¿Qué le pasa a Credit Suisse?

Periódico
Foto: Adeolu Eletu, Unsplash

Las acciones de Credit Suisse se han desplomado más de un 20%, alcanzando otro mínimo histórico. Esto ha obligado al regulador a suspender la cotización de la entidad, así como otras grandes entidades europeas. “Las caídas se están produciendo después de que el presidente del Banco Nacional Saudí, Ammar Alkhudairy, que compró una participación del 10% en Credit Suisse el año pasado, descartara proporcionar al banco más ayuda financiera”, recuerdan desde A&G.

El martes, Credit Suisse reveló que su auditor, PwC, identificó “debilidades materiales” en sus controles de información financiera. Los Credit Default Swaps (CDS) a un año de Credit Suisse, que indican la predisposición bajista de los inversores, aumentaron hasta 800 puntos básicos el miércoles, desde los 250 puntos básicos de principios de mes. El banco lleva un tiempo sufriendo sus propios problemas. Su cotización ha perdido un 70% de su valor desde principios de 2022.

Tal y como explica Jérémie Boudinet, responsable de Crédito de Grado de Inversión de La Française AM, Credit Suisse está luchando por recuperar la confianza de sus clientes tras un pésimo anuncio de resultados en el cuarto trimestre y una pérdida neta para todo el año 2022 de 7.400 millones de euros. “El banco está peleando por estabilizar las salidas de depósitos y activos bajo gestión, que fueron muy elevadas en el cuarto trimestre (94.600 millones de euros en Wealth Management, 8.150 millones en Swiss Bank y 12.200 millones en Asset Management)”. Ante esta crisis de confianza, el banco suizo acaba de pedir un rescate de 50.000 millones al Banco Nacional de Suiza (que le ha sido concedido y que asegura estar barajando aceptar) y ha exhortado a las autoridades del país a que hagan una declaración pública de apoyo a la entidad para estabilizar la situación. Y esto último es lo que, por ahora, han hecho.

Lo que ha dicho el regulador suizo y su banco central

En un comunicado conjunto emitido el miércoles por la noche, la Autoridad de Supervisión del Mercado Financiero Suizo (FINMA) y el Banco Nacional Suizo (SNB) aseguraban que "Credit Suisse cumple con los requisitos reglamentarios de capital y liquidez". En su nota, explicaban que la regulación suiza requiere que todos los bancos mantengan reservas de capital y liquidez que cumplan o excedan los requisitos mínimos de los estándares que fija Basilea. "Además, los bancos de importancia sistémica deben cumplir con mayores requisitos de capital y liquidez. Esto permite absorber los efectos negativos de las grandes crisis y perturbaciones", indicaban.

De acuerdo con la FINMA y el SNB, los estrictos requisitos de capital y liquidez aplicables a las instituciones financieras suizas garantizan su estabilidad. "Credit Suisse cumple con los requisitos de capital y liquidez impuestos a los bancos de importancia sistémica. Los problemas surgidos en Estados Unidos con Silicon Valley Bank y Signature Bank no representan un riesgo directo de contagio para los mercados financieros suizos. No hay indicios de un riesgo directo de contagio para las instituciones suizas debido a las turbulencias actuales en el mercado bancario estadounidense", aseguran. Pero también dicen algo muy importante: "si es necesario, el SNB proporcionará liquidez a Credit Suisse".

Pérdida de depósitos

Según Bloomberg, Credit Suisse ha subido recientemente el tipo de interés de los depósitos de dinero nuevo a partir de cinco millones de dólares en Asia, con el fin de estabilizar los flujos de salida y retener a los clientes existentes. Por otra parte, el presidente de la entidad, Alex Lehman, está siendo investigado por FINMA, que trata de esclarecer hasta qué punto Lehmann y otros directivos de Credit Suisse, eran conscientes de que los clientes seguían retirando fondos cuando dijo en entrevistas a los medios que las salidas se habían detenido. Según Credit Suisse, esa investigación ha sido archivada.

Credit Suisse ha estado sufriendo salidas de depósitos y tiene una base de clientes compuesta en gran parte por particulares y empresas sofisticadas, que se consideran depositantes menos leales que los clientes minoristas. Los próximos meses serán clave para Credit Suisse, que necesita dramáticamente estabilizar su base de depósitos, incluso a costa de su rentabilidad, que de todos modos ya se ve gravemente mermada”, explica el experto de La Française AM.

Hipótesis sobre el futuro de Credit Suisse

La hipótesis de base que manejan en la gestora es que Credit Suisse puede acabar más o menos dividido, con la venta parcial o total de su franquicia de Banca de Inversión, conservando su rama minorista suiza y parte de su franquicia de Gestión Patrimonial en el extranjero. “Sin embargo, esta hipótesis gira en torno a su capacidad para contrarrestar las salidas de depósitos a corto y medio plazo”, matizan, lo que no significa que el miedo actual al contagio y la presión de los mercados suponga un entorno muy poco favorable para el banco suizo.

Según explican desde Vontobel AM, si el Banco Nacional Suizo o la FINMA intervienen, una línea de liquidez parecería el primer paso más obvio, sobre todo si la entidad está viendo salidas de dinero. “Además, algunos activos podrían retirarse del balance, algo que sucedió con varios bancos durante la crisis financiera mundial”. De acuerdo con los expertos de la entidad, “este apoyo podría darle a Credit Suisse el tiempo que necesita, pero la situación es muy volátil actualmente y, dado el sentimiento negativo impulsado por los bancos regionales de Estados Unidos, el momento no podría ser peor”, concluyen.