¿Qué es la temperatura de la cartera?

FLORENT_DEIXONNE
Cedida por Lyxor AM

TRIBUNA de Florent Deixonne, head of Sustainable & Responsible Investments, Lyxor Asset Management. Comentario patrocinado por Lyxor ETF.

El primer desafío para una inversión socialmente responsable efectiva es tener datos de buena calidad sobre ESG y el clima. En Lyxor nos asociamos con algunos de los proveedores de datos más avanzados (por ejemplo, MSCI, Climate Bonds Initiative, Sustainalytics, S&P True Cost) y nos enorgullecemos de tener equipos con fuertes antecedentes en ingeniería financiera que pueden hacer un gran trabajo con los datos de estos socios. Por eso hemos sido capaces de construir sistemas de vanguardia para ayudar a los inversores a evaluar el impacto de sus carteras en términos de ESG y riesgos climáticos.

Aparte del aspecto de los datos, el segundo gran desafío, especialmente a la luz de las nuevas regulaciones de la UE(1), será el movimiento de la industria en 2020 hacia la divulgación de la temperatura de la cartera. Pronto será posible calcular los escenarios implícitos de aumento de la temperatura para todos los principales índices de mercado de referencia conocidos (por ejemplo, CAC 40, Euro STOXX 50, S&P 500, MSCI Europa...etc.) y ver inmediatamente si una cartera o benchmark está alineado (o no) con los objetivos del Acuerdo de París(2).

Incluso si la metodología intelectual detrás de este tema es muy compleja, asociar una cartera de inversión con un termómetro será un concepto de poderosa simplicidad, algo que puede ser entendido por todos en el mundo y que nosotros creemos que se convertirá en una referencia de facto para futuros inversores.

La desagradable sorpresa que espera a los participantes del mercado es que la mayor parte de los benchmark en renta variable muestran actualmente escenarios de un aumento de temperatura de 4 a 5 grados, que según todas las pruebas científicas es un escenario de desastre en ciernes.

El impacto de la temperatura de una cartera será una aportación clave a la hora de establecer las carteras en una trayectoria de bajo carbono, que creemos es la estrategia más eficaz para gestionar riesgos de transición para un actor financiero y también una estrategia de inversión pertinente para maximizar la rentabilidad de su cartera en el medio plazo para un determinado nivel de riesgo.

Hay muchos beneficios al tomar un enfoque pasivo en ESG. Primero gracias a mejoras en la calidad de los datos, los índices hoy en día se pueden construir para reflejar todo tipo de políticas climáticas y de ESG, y luego hacerlas accesible a los inversores a un bajo coste.

Las innovaciones en esta esfera incluyen pantallas selectivas que filtran, por ejemplo, las empresas que consumen o extraen grandes cantidades de carbón térmico. Incluyen la aplicación de valores específicos como la igualdad de género, o la selección de acciones basada en el carbono o la alineación con las normas de la ONU, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

En general, mejores datos significan mejores índices y más formas de invertir con un enfoque basado en índices en una forma transparente, de bajo coste y basado en reglas (todas consideraciones importantes para los inversores que buscan generar un rendimiento sostenible a lo largo del tiempo). En segundo lugar, los vehículos pasivos son extremadamente transparentes. En nuestro caso, compartimos nuestro método patentado para el ESG y la huella de carbono en nuestros ETF, permitiendo a los inversores supervisar y medir la huella de carbono de la cartera.

Podemos compartir el desglose de la clasificación de ESG de las empresas, su exposición a las positivas y negativas tendencias de calificación, sus actividades, la exposición de la cartera a controversias sobre ESG, controversias del Pacto Mundial de la ONU y los riesgos de la transición, la gestión de los riesgos del carbono, la exposición a los emisores que ofrecen soluciones ambientales, y los beneficios de exposición a soluciones ambientales que contribuyen a los ODS de la ONU.

Toda esta información es fácilmente accesible a través de nuestra página web, lo que significa que cualquier inversor en nuestros ETF tiene esta información clave a su alcance. Los ETF y los fondos índices invierten en activos que cotizan en bolsa en lugar de mercados privados, y como activos cotizados tienen mayor liquidez que los que no cotizan en bolsa, un inversor en índices puede movilizar mayores cantidades de capital y hacer que estas se dirijan hacia sus objetivos.

Y finalmente, los buenos gestores pasivos realmente tienen una voz activa, estableciendo políticas de voto como un gestor activo. Estas políticas y los registros de votación son públicos. En nuestro caso, la política de engagement del accionista de Lyxor implica un compromiso directo de dialogar con las empresas para comunicar expectativas, por ejemplo, con respecto a la gobernanza.  Esto demuestra que es posible fomentar una práctica de negocio sostenible con la inversión en índices (si esa inversión es con un gestor pasivo activo responsable).

En nuestra opinión, la asignación a los ETF de ESG no es una tendencia, es una transformación.  La única pregunta para nosotros es cuán rápida esta transformación se llevará a cabo. En Europa, los ETF de ESG son todavía menos del 5% del total de los activos (sin embargo, se contabilizaron cerca de un 17% de flujos netos el año pasado(3)). 2020 ha sido mucho más volátil hasta ahora, pero el ESG sigue siendo el único segmento de acciones con flujo positivo y más del 20% de todos los flujos hacia renta fija(3).

Las ETF de ESG fueron extraordinariamente resistentes en marzo durante el pico de la crisis del COVID-19, no mostrando signos de inflexión, incluso cuando el mercado llegaba consecutivamente a nuevos mínimos.

En general, la crisis ha validado la elección de los inversores de reasignarse hacia ESG porque la mayoría de los ETF de ESG han mostrado un rendimiento superior significativo durante el período. Ese rendimiento superior podría atraer a nuevos inversores, lo que creemos podría acelerar la transformación.

Mirando los próximos años, varios factores podrían apoyar una amplia conversión hacia ETF de ESG: primero, la creciente convicción de que el enfoque basado en índices no solo es coherente con la sostenibilidad de la inversión, sino que podría estar muy bien adaptada a ella; en segundo lugar, la gran variedad de índices que abarcan todas las filosofías de inversión, y todos los niveles de intensidad de ESG frente a diversificación y los objetivos de tracking error; y finalmente, nuevos segmentos que se abren como los ETF de transición climática, cuya utilidad será enfatizada por la regulación europea de índices de referencia climática que está por venir.

Tomando todo esto en cuenta, creemos que los ETF ESG representarán cerca de al menos el 20% del total de activos en cinco años, más del cuádruple de su actual proporción en el mercado.

Fuentes:
1 https://ec.europa.eu/info/publications/sustainable-financeteg-climate-benchmarks-and-disclosures_en.
2 https://unfccc.int/process-and-meetings/the-parisagreement/the-paris-agreement.
3 Lyxor International Asset Management. Data as at 25/05/2020. ESG ETF inflows in 2019 were €17bn, and total assets under management reached €102bn. Past performance is not a reliable indicator of future results.