrevivir".
Hace justo un año, Michele Faissola comparecía en el evento anual celebrado con medios para explicar el intenso proceso de reestructuración en el que se hallaba sumida la entidad alemana. Entonces, la línea argumental del máximo responsable de Deutsche Asset & Wealth Management se centraba en el proceso de reestructuración acometido por la entidad para mejorar la calidad del servicio a unos inversores cada vez más sofisticados y que demandaban soluciones globales. Doce meses después, el discurso que el máximo responsable de DeAWM traía debajo del brazo era bien distinto. “En 2013 hablábamos de los planes de reestructuración de la firma. Este año es momento de hacerlo de las tendencias del mercado, de la industria y de las necesidades del cliente”, afirma Faissola.
En la conferencia anual celebrada con periodistas europeos, Faissola se mostraba convencido de que el primer paso que había dado la compañía para integrar y simplificar distintas unidades del negocio ya estaba dando resultados. Lo evidencia el último informe de Investment & Pensions Europe, que revela que la firma ha experimentado en crecimiento patrimonial en 2013 del 53,3%, al ver elevado su volumen de activos gestionados de los 607.000 a los 931.000 millones de euros, lo que, a su vez, permitía a DeAWM escalar dos puestos en el ranking de las gestoras de mayor patrimonio del mundo, pasando del décimo al octavo lugar. “Esto lo hemos conseguido poniendo por un lado el margen y, por el otro, identificando por qué lado queríamos crecer. Hemos sabido definir muy bien la estrategia, siempre poniendo al cliente y la calidad del servicio en el centro de todo”.
A su juicio, los progresos que está realizando la entidad están siendo muy rápidos, lo que demuestra que la estrategia está funcionando. “Nuestra ambición es crecer a un ritmo aún más rápido, ser el motor de crecimiento del grupo, contar con un cada vez mayor equilibrio del negocio y ser la gestora europea de referencia a nivel global”, revela Faissola. “Estamos en un punto de partida muy bueno para crecer”, asevera. ¿Por qué? En primer lugar, la entidad ha racionalizado la organización, identificando qué negocios funcionaban y cuáles no. Vendieron, por ejemplo, las divisiones que la entidad mantenía en Rusia y Filipinas y reforzaron otras. En este sentido, el gran objetivo del máximo responsable de DeAWM es Estados Unidos, dada su importancia estratégica como mayor mercado de gestión de activos del mundo y donde el responsable adelanta la apertura de una nueva oficina en Dallas (Texas).
Batería de contrataciones: la gran apuesta es Estados Unidos
Prueba del interés de Faissola por el mercado estadounidense lo evidencia el importante esfuerzo en términos de nuevas contrataciones anunciado ayer. En este punto, Faissola adelantó los fichajes de Matthew Coombe –como director y banquero privado- y Patrick Menerey –como vicepresident y banquero privado-, quienes trabajarán en Los Ángeles, de Thomas Clarke (ex J.P.Morgan) como responsable de Lending & Deposit Products para Américas, de J.J. Wilczewski como corresponsable global de clientes para Américas y de Deepak Khanna como responsable de renta variable estadounidense ‘value’. En Europa, entran a formar parte del equipo Randy Brown como responsable de Reino Unido y director global de soluciones para el negocio institucional y Joachim Häger, nuevo director de Wealth Management para Alemania.
“Invertir en la gente será la parte más importante, debido a la necesidad de ofrecer el mejor servicio al cliente. Tenemos que estar seguros de que somos la firma más dinámica a la hora de anticipar sus necesidades”. Para ello considera vital ser una entidad con capacidad de innovación de la entidad. “El 50% de los flujos los marca el performance. Si el producto ha logrado ser uno de los mejores de su categoría, el dinero entra. La otra parte del espectro la determina la innovación, sobre todo si tenemos en cuenta que el 50% de las entradas que registra la industria están yéndose a nuevos productos, nuevas ideas…”. A este respecto, Faissola considera que escuchar las demandas de los clientes resulta clave.
Como prueba de la atención que dice prestar la firma a sus demandas pone, como ejemplo, el hecho de que la gestora haya migrado buena parte de su gama de ETF de réplica sintética a física, ante la preferencia por parte de sus clientes de los productos de réplica directa. En cuanto a la capacidad de satisfacer sus demandas en términos de innovación, pone el acento en CROCI, metodología desarrollada por Deutsche Bank Global Equity Valuation Group que emplea un proceso de valoración económica de las compañías realizando ajustes necesarios en los balances de éstas para calcular un PER económico y eliminar así imprecisiones en la información que pudieran dar lugar a errores a la hora de invertir, y sobre el que DeAWM ha construido diferentes estrategias. CROCI será, precisamente, una de las líneas de producto en las que tienen previsto seguir innovando en el futuro.
También seguirán trabajando en migrar su gama de ETF a réplica física o desarrollando nuevos fondos de ‘alternative beta’. “Desde los clientes más sofisticados a los menos, tenemos que estar seguros que le ofrecemos el producto adecuado”, afirma. En lo que respecta a su negocio de gestión activa, Faissola asegura que en la entidad cuentan con productos punteros en todas las clases de activos, destacando fondos como el Deutsche Invest Top Euroland, Deutsche Top Dividend, el Deutsche Invest Euro Corporate Bonds o el Deutsche Invest Convertibles. Menciona, asimismo, algunos de gestión alternativa, industria que –en su opinión- experimentará los crecimientos más fuertes, si bien recuerda que se parte de niveles bajos. “El gran elefante sigue siendo la gestión activa”.
Visión de la industria
En su opinión, la industria está creciendo a un ritmo razonable. “Se crea más riqueza, los ahorros entran al sistema… El momento que vive el sector es positivo, aunque la presión en los márgenes va a continuar. Necesitarás escala y ser eficiente. La regulación seguirá siendo cada vez más y más complicada y, además, es probable que se convierta en un aspecto que acabe por fragmentar al mercado. La implementación tendrá diferentes interpretaciones dependiendo del país. Por otro lado, la industria se está concentrando. El ganador se lo lleva todo. Las gestoras necesitan escala y tecnología para sobrevivir. En la industria hay una clara dicotomía entre las boutiques especializadas y las grandes gestoras. Si te quedas en medio sufrirás”.
Esto –a su entender- es muy claro en los mercados emergentes, donde los flujos se concentran en las entidades de mayor tamaño. “Asia es probablemente la región donde las oportunidades son mayores. Creo que vamos a crecer en términos anualizados durante los próximos 3-5 años a un ritmo del 20%. La industria está más enfocada al negocio offshore. La pregunta es qué peso tendrá el negocio onshore. Ahí estará la gran oportunidad, aunque todavía es muy pronto para saberlo”. El director se muestra convencido de que habrá más actividad en fusiones y adquisiciones, si bien “los procesos de integración en esta industria son muy difíciles porque es un negocio muy enfocado en las personas”.
Lo que también continuará es la polarización entre gestión activa y pasiva. “Tener producto de beta eficiente y de calidad de alpha será crítico para el éxito de una gestora”. En este sentido, el responsable reconoce que “DeAWM ha llegado tarde a la gran fiesta de los ETF”, si bien es una entidad que, por su favorable posición en análisis e investigación, tiene producto para competir. “Lo importante es hacerle ver al cliente cuál es la propuesta que le pones encima de la mesa que te diferencia de la competencia”. Además de los productos de CROCI ya mencionados, el responsable destaca el acuerdo con Harvest, entidad con un expertise muy fuerte en China y con capacidad de penetración en el país en términos de distribución. “Los inversores internacionales tienen la necesidad de encontrar el expertise en China y los inversores chinos de diversificar sus carteras a nivel global”. Y ambas necesidades las conjugan a través de Harvest.