Como seres racionales que somos cuando nos duele un diente vamos a un dentista en vez de intentar extraerlo nosotros. Si tenemos un litigio acudimos a un abogado especialista o si se rompe el coche normalmente acudimos al taller para su reparación. Sin embargo, es habitual prescindir del asesoramiento financiero y adentrarnos en el complicado mundo bursátil con la creencia de que el aprendizaje autodidacta y sin track record, nos va a proporcionar pingues beneficos además de ahorrarnos la minuta del asesor profesional.
Este es un artículo exclusivo para los usuarios registrados de FundsPeople. Si ya estás registrado, accede desde el botón Login. Si aún no tienes cuenta, te invitamos a registrarte y disfrutar de todo el universo que ofrece FundsPeople.