La guerra de Ucrania pone de manifiesto la importancia de la transición energética

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Firma: cedida (Schroders).

TRIBUNA de Carla Bergareche, directora general para España y Portugal, Schroders. Comentario patrocinado por Schroders.

La terrible guerra de Ucrania y las sanciones internacionales a Rusia tendrán importantes consecuencias para la transición energética. AdvertisementPor un lado, estamos viendo cómo el conflicto ha provocado una incipiente presión alcista sobre los precios de la energía y las materias primas, ya que Rusia es un importante proveedor de petróleo, gas y metales.

Como consecuencia de ello, la inflación, que antes de la crisis ya se situaba en máximos de varias décadas, continúa presionada. Esto, sumado a los cuellos de botella y la incertidumbre en torno a las consecuencias para la economía mundial han creado desafíos a corto plazo para todos los sectores globales y, especialmente, para los activos vinculados a la transición energética.

Sin embargo, como inversores a largo plazo, consideramos que estos retos a corto plazo no deberían hacer sombra a las atractivas oportunidades de inversión que presentan los activos vinculados a la transición energética.En cambio, las disrupciones que surjan a corto plazo pueden ser una oportunidad de compra, especialmente teniendo en cuenta el potencial de crecimiento de la temática. Para más información al respecto, puede leer este artículo: ¿Cómo afectará la crisis de Ucrania a la transición energética?

La transición energética es una megatendencia y, como tal, abarca varias décadas, incluso trasciende varios sectores, pues requerirá la transformación de todo el sistema energético durante los próximos 30 años (y más allá) para reducir de forma sustancial las emisiones de dióxido de carbono (CO2) y ayudar a cumplir los objetivos climáticos mundiales. Y, para conseguirlo, serán necesario invertir en toda la cadena de valor. Explicamos más cuestiones sobre la transición energética en este enlace: La transición energética está empezando a acelerarse y las oportunidades de inversión asociadas son enormes.

Además, esta guerra nos ha demostrado que la inversión en transición energética también será clave para la estabilidad geopolítica. A lo largo de la historia se ha confirmado que la falta de energía y el aumento de los precios de la misma pueden ralentizar considerablemente las economías. Esta situación se ha acentuado tras el conflicto, ya que Rusia es uno de los principales proveedores de petróleo y gas del mundo y Europa tiene una gran dependencia de los combustibles rusos.

Como parte de la solución a esta coyuntura, consideramos que la inversión en sectores que fomentan la transición energética, como el de las energías renovables, será clave, pues dependen de recursos más diversos y pueden ayudar a reducir la dependencia de grandes proveedores. En este artículo (La crisis de Ucrania pone de manifiesto la dependencia europea del gas ruso) podrá informarse más sobre este asunto.

Por otra parte, a medida que los precios de la energía aumentan, el atractivo económico de las renovables sigue creciendo con la mejora de la competitividad de las energías limpias. La mayoría de las tecnologías del sector de la transición energética ya no requieren apoyo político para ser rentables. Esto es aplicable incluso después de tener en cuenta el aumento de costes asociados a la producción de equipos necesarios para generar esta energía debido a las limitaciones existentes en la cadena de suministro.

Creemos que la situación en Ucrania da más credibilidad al argumento de la transición de nuestro sistema energético actual a uno basado en energía barata, limpia y fiable. De hecho, pensamos que este objetivo pasará a partir de ahora a primer plano del proceso de toma de decisiones de todos los responsables políticos.

Conclusión

Todo ello nos lleva a afirmar que la transición energética sigue siendo una tendencia a largo plazo y que cobra relevancia con los eventos actuales. Sin duda, será uno de los temas que marcará las carteras de los inversores por sus atractivas oportunidades de inversión a largo plazo.

Para obtener exposición a empresas globales que contribuyen a esta transición, el fondo Schroder ISF* Global Energy Transition, clasificado como artículo 9 según los criterios de SFDR, invierte en una selección de compañías de regiones y sectores diversos que lideran la transición hacia la energía limpia con el objetivo de lograr rentabilidades atractivas a largo plazo a través de una temática de inversión que marcará las próximas décadas.

Nota:

*Schroder International Selection Fund se denomina Schroder ISF en este artículo.