Novedades y tendencias en la estrategia de inversión en multiactivos de BlackRock

Stephen_Crocombe
BlackRock

Es de sobra sabido que BlackRock es la gestora con mayor patrimonio del mundo, al disponer de unos 6 billones de dólares en activos bajo gestión, repartidos entre gestión indexada y gestión activa. Lo que quizá sea menos conocido es que BlackRock ocupa el octavo puesto del Top 10 de hedge funds mundiales. “La gente no suele pensar en nosotros como un gran gestor de hedge funds, a pesar de que tengamos una base estable de estrategias de gestión alternativa. También tenemos capacidades significativas en capital riesgo, selección de gestores, real estate, acciones y deuda de infraestructuras y en bonos verdes e inversiones ESG”, explica Stephen Crocombe, responsable de negocio de estrategias multiactivo de EMEA.

Quizás tampoco sea tan conocida la expansión del proyecto europeo de la gestora, que va viento en popa: el año pasado abrieron un centro financiero en Budapest; de momento ya trabajan 300 profesionales en ese centro, y la expectativa es que lleguen a 500 a final de año. “En BlackRock estamos muy comprometidos con Europa, donde tenemos alrededor de 4.000 empleados. Creemos que hay un talento fascinante en Europa, en términos de codificación y de tecnología, así como clientes fantásticos a los que ofrecer nuestros servicios”, asegura Crocombe.

En línea con estos esfuerzos, la gestora ha empezado a designar a gestores de fondos que operen de forma local en las distintas oficinas europeas. Por ejemplo, la gestora creó recientemente un equipo de tres personas en Milán, liderado por Bruno Rovelli, que ya ejercía previamente como director de inversiones de la firma. Lo hizo después de detectar varias peticiones de clientes italianos que deseaban que fuera el propio Rovelli quien gestionara sus carteras.  “Queremos que la gente piense en nosotros como en una gran gestora de activos global, no una firma americana. Tratamos de ser globales, pero de volvernos lo más locales posible. Creo que hay algo diferente en gestionar dinero localmente”, comenta el experto.

Características del área de multiactivos

Actualmente el equipo de BlackRock en inversiones multiactivo está compuesto por unos 200 profesionales, con alrededor de 400.000 millones de dólares en activos bajo gestión. La plantilla se organiza en una amplia variedad de equipos con enfoques distintos a la inversión, desde factor investing a desarrollo de multiactivos con generación de rentas. Además, la firma puede apalancarse en sus enormes recursos, tanto a través de su plataforma tecnológica Aladdin como recurriendo a sus capacidades en las distintas clases de activo en las que invierte. “Es totalmente distinto a los recursos que pueda tener una boutique, y eso que hay boutiques multiactivos muy buenas en Europa”, afirma Crocombe.

Una de las funciones a las que Crocombe ha dedicado más tiempo en el último año y medio ha sido a sentarse con los clientes, comprender sus necesidades y ayudarles a diseñar carteras personalizadas, “especialmente en relación con los cambios que introduce MiFID II”. “Tenemos muchos fondos, pero también hacemos mucho trabajo de personalización. Trabajamos con fondos de pensiones, aseguradoras y entidades bancarias para ayudarles a crear mejores propuestas de valor para sus clientes”, resume el experto.

Éste matiza que la tendencia a la personalización no va a acabar con las soluciones ya existentes, especialmente con los building blocks. “Hay gestoras fantásticas en España, que quieren construir soluciones a partir de subyacentes, ya sean ETF o fondos u otras capacidades”. Dicho esto, y teniendo en cuenta los requerimientos de MiFID II en torno a la idoneidad, este experto cree que existe “una gran necesidad de pensar cuidadosamente qué soluciones van a encajar con las necesidades del cliente”.

Crocombe también valora positivamente otros cambios introducidos por MiFID II, incluyendo la obligación de definir el mercado objetivo. “Pensar cuál es el mercado, cómo lo vamos a usar, cuáles son las comisiones y si esas comisiones tienen sentido en el contexto de una cartera total en relación con el alfa que podemos generar y con la beta que venga del mercado supone una gran parte del proceso de desarrollo de producto”, concluye el experto.

Soluciones para el contexto actual

“El problema clave con una cartera multiactivos, en general, ya sea el modelo 60/40 o cualquier otro, es que al final acabas teniendo mucho riesgo de renta variable. Por tanto, gran parte del trabajo de nuestros equipos es averiguar qué hacemos con ese riesgo”, continúa el responsable. Una de las fórmulas que propone BlackRock es la adopción de estrategias de paridad de riesgo, que la firma lleva implementando desde 2009. “La paridad de riesgo plantea una manera diferente de pensar en qué riesgos estás asumiendo y qué compensación estás recibiendo por ellos, abriendo la posibilidad de añadir más tipos de activos (deuda pública, deuda corporativa, etc.) en vez de tener riesgo de renta variable”, continúa el experto. En su opinión, se trata de “un potencial enfoque inteligente para dar respuesta al problema que plantean las correlaciones”.

La segunda opción que está explorando la firma es mediante la búsqueda de fuentes no tradicionales de retorno que se puedan incluir en fondos multiactivos con objetivo de generación de rentas y una gestión flexible. Crocombe pone como ejemplo al BlackRock Global Funds - Global Multi-Asset Income Fund, calificado como Blockbuster Funds People. “Este producto existe para dar la respuesta a un problema muy básico: es poco probable que nuestros clientes obtengan un rendimiento del 5% en renta fija en un futuro próximo”. Así, el objetivo de este fondo en particular es generar un rendimiento del 4%-6% con una volatilidad inferior a la de una combinación de 50% de renta variable y otro 50% de renta fija (ha generado menos del 5% de desviación estándar desde su lanzamiento), “mediante una asignación de activos flexible y acceso directo a los mercados donde elige invertir”, detalla el experto.

El fondo busca fuentes de generación de rentas en activos menos convencionales, como los REITS, las preferentes o los MBS, aprovechando que su valoración sigue siendo atractiva y que, por las características de estos mercados, su acceso no es apto para todos los públicos. “La idea es que tenemos un nivel de riesgo, pero la asignación de activos es totalmente libre, se asigna en función de rangos muy amplios”, resume el responsable.  

La tercera solución en la que está trabajando BlackRock consiste en la fusión de estrategias de inversión cuantitativas con estrategias basadas en fundamentales. “Hemos dedicado mucho trabajo en los últimos años en apoyar a nuestros inversores de cara a aunar la gestión cuantitativa y fundamental, una idea que algunos han denominado “cuantamental”. “Ahora muchos de nuestros equipos fundamentales han introducido modelos cuantitativos de inversión en su proceso, y casi todos nuestros equipos fundamentales están utilizando inputs cuantitativos de una forma mucho más centralizada que en el pasado. Si conseguimos fusionar los dos, puede que consigamos carteras más eficientes que si trabajasen por separado”, reflexiona Crocombe.