Noruega: una gran desconocida

Toni Conde, responsable de gestión de activos de Renta 4 Noruega es un estado monárquico de Europa septentrional, limítrofe con Suecia, Finlandia y Rusia. Desde la II Guerra Mundial, ha experimentado un rápido crecimiento económico y es en la actualidad uno de los países más ricos del mundo con un sistema escandinavo de provisión de bienestar social. Y a pesar de que Oslo se encuentra a una distancia de Madrid de 2.388km frente a los 3.446km de Rusia, y a tener un mercado transparente y desarrollado frente al ruso, parece que el interés y seguimiento del mercado ruso es muy superior al noruego. Los motivos que encuentro para lo mismo es que Rusia es un país emergente, característica que desde hace unos años despierta el interés de la comunidad inversora, y más aún tras la reciente crisis financiera en el que los países emergentes, en general, han salido reforzados frente a los desarrollados.

Pero, no nos engañemos existen países desarrollados cuyas economías también han salido reforzadas tras la crisis. Noruega comparte su estructura sectorial con la de algunos mercados emergentes, ya que cuenta con amplias reservas de recursos naturales de muy variada naturaleza (petróleo, energía hidráulica, gas natural, pescado, bosques y minerales como la pirita, cobre, níquel y zinc); mantiene un superávit presupuestario gracias al petróleo, canalizado mediante NOK 2,1 trillones en el fondo de pensiones del Gobierno (el segundo fondo soberano más grande del mundo); goza de una población bien cualificada, transparencia y estable frente político.

El pasado 28 de octubre, el banco central del país (Norges Bank) aumentaba en 25bps los tipos hasta el 1,5% dado el aumento de actividad de su economía, unos datos de inflación superiores a lo inicialmente esperado y un desempleo considerablemente por debajo de lo anticipado. En paralelo, son conscientes de que las subidas de tipos fortalecen a la corona noruega (NOK) y ello afecta negativamente a los resultados de sus compañías al ser primordialmente exportadoras, por lo que en un futuro las decisiones serán tomadas con conciencia de encontrar el equilibrio con la reactivación de su industria. De cara a futuro, no nos olvidemos de esta parte del mundo pues su bajo endeudamiento, condición de exportador de materias primas tanto a países en vías de desarrollo como a su vecina Europa, ávida por diversificar su dependencia energética rusa, que nos proporciona exposición pro-cíclica mediante un mercado/compañías sólidas, transparentes y muy cualificadas.