Corporativa vs. soberana: ¿dónde podemos encontrar valor hoy en la renta fija?

3,00%: vuelve a ser el tipo de rendimiento a 10 años de la deuda del Estado alemán. Es el mismo nivel que el que prevalecía a finales del año 2010. Crisis de la deuda de los países periféricos, miedo a la inflación, recuperación de la economía, alza de los tipos del BCE o catástrofe nuclear japonesa, todos estos elementos contradictorios se han ido compensando mutuamente para llegar a un tipo que se ha mantenido constante en cinco meses.

Todo esto refuerza nuestra convicción de que el verdadero valor de los mercados de obligaciones se encuentra siempre en las obligaciones de empresa.  Hay que confiar los capitales a las empresas, ya que los Estados presentan riesgos importantes o remuneraciones muy bajas. Las empresas han superado la crisis bastante bien y han conseguido restaurar sus balances. Éstas ofrecen, con sus acciones o sus obligaciones, remuneraciones superiores a la deuda del Estado, y todo ello con un riesgo limitado. Por ejemplo, empresas como VIVENDI o UNILVER ofrecen para sus acciones un dividendo que presenta un rendimiento muy atractivo. Otras empresas como RALLYE o CONTINENTAL ofrecen para sus obligaciones unos rendimientos superiores al 5% en 5 años, a comparar con los rendimientos de la deuda pública que apenas superan el 2%. Por lo tanto, no hay que contar con los Estados, sino  buscar el rendimiento en las empresas, ya que son ellas las que crean la riqueza.

El alto volumen de emisiones de obligaciones "High Yield" o "Non Calificadas" ofrece tantas otras oportunidades para acompañar a las empresas en este mundo de financiación sin intermediarios. SEB constituye un muy buen ejemplo de este nuevo canal de financiación. El líder mundial de pequeño electrodoméstico de uso particular ha podido obtener a 5 años 300M€ el 4,50%. Hay que decir que, con una apalancamiento de apenas un 10% y un ratio deuda neta / EBITDA de 0,3 veces (que, sin embargo, podrían aumentar) el perfil de riesgo del grupo lo tiene todo para seducir a los inversores obligacionistas.

En definitiva, dada la variedad y la solidez de las empresas europeas, tales como SEB y muchos otros títulos que estamos investigando, creemos que una gestión basada en el rendimiento de las empresas, ofrece, con una volatilidad relativamente debil y una toma de riesgo razonable, un potencial de rendimiento significativo.