Tendencias y oportunidades de inversión en la industria de ETF

Si hace cinco años el volumen de activos que tenían los proveedores de soluciones pasivas en España rondaba los 32.000 millones de euros, hoy ese patrimonio se ha más que duplicado, alcanzando los 72.200 millones, según datos del barómetro que publica FundsPeople. En términos patrimoniales, su peso en el negocio de la industria extranjera en este periodo ha pasado del 15,7% al 22,2%. Es decir, se ha incrementado en 6,5 puntos. ¿El motivo?

El ETF ofrece a los inversores la posibilidad de asignar de manera eficiente a cualquier clase de activo. Su bajo coste, liquidez y transparencia en la exposición son atributos muy valorados por parte de los inversores, que cada vez miran más a estos vehículos para construir sus carteras. Es la razón que explica su fulgurante crecimiento, no solo en España, sino que también en Europa. Coinciden en ello creadores de índices, proveedores de ETF y sus clientes.

Los participantes en el evento

Lo dejaron claro en el evento El futuro de los ETF, organizado por FundsPeople en Madrid y que reunió a proveedores de índices como S&P Dow Jones Indices, los responsables de algunas de las gestoras más relevantes dentro de la industria de los ETF, como BlackRock, State Street Global Advisors, DWS, Invesco, J.P.Morgan AM o Fidelity International, y firmas que se han mostrado muy activas en la utilización de estos vehículos, como es el caso de CaixaBank AM, BBVA AM u Optimize Investment Partners.

Pero, además de coste, liquidez y transparencia, está la rentabilidad. Según los datos aportados en el evento por Carlos Kinsky, director de cobertura de clientes del proveedor de índices S&P Dow Jones Indices, a tres años solo el 20% de los fondos activos han superado el rendimiento de su mercado de referencia. Y si nos alejamos en el tiempo, a cinco y 10 años, el porcentaje baja hasta el 12%. La mayoría de los gestores activos ni siquiera lo consiguen en entornos bajistas, sobre todo en mercados eficientes. Una de las razones -indica- “puede ser que ante fases bajistas los fondos tienen más exposición a liquidez y menos exposición a equity”, perdiéndose el rebote.

La importancia de la fiscalidad

Los ETF son cada vez más utilizados por los equipos de asset allocation. Los usan de forma estructural como inversión core, sobre todo en los mercados más eficientes en los que es difícil generar alfa. Tal y como apuntaba Pablo García, director de Arquitectura Abierta & Selección de ETF de CaixaBank AM, es en la gestión discrecional de carteras donde se observa cada vez una mayor demanda de estos productos. “No de forma directa, pero sí de forma indirecta a través de fondos índices alimentados por ETF”, que además “permite tener una diversidad de proveedores en cada cartera”. La razón, en este caso, es la regulación española, que fiscalmente no otorga al ETF el mismo estatus que al fondo de inversión.

La regulación es algo que no se debe subestimar. Puede tener un gran impacto en el desarrollo de la industria de gestión de activos, en general, y la de ETF, en particular. De hecho, ya ocurrió en otras jurisdicciones, donde estos productos recibieron un fuerte impulso entre determinadas tipologías de clientes gracias al establecimiento de nuevos marcos normativos. Ocurrió en el pasado reciente en Reino Unido con la entrada en vigor de la RDR. “Los asesores británicos empezaron a adoptar el vehículo porque tenía sentido y no por ser parte de su modelo de negocio”, recuerda Christopher Mellor, responsable de Productos de Renta Variable y Commodities de Invesco para EMEA.

Selección de producto

En los procesos de selección de producto, hay aspectos que históricamente han cobrado mucha más relevancia que el TER o la comisión de gestión. En este sentido, García recordaba la predilección de su casa por los productos de réplica física, mientras que Natalia Salcedo, gestora de carteras senior en BBVA AM, remarcaba la importancia del tracking difference, así como analizar en detalle el swap, la ventaja fiscal, el swing price y la liquidez del producto. Por su parte, Carlos Pinto, gestor senior de Inversiones en Optimize Investment Partners, ponía el acento en el tracking error y la liquidez como las ratios principales en las que se fijaban a la hora de seleccionar ETF.

El hecho de que este año los fondos cotizados estén registrado captaciones netas en Europa por aproximadamente 50.000 millones de euros es un dato que a Olivier Paquier, responsable de Distribución de ETF de J.P.Morgan AM para EMEA, le dice poco. Porque en esta industria todo es relativo. Más interesante le resulta poner esa cifra en perspectiva. “El 2022 está siendo un año de fuertes salidas en fondos tradicionales y entradas en ETF”. Este dato puesto en contexto demuestra, a su juicio, la confianza que los inversores europeos han depositado en el vehículo.

Sostenibilidad, la gran tendencia en el mundo de los ETF

Para Antoine Lesné, responsable de Estrategia en State Street Global Advisors SPDR, la tendencia a largo plazo que subyace es “el reemplazo de productos de gestión activa por estrategias de gestión pasiva y la sustitución de productos no sostenibles por productos que cumplen con criterios ASG”. Esta es una tendencia que están detectando todos los proveedores. Peter Scharl, responsable para el Canal de Wealth Management en Europa Continental de iShares, reconocía que este año el 33% de los flujos que están recibiendo los ETF en EMEA los están captando productos que siguen criterios ASG. “La transición a ETF ASG se está produciendo a un ritmo mucho más rápido del que habíamos previsto”.

En 2022, los flujos hacia el sector energético han sido fuertes. Sin embargo, los productos ASG continúan siendo los que más están captando, coincidía en señalar Stefan Kuhn, responsable de Distribución de ETF para Europa en Fidelity International. A este respecto, Lukas Ahnert, especialista senior de Gestión Pasiva en DWS, valoraba el hecho de que la regulación esté aportando certeza a los productos que siguen los criterios de sostenibilidad, lo que -a su juicio- hace que los inversores se sientan cómodos. Considera, además, que hay oportunidades para desarrollar nuevos productos, sobre todo con estrategias orientadas al engagement. “Es lo siguiente en la agenda de los ETF”, auguraba.