TRIBUNA de Ana Rafels y Simón Pérez, Panoramia Invest.
Los últimos datos macro que hemos conocido en la zona euro, nos advierten que las economías del Viejo Continente están perdiendo fuelle y todas las vistas están ahora centradas en las medidas que pueda tomar el BCE para apuntalar el crecimiento. Los mercados ansían un QE pero tras el último Consejo de Gobierno del BCE, somos de la opinión que ese QE sólo llegará si las medidas previstas (compra de bonos garantizados y titulizaciones, programa de adquisición de ABS) resultan no ser suficientes. Así, en este escenario de debilidad económica para los países europeos, pensamos que el recorrido positivo para los activos europeos puede ser limitado y consideramos es importante tener en cartera fondos con una buena diversificación por tipo de activo pero sobre todo, geográfica. Este es el caso del fondo Nordea 1-Stable Return Fund que venimos recomendando desde principio de año y en el que hemos podido comprobar una eficiente flexibilidad geográfica.
¿Quién es Nordea? Nordea Investment Funds S.A. forma parte del grupo líder en servicios financieros de la región nórdica y del mar Báltico, que cuenta con 10 millones de clientes y 29.700 empleados.
El fondo Nordea 1-Stable Return Funds es un fondo que invierte en todos los tipos permisibles de clases de activos, como son valores de renta variable, bonos e Instrumentos del mercado monetario con el objetivo de conservar el capital del inversor y proporcionar una rentabilidad absoluta positiva superior a la de los tipos de interés europeos a tres meses. Para ello, el equipo gestor implanta en sus estrategias un estricto control de riesgos i) tomando decisiones de inversión limitando el riesgo a un horizonte temporal de 3 años, ii) asignando entre diferentes clases de activos bajo un presupuesto de riesgo predefinido y iii) priorizando decisiones estratégicas de asignación con respecto a apuestas a corto plazo.
Según los últimos datos disponibles, el posicionamiento del fondo es del 52,49% en acciones, 39,85% en obligaciones, manteniendo el 6,28% en liquidez. En cuando a la segmentación geográfica, podemos observar que el fondo concentra gran parte de su posicionamiento en EE.UU. con un 63,48% de las posiciones que se han visto favorecidas por la reciente debilidad del euro en su cruce contra el dólar. Posiciones que se completan con un posicionamiento en Europa del 8,55%, Japón con un 6,73%, Reino Unido con un 5,68% y Asia emergente con un 5,20%.
En términos de rentabilidad, podemos observar que este es un fondo consistente pues desde el 2.011, alcanza rentabilidades de entre el 5,88% y el 7,27%, registrando al cierre de septiembre de este año una rentabilidad de 7,49%. Si echamos la vista a años anteriores, podemos observar que el fondo tuvo un comportamiento plano en el 2.007 y registró un comportamiento negativo de 9,74% en el fatídico 2008, que a pesar de ser una rentabilidad negativa fue sensiblemente mejor que la que obtuvieron los fondos de su categoría, demostrando una vez más la eficiencia en su flexibilidad para el posicionamiento por tipo de activo. Sin embargo, a pesar de ser un elemento importante, lo más destacable del fondo no es la consistencia en los resultados sino la baja volatilidad que tiene el fondo para alcanzar esos rendimientos. La volatilidad que tiene este año el fondo es de apenas un 3,91%, demostrando la eficiencia de la estrategia de estricto control del riesgo del equipo gestor. Un elemento que viene recogido en el ratio de Sharpe que según los últimos datos disponibles es de un 2,08. Además, si observamos la volatilidad del fondo en años anteriores, podemos observar que si bien la tendencia se ha enfatizado en el último año al registrar esta baja volatilidad, en los 5 últimos años el fondo ha registrado una volatilidad inferior a la de la media de su categoría.
Por último, podríamos finalizar diciendo que debido a la volatilidad creciente en los últimos meses en la renta variable (especialmente la europea), debido a la consistente mejora que han experimentado los activos de renta fija en Europa y que pensamos que podría haberse agotado en lo que queda de año, consideramos importante que nuestras carteras tengan un peso importante en fondos flexibles, con poco posicionamiento en Europa y con una remarcada estrategia de control de riesgos. En ese sentido y a modo de síntesis, destacamos el Nordea 1-Stable Return Fund por su consistencia en la rentabilidad, por la capacidad de descorrelacionarse en momentos complicados para los activos de riesgo y especialmente, por su baja volatilidad y su flexibilidad geográfica y por tipo de activo. Es por ello que de entre los más de 5.000 fondos que analizamos, el Nordea 1-Stable Return Fund sigue siendo uno de los integrantes de nuestra cartera diversificada (compuesta por 30 fondos) y una recomendación para aquellos inversores que deseen constituir cartera.