Qué gestoras han crecido más en el negocio de ETF europeos

La gestión pasiva, que lleva desde los años 70 desarrollándose en EEUU, ha experimentado un fuerte crecimiento en los últimos años en Europa en un contexto en el que los bajos tipos de interés han impulsado a todo tipo de activos y en el que los inversores están ganando conciencia con respecto a las comisiones que pagan por sus fondos. Tal es el crecimiento que, según apunta Morningstar Direct en su último informe sobre ETF en el Viejo Continente, se prevé que el mismo alcance la cifra de los 2 billones de euros en apenas cinco años, lo que implicaría un crecimiento del 40% anual de aquí a 2024.

Las patas de ese crecimiento irían desde una regulación más favorable en la que Mifid II tiene una gran influencia ya que supone una gran presión de márgenes para la industria a la innovación que están desarrollado los proveedores de ETF al incorporar cada vez más estrategias centradas en indexación activa o en inversión socialmente responsable.

A falta de saber si se cumplen o no las positivas expectativas de Morningstar, lo que parece claro es que en los dos últimos años, la industria ha protagonizado un nuevo repunte que ha permitido que los activos bajo gestión en ETF domiciliados en Europa haya alcanzado los 760.000 millones de euros o lo que es lo mismo el 8,6% del total de los activos con los que cuenta la industria en Europa, tres puntos más de lo que suponía en 2016. No en vano, según recuerdan en Morningstar “el crecimiento anual en el número de activos ha sido casi siempre de dos dígitos. Las únicas excepciones ocurrieron en años como 2011 o 2018, los dos ejercicios en los que hubo más volatilidad y caída en el precio de las acciones”.

En esos aumentos de patrimoniales mucho ha tenido que ver el buen comportamiento que han experimentado los mercados al calor de las políticas monetarias laxas que han llevado a cabo los bancos centrales y del crecimiento económico que se ha producido de manera sincronizada en todo el mundo. Pero también ha influido mucho el aumento de la demanda hacia este tipo de productos como demuestra el hecho de que los flujos hacia estos productos han sido positivos en cada uno de los últimos diez años. De hecho, solo en el primer trimestre del año las suscripciones netas a ETF domiciliados en Europa alcanzaron los 26.000 millones de euros, lo que, según Morningstar, augura “otro muy buen año de crecimiento para la industria de ETF”.

El impacto del M&A

En todo caso, el crecimiento que han experimentado las gestoras de ETF en los últimos dos años (el informe de Morningstar sobre la industria tiene un carácter bianual) no ha sido igual para todos los proveedores, sobre todo teniendo en cuenta que en este periodo se han producido grandes operaciones corporativas. Por ejemplo, aunque Ishares sigue siendo el líder indiscutible del negocio en Europa, con una cuota de mercado del 44,6%, no es la gestora que más aumento patrimonial ha experimentado en los dos últimos años. Ese premio se lo ha llevado Invesco ya que sus activos bajo gestión han pasado de los 2.300 millones a los 25.000 millones debido sobre todo a la compra de un proveedor como Source que ha permitido a la gestora británica situarse entre los 10 mayores proveedores de ETF de Europa.

Igual de espectacular ha sido el crecimiento que ha protagonizado Wisdom Tree cuyos activos bajo gestión han pasado de los 400 millones de euros a los 17.000 millones y con la misma causa detrás ya que adquirió el negocio de commodities ETF Securities.

Dejando de lado el crecimiento que han tenido las gestoras que han sido muy activas en M&A en estos dos últimos años, conviene resaltar el fuerte aumento patrimonial que han experimentado otras como UBS, Amundi o State Street, cuyo patrimonio en ETF europeos ha aumentado en niveles superiores al 70% en estos dos últimos años.

Fuente: elaboración propia con datos de Morningstar Direct