Henning Gebhardt, responsable global de renta variable de Deutsche AM, predice una dispersión entre valores similar a la de 2015, cuando los retornos totales de los ganadores y perdedores del S&P 500 oscilaron entre el 140% y el -78%.
Dos meses enteros después del comienzo del año, los inversores y gestores han tenido que reajustar sus expectativas sobre la renta variable mundial a unos niveles más realistas, especialmente si se comparan con las expectativas que se tenían por estas fechas en años anteriores. Por ejemplo, en Deutsche AM han tenido que reducir sus objetivos anuales sobre renta variable, de tal modo que ahora esperan un retorno medio del 5% para esta clase de activo en el presente ejercicio. “Sin embargo, seguimos teniendo confianza en que los precios a finales de 2016 deberían estar moderadamente más elevados que a finales de diciembre de 2015”, explica Henning Gebhardt, responsable global de renta variable.
Gebhardt comenta que, el año pasado, el S&P 500 salvó los muebles por los pelos, gracias a los retornos generados por los dividendos. “El año pasado demostró ser aburrido y decepcionante para todos aquellos inversores acostumbrados a los retornos de doble dígito de los años previos”. Ahora bien, esto no significa para el experto que las acciones hayan perdido atractivo.
Para Gebhardt, la clave de 2016 va a ser más que nunca la selección de valores: “El retorno de valores individuales continuará dependiendo no sólo de la situación económica general, también del éxito de las actividades corporativas”. En concreto, el representante de Deutsche AM enumera los siguientes factores como clave para la generación de valor: “La batalla por la cuota de mercado, la salida de jugadores individuales, forzados adquisiciones hostiles o amigables, reestructuraciones difíciles, o el lanzamiento de nuevos e innovadores productos”. Gebhardt añade que el momento para detectar estas tendencias es clave porque, en su opinión, “estas dinámicas sólo se revelan cuando se rompe el mercado”. Pone como ejemplo el propio balance de 2015: dentro del S&P 500, los retornos totales de ganadores (principalmente tecnológicas y nuevos medios de comunicación) y perdedores (sobre todo compañías vinculadas a las materias primas) oscilaron entre el 140% y el -78%, revelando una enorme dispersión.
“2016 puede revelar una dispersión similar de los retornos”, avisa el experto de Deutsche AM. Éste cree que podrán lograr rendimientos positivos los inversores más experimentados, pero no todos sino los que sean capaces de dar respuesta a preguntas como las de la lista que aporta a continuación:
- ¿Se verá una consolidación del precio de las materias primas? ¿Recobrarán las empresas de este segmento algo de poder de fijación de precios?
- ¿Qué compañía farmacéutica logrará mayores progresos en el desarrollo de medicinas contra el Alzheimer?
- ¿Quiénes son los vendedores más exitosos de nuevas tecnologías? (el experto va más allá de ejemplos obvios para citar por ejemplo a fabricantes de televisiones LED o de cableado de 48 voltios para automóviles)
- ¿Qué bancos han apostado más por el fintech?
“La competición efectiva implica una fiera batalla por la cuota de mercado. Quien pare, se tropezará”, sentencia el responsable de renta variable global. Éste termina sus reflexiones, recogidas en el último informe CIO View editado por la entidad, con el siguiente mandato: “Stock pickers, ¡volved al trabajo!”.