Tribuna de Marie-Pierre Peillon, directora de Análisis Financiero y Extra-Financiero de Groupama AM.
Analizar el capital humano de una empresa es dar un enfoque innovador al análisis de una
compañía con un objetivo preciso: integrar dicho activo inmaterial en el enfoque financiero de los
analistas.
Una gestora con vocación de gestionar activos a medio/largo plazo debe interesarse por los
fundamentales de las compañías. Pero hablar de los fundamentales de una compañía no es sólo hablar de los aspectos financieros, hay que tener en cuenta también aspectos extra-financieros. En general, se trataría de tres criterios principales llamados ASG: el impacto medioambiental, los aspectos sociales y societarios, así como la governanza o gobierno corporativo.
Entre los criterios sociales, la evaluación de la estrategia de RRHH constituye un pilar fundamental dentro del análisis extra-financiero, ya que hace referencia a la manera en la que está gestionado uno de los principales activos inmateriales de la empresa, el capital humano, que constituye una gran ventaja competitiva para las empresas en una lógica de largo plazo.
Hay tres factores que militan a favor del desarrollo del análisis del capital humano: la evolución
hacia una economía de sabiduría y conocimiento, la evolución demográfica, que tiende hacia una
inversión de la pirámide de edades y salidas masivas, y, finalmente, la crisis financiera, que nos
lleva de vuelta a la lógica del largo plazo y nos obliga a reconsiderar el análisis de los RRHH.
No obstante, es difícil luchar contra un pensamiento único que tradicionalmente tiende a
sobredimensionar los aspectos financieros en el análisis y valoración de las compañías.
Otro obstáculo de peso es la dificultad para elegir y desarrollar herramientas adaptadas al análisis
del capital humano. Hay que saber seleccionar una serie de indicadores que nos permitan
establecer una conexión entre la estrategia de RRHH y el valor de la compañía.
Básicamente, habría que reagrupar dichos indicadores en cuatro criterios de RRHH: la gestión de los puestos de trabajo y competencias/habilidades, el clima social, la salud/seguridad y la gestión de los RRHH. El objetivo es destacar el impacto de la estrategia de RRHH en los criterios financieros como el crecimiento, la rentabilidad, el posicionamiento frente a la competencia y el riesgo de posibles eventos.
De todas formas, todavía es difícil poder integrar el enfoque de RRHH en la recomendación para
los gestores de renta variable ya que los mercados bursátiles continúan ignorando la variable
RRHH.
Como conclusión diría que, integrando criterios ESG en nuestro análisis somos capaces de
identificar un Alpha que mediante la gestión financiera tradicional no podemos.