David Ardura (Finaccess Value), Susana Felpeto (atl Capital) y Alexia Matoses (BBVA) explican donde ven las mayores oportunidades en 2025.
Regístrate en FundsPeople, la comunidad de más de 200.000 profesionales del mundo de la gestión de activos y patrimonios. Disfruta de todos nuestros servicios exclusivos: boletín matinal de noticias, alertas con las novedades de última hora, biblioteca de revistas, monográficos y libros.
El cambio de rumbo de los bancos centrales con respecto a sus políticas monetarias ante la contención de la inflación, obliga a modificar la estrategia con respecto a los activos de renta fija para este año. Una estrategia en la que los movimientos tácticos en las carteras cada vez tienen más peso ante las diferencias crecientes entre los mercados de EE.UU. y Europa por los dispares ciclos económicos que presentan ambas regiones. Disparidad que afecta a las perspectivas de sus mercados, sobre todo en el caso de la renta fija.
"En el caso estadounidense, la fortaleza económica sigue siendo un hecho innegable apuntalado por el consumo privado y el gasto público. Sin embargo, en Europa la estimación de las cifras de crecimiento sigue viendo constantes revisiones a la baja, dando la oportunidad al BCE de actuar de una manera mucho más agresiva que la Fed", explica David Ardura, director de inversiones de Finaccess Value.
Desde la agencia de valores optaron por empezar el año con duraciones de la cartera de entre dos y tres años pero recientemente, tras el repunte en las rentabilidades de los bonos, sobre todo de los de EE.UU, han decidido aumentar esas duraciones. Es algo que también han hecho desde atl Capital. Susana Felpeto, directora de soluciones de inversiones de la firma también coincide con Ardura en señalar la deuda corporativa europea de alta calidad como el activo que presenta las mejores perspectivas de cara a este 2025. "Hemos empezado el año con posición en fondos de renta fija corporativa europea de alta calidad y con duraciones en torno a 4 años", explica . "En crédito, el Investment Grade Europeo sigue siendo el activo preferido, con especial interés en toda la estructura de capital de los Financieros (incluidos AT1)", señalar David Ardura.
A fin y al cabo, tal como defiende Alexia Matoses, selectora de renta fija en BBVA Quality Funds, "las estrategias de gobiernos, aggregate y crédito investment grade son core en las carteras y que se mantienen de manera estructural en cualquier entorno de mercado".
David ArduraAlexia MatosesSusana Felpeto
Con qué hay que ir con cuidado
Otra cosa son las estrategias más arriesgadas como por ejemplo el high yield o la deuda emergente, uno de los activos este último que mejor se comportó en 2024. Desde atl, Felpeto defiende que el mercado de high yield en este momento ya no compensa tanto como lo hizo en el pasado. “Según se han ido estrechando los diferenciales de crédito, hemos ido reduciendo la exposición a HY, ya que la rentabilidad adicional que ofrece no compensa el riesgo, desde nuestro punto de vista”, explica.
Una idea en la que coincide David Aradura que solo ve oportunidades en este tipo de emisiones en los plazos más cortos y en el mercado europeo ya que en EEUU, "los diferenciales en High yield se mueven muy cerca de los mínimos de los últimos 12 años, lo que supone una eventual señal de riesgo para este activo".
Esto en cuanto al tipo de activo pero ¿qué vehículo es más eficiente para incluir renta fija en las carteras? Desde BBVA Quality Funds, Alexia Matoses defiende la idoneidad tanto del fondo de gestión activa como del de gestión pasiva. "Consideramos que son estrategias complementarias y no excluyentes, ambas tienen cabida simultáneamente en las carteras. Dicho esto, el producto indexado suele ser más útil para implementar apuestas muy específicas, como por ejemplo reflejar una visión sobre el tramo 3-5 años de la curva de gobiernos, o en carteras que tengan como requisito un tracking error reducido", afirma.