Nordea 1 Flexible Fixed Income Fund: la búsqueda de fuentes alternativas de retorno defensivo

Karsten Bierre
Foto: Cedida por Nordea

El Nordea 1 Flexible Fixed Income Fund quiere ser una solución altamente competitiva en el entorno complejo en el que se mueven los fondos de renta fija, incluso los globales. Los inversores cautos ahora deben enfrentarse al gran reto que supone un entorno de tipos bajos y la respuesta de Nordea AM es una exposición dinámica al crédito y la gestión de la duración.

“Muchos productos de renta fija gestionan activamente su duración y exposición crediticia”, reconocen desde la gestora, “pero a menudo las carteras se reorganizan de acuerdo con una visión top-down en las que intentan anticipar e interpretar los movimientos de los bancos centrales o los datos macroeconómicos”. Para el equipo gestor, liderado por Karsten Bierre, esa es una táctica delicada y difícil, que a menudo conduce a retornos inconsistentes y un mayor riesgo.

Por el contrario, este fondo con Sello FundsPeople 2020 por su calificación de Blockbuster basa su estrategia en los conceptos propios de valoración y diversificación, la base de la filosofía de equilibrio de riesgos del equipo de Multi-Activos de Nordea y que, afirman, es lo que les ayuda a generar retornos más consistentes con el tiempo.

El proceso de inversión se basa en controlar el riesgo en todo momento en lugar de apuntar al mayor rendimiento posible. “Esto nos permite crear una cartera diseñada para abordar un entorno en constante cambio en el espacio de renta fija, con el objetivo de satisfacer la necesidad de una asignación activa de activos dentro del espacio de renta fija global y una diversificación sólida mediante el uso de principios de equilibrio de riesgos”, afirman desde Nordea AM.

En opinión de la gestora, la gestión activa del riesgo y la verdadera diversificación son claves para proteger las carteras contra las correcciones sin sacrificar los retornos esperados. Y esto es para el equipo es una ventaja competitiva: la búsqueda de fuentes alternativas de retorno defensivo, una propuesta de valor equilibrado a largo plazo que permite que la cartera sea más resistente durante las caídas y tener un enfoque de inversión flexible y sin restricciones.

Actualización de la cartera

Por su filosofía basada en el equilibrio del riesgo, la cartera se construye de manera independiente al ciclo económico. Así, el equipo gestor no tiene una visión top down. Sin embargo, a corto plazo se muestran negativos con la duración (es decir, abogan por una posición corta) ya que los rendimientos están anclados a un nivel bajo y la inflación y el momentum del growth están ganando impulso, lo que es una amenaza para las posiciones de larga duración, explican. Tienen una postura neutral sobre el crédito, ya que los diferenciales se han estrechado aún más gracias a las políticas de apoyo de los bancos centrales, mientras que la tasa de impagos esperada se mantiene elevado.

En los últimos meses ha habido algunos cambios en la cartera. En el lado del crédito entraron en la crisis con una mayor exposición a la deuda gubernamental de mercados emergentes, ya que los diferenciales eran que en sus corporativos de grado de inversión y high yield. Pero a medida que los diferenciales de la deuda emergente se comportaron mejor frente a las duras ventas en dichos corporativos, giraron toda su exposición a emergentes hacia corporativos, cuyos diferenciales habían llegado a puntos no vistos desde 2008.

El equipo gestor también cita algunos riesgos aún latentes en el mercado. El principal, que lleva prevaleciendo durante años, es entorno de tipos bajos. Una clara amenaza para la construcción de una cartera equilibrada, apuntan, ya que la duración, un tradicional amortiguador del riesgo, ya no puede jugar su papel. Así, a lo largo de los años han desarrollado numerosos nuevos generadores de retorno para compensar esa menor rentabilidad y protección que antes daba la duración.

Por ejemplo, han seleccionado divisas defensivas como protección en escenarios de estrés. Durante esta crisis reciente, un posicionamiento largos yen japonés frente al dólar australiano funcionó notablemente bien, en su opinión, incluso mejor que la duración en bonos alemanes o estadounidenses.

Y es que para Nordea AM, el mayor éxito en la gestión de 2020 ha sido limitar las pérdidas durante el nerviosismo del mercado por el COVID-19. El fondo limitó las pérdidas y para principios de junio ya se había recuperado por completo de la corrección de febrero y marzo. La clave fue esa protección que dieron las divisas defensivas antes mencionadas y el éxito de su posicionamiento táctico exitoso antes, durante y después de la corrección. Por nombrar un fallo, dirían que subestimaron el potencial de rendimientos de bonos más bajos, especialmente fuera de Europa.