La palabra metaverso saltó recientemente a la palestra cuando Facebook cambió su nombre por el de Meta para marcar su nueva identidad como empresa metaversa. Aclamado como el próximo Internet, el metaverso representa un mundo virtual en línea donde los usuarios pueden reunirse, explorar, trabajar, jugar e incluso comprar. Mark Zuckerberg describe el metaverso como una “Internet inmersiva y encarnada en la que uno está en la experiencia, no sólo mirándola”.
En el metaverso, los usuarios adoptan formas digitales llamadas avatares, y asumen experiencias en un espacio virtual compartido donde el único límite es su imaginación. “A medida que el metaverso se expanda, ofrecerá un mundo alternativo hiperreal en el que podremos convivir”, explica Yan Tan Boon, gestor del fondo Neuberger Berman 5G Connectivity. A su juicio, el metaverso ya no es un futuro ficticio de ciencia ficción. Se pueden ver atisbos de él en juegos online como Fortnite, Minecraft y Roblox.
“Al no poder reunirse por el COVID-19, los niños celebran fiestas de cumpleaños virtuales en Minecraft. Los conciertos en línea tienen lugar en Fortnite. Y las reuniones de negocios se celebran en Facebook Horizon Workrooms. Las tendencias de la digitalización han llegado para quedarse y la oportunidad de reunirse en línea o simular el mundo real ofrece un potencial en todos los sectores. Imagina ciudades enteras o plantas de producción reproducidas en línea. Colegas de todo el mundo pueden conectarse al metaverso para trabajar en el mismo diseño 3D”, revela.
Expectativas de uso futuro
Aunque por ahora es poco más que una sala de chat en línea en 3D, se espera que un día el metaverso se convierta en un lugar en el que los usuarios pasen una parte importante de su tiempo, ya sea para trabajar, jugar o conectar con sus amigos. “Naturalmente, las empresas están interesadas. Muchas aplicaciones del metaverso se encuentran actualmente en el ámbito del entretenimiento y los juegos en línea, pero a medida que se desarrolle, el metaverso permitirá nuevas formas de atraer a los consumidores y transformar áreas como las compras”.
En este sentido, la compra y la entrega en línea ya se han convertido en la norma. Pero el metaverso dará a los consumidores aún menos razones para visitar las tiendas físicas. Tal y como indica, la realidad virtual y la realidad aumentada permitirán que las experiencias en las tiendas sean aún más interactivas, y que los usuarios puedan probarse los artículos independientemente de los horarios de apertura de las tiendas o de la disponibilidad de existencias. Las compras no sólo serán de productos físicos, sino también de artículos digitales como zapatillas de deporte de la marca Nike para sus avatares.
A su vez, los usuarios tendrán la oportunidad de aprovechar esta economía en línea mediante el comercio de bienes digitales, algunos creados por los usuarios. “Ya sea en realidad virtual, realidad aumentada o simplemente en una pantalla, la promesa del metaverso es permitir una mayor superposición en todos los aspectos de nuestra vida digital y física. Y el 5G es una tecnología necesaria para desbloquearlo”.
Ejemplos de compañías expuestas a esta temática
En su opinión, las velocidades ultrarrápidas de la red y la baja latencia permitirán aplicaciones de gran ancho de banda, gráficos interactivos y manejar miles de usuarios simultáneos en estrecha proximidad. “Los auriculares también tendrán que ser capaces de renderizar gráficos de forma remota, ser mucho más ligeros y tener una mayor eficiencia energética. Esto significa que es necesaria la colaboración entre la infraestructura, los dispositivos, el software y los contenidos del 5G. Las principales empresas tecnológicas, como Marvell, AMD, MediaTek, Novatek y Roblox, se están asegurando no fallar”.
Además de los cascos de realidad virtual y las gafas de realidad aumentada, el metaverso estará impulsado a corto plazo por el software. “Vemos al gigante coreano de Internet NAVER como un beneficiario dada su plataforma metaversa Zepeto, que está respaldada por una sólida base de usuarios, tecnología de inteligencia artificial y una fuerte propiedad intelectual de su negocio de entretenimiento”, ejemplifica.
