Radiografía de Europa del Este: Estructura, características y valoraciones que ofrece este mercado

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VoxLive, Flickr, Creative Commons

Pese a la proximidad geográfica, Europa del Este es un mercado muy desconocido para el inversor español, que suele mirar hacia Asia o Latinoamérica cuando se plantea ganar exposición a la renta variable emergente. La crisis geopolítica desatada entre Rusia y Ucrania fue la gota que colmó el vaso de la paciencia de unos inversores que desde entonces han preferido mantenerse al margen de este mercado, sobre todo teniendo en cuenta el elevado peso de la Bolsa de Moscú en la región. Pero…  ¿cómo es, cómo está constituido y qué oportunidades ofrece el mercado de renta variable de Europa del Este? En una reciente presentación celebrada en Madrid y Barcelona por Andreas Schwabe, director de análisis macroeconómico de Raiffeisen Capital Management, y Gregor Holek, gestor de carteras, ambos expertos lo han explicado.

El conocimiento que tiene esta gestora austriaca de Europa del Este es muy profundo. Esto se debe a razones históricas. Raiffeisen CM forma parte de una entidad bancaria con un peso específico muy importante en la región. Durante los últimos 25 años el banco ha llevado a cabo un ambicioso proyecto de expansión hacia el este vía adquisiciones. Esto le ha permitido tener presencia en Eslovaquia, República Checa e incluso llegar a Rusia, a través de la compra de bancos locales. Raiffeisen CM, por su parte, es una de las gestoras más importantes de Austria. Fue creada hace 30 años y su oferta de producto alcanza tanto a la renta variable como a la renta fija. En lo que respecta a la gama de renta variable, dos de sus estrategias más importantes son el Raiffeisen Eastern European Equities y el Raiffeisen Russia Equities, ambos gestionados por Holek.

Datos demográficos y de PIB

Lo primero que han querido hacer en la gestora es explicar datos generales sobre la región que muchos inversores desconocen. Por ejemplo, en la región conocida como Europa del Este (que abarca Europa Central, sudeste europeo y Rusia, Ucrania y Bielorrusia) habitan 310 millones de personas. Es una cifra demográfica ligeramente inferior a la de Estados Unidos (319 millones) o la Eurozona (334 millones). Donde sí aparecen las grandes diferencias es en el tamaño de las economías. El PIB conjunto de la región es de 2,6 billones de euros. Es una quinta parte de lo que es el PIB de Estados Unidos (13,1 billones de euros) y una cuarta de la Eurozona (10,1). En lo que respecta al PIB per cápita, en Europa del Este es de 8.500 euros, muy por debajo del de Estados Unidos (41.100) y la Eurozona (30.200).

En términos de crecimiento, las expectativas en la región son divergentes. Se estima que Europa Central crecerá este año a un ritmo del 3%, el sudeste europeo al 1,9% y las del Este (Rusia y Ucrania) se contraigan un 4,4%. Para 2016 se espera una estabilización del crecimiento en países como Polonia, Hungría o República Checa, una aceleración en el sudeste europeo y crecimiento muy tímido en el Este (0,6%). Polonia y Turquía son los países de la región que más crecerán este año y el que viene (3,5%, respectivamente). Le siguen Hungría y Rumanía, con crecimientos estimados del PIB para 2015 del 3%, respectivamente (ver tabla I). Por otro lado, destaca el hecho de que el PIB per cápita en los países de Europa Central tiende a converger con respecto a los de la Eurozona. Además, por su carácter exportador, la recuperación económica que vive la Eurozona (se prevé un crecimiento del 1,4% para este año y del 2% para el que viene) es muy importante para el Este. “De hecho, es fundamental para la actividad en la región”, afirma Schwabe.


En términos de capitalización del mercado, Rusia es el mercado de mayor tamaño de la región, con una capitalización de mercado de 387.000 millones de dólares, por lo que el peso de las acciones rusas en el índice es del 52%. Le siguen Turquía y Polonia, con una capitalización de mercado de 154.000 y 119.000 millones de dólares, respectivamente, lo que les sitúa con un peso en el índice del 19%, respectivamente. Es decir: tres países centran el 90% del tamaño del mercado. También se aprecia una gran concentración a nivel sectorial, donde compañías energéticas (que representan el 34% del índice) y entidades financieras (31%) ocupan la mayor parte. Otro aspecto interesante a analizar son las valoraciones que ofrecen los distintos mercados que integran la región, dada la importante divergencia que se aprecia (ver gráfico II).

Por ejemplo, el PER actual de la bolsa rusa es de 5,7 veces, lo que –si solo se tuviese en cuenta esta ratios en un análisis de valoración- situaría a este mercado en uno de los más atractivos del mundo. El resto de mercados de Europa Central y del Este cotizan con PER superiores a 10 veces, siendo Hungría (15 veces), Polonia (14,8 veces) y República Checa (14,6) los que presentarían múltiplos más elevados. Haciendo el ranking de las bolsas más atractivas por rentabilidad por dividendo, la primera es la República Checa (5,4%). Le siguen Rusia (4,5%) y Rumanía (4,2%). “La rentabilidad por dividendo que ofrece la región se ha vuelto mucho más atractiva que la que ofrecen los mercados globales emergentes”, indica Holek. En lo que respecta al crecimiento del beneficio por acción en divisa local, los mayores incrementos para este año se esperan en Hungría (33,8%) y Polonia (17%). En el otro extremo se sitúan Rusia (-13,5%) y Rumanía (-7,4%).