Oportunidades de inversión en compañías vinculadas al agua

Pictet
Foto cedida

La semana pasada se celebró el Día Mundial del Agua, un recurso natural fundamental que la mayoría de las personas consideran semi-gratis. Sin embargo, menos del 3% de suministro de agua en el mundo es útil y la mayoría está bloqueada en glaciares y ‘permafrost’. Sólo el 0,25% del agua del planeta es potable y soporta todo el ecosistema. Además, el planeta ha llegado a 7.000 millones de habitantes, 1.000 millones más que hace doce años y el doble que en los 60. A ello se añade la expansión industrial y el crecimiento urbano. La ONU prevé que para 2050 más de 2.000 millones de personas no tendrán acceso adecuado a suministro de agua.

Invertir en agua se puede convertir en una alternativa muy rentable. Así lo cree Philippe Rohner, gestor del Pictet Water, quien considera que existe un estrés de agua. “Un simple café requiere de 140 litros de agua desde la producción a consumo y las empresas pronto se verán obligadas a revelar su huella de agua. De hecho, el uso de agua se ha multiplicado por nueve desde 1900, creando un problema de disponibilidad. De manera que los servicios que facilitan agua en cantidad, manera y calidad deseada son elemento básico de producción y desarrollo”, afirma el experto.

En su opinión, es evidente que hay exceso de demanda y los precios tendrán que subir. “De hecho, las tarifas tienden a aumentar por encima de la inflación y muestran aumentos de un dígito en América del Norte y sureste asiático. Necesitan subir para ajustarse a los costes. A largo plazo, el precio del agua sube de media anual más rápidamente que el petróleo y con menor volatilidad”. La cuestión no es tanto falta de agua sino gestión del suministro e impacto medioambiental. “El desafío es desarrollar la infraestructura adecuada y gestionarla de manera sostenible. Todavía en su mayoría es propiedad operada por entidades públicas".  

En este sentido, la externalización puede aliviar la carga. Un creciente número de municipios en todo el mundo, con presupuestos cada vez más ajustados, está considerando concesiones público-privadas para suministro de aguas e infraestructuras, delegando inversiones en el sector privado, cuyos conocimientos técnicos y experiencia proporcionan un enfoque integrado. Tan es así que el 12% de la población mundial ya recibe agua potable y sanitaria de proveedores privados y es previsible que para 2015 las privadas abastezcan agua a 16% de la población mundial. “Se trata de un mercado con un volumen de negocio anual de 260.000 millones de dólares, que crece al 7% anualmente”.

Sólo Estados Unidos tiene previsto invertir cerca de 900.000 millones de dólares hasta 2019 y el endurecimiento de normativa en la UE debe dar lugar a inversiones de 350.000 millones de euros hasta 2025. “En países desarrollados destaca la implantación de redes inteligentes para fugas y mejora de eficiencia energética en la producción de biogás a partir de aguas residuales. Además hay que tener en cuentas los costes de energía.  Se están desarrollando tecnologías encaminadas a ahorrar entre el 30 y el 80% de la energía utilizada en tratamiento de aguas residuales mediante bombeo más eficiente”, afirma el gestor de Pictet Asset Management.

A todo esto se añade que hay que cubrir necesidades de infraestructuras básicas en China, Oriente Medio y América Latina, incluyendo los Juegos Olímpicos y el Mundial de Fútbol en Brasil y el plan quinquenal de China para incrementar la recogida de residuos del agua del 16 al 19%. China emitió el ‘documento oficial Número 1’ para limitar la explotación del agua, mejorar la eficiencia y frenar la contaminación, con inversiones anuales previstas duplicadas hasta 400.000 millones de yuanes durante los próximos diez años. En el futuro es previsible progresos en tecnologías de reutilización de agua, ‘cosecha’ de lluvias y su recogida y almacenamiento, especialmente en Asia y Pacífico.

Industrias del agua: mejor inversión que renta variable global pasiva

“Las industrias de agua se asientan en la intersección de varias mega tendencias como urbanización, comercialización y sostenibilidad.  Aunque los mercados hayan atravesado por períodos de alta volatilidad, incluyendo la burbuja de Internet, la recesión de 2001-2003 y la actual crisis, la inversión en las industrias de agua se ha comportado mejor que una inversión pasiva en renta variable global. Además, los mercados se están dando cuenta de la importancia estratégica de la industria del agua, industria muy fragmentada, con tendencia a consolidación”, asegura Rohner.

Suministro; tecnología y servicios ambientales

El negocio de suministro global crece al 6% anual. Está regulado y cuenta con visibilidad a largo plazo y dividendos, con tendencia al aumento de empresas mixtas municipal-privado mientras las tarifas siguen en aumento. “En Estados Unidos hay oportunidades en reemplazo de infraestructura y en Europa oriental de nueva regulación. En países emergentes esta inversión es más oportunista, ante las enormes necesidades de inversiones de infraestructura, aunque el entorno regulatorio sea más incierto”, afirma el experto. 

Algunas empresas destacadas por el gestor son la brasileña pública Sabesp -en constante expansión de múltiplos a medida que el mercado toma conciencia del valor de sus activos- Cemig y Copasa también en Brasil o Beijing Enterprise Water en China. “El operador de Filipinas Manila Water ha llegado a abordar con éxito problemas de infraestructura en su país y logrado expandirse en India, lo que no ha hecho ninguna empresa europea. Además el volumen de agua embotellada en mercados desarrollados se ha reducido por cuestiones ambientales, pero crece a doble dígito en emergentes”, indica.

En el segmento de servicios ambientales hay presión de precios y consolidación, mientras los pedidos pueden verse afectados por el final de los paquetes de estímulo fiscal, aunque la infraestructura debe ser reemplazada a largo plazo. “El reciclaje es cíclico, con fluctuaciones de precios de las materias primas y cambios en modelos de negocio. En América del Norte hay duopolio en gestión de residuos, con disciplina de precios y rentabilidad atractiva, aunque los volúmenes han sido bajos debido a la depresión de la construcción. Algunas compañías en este segmento incluyen Waste Connection y Clean Harbors, con exposición a petróleo y gas, pero buenos resultados en 2012 y alentadoras perspectivas en 2013”.