Tres activos de renta fija con potencial para ofrecer una rentabilidad mínima del 5% en los próximos 12 meses

Gartside
Foto cedida

No todos los bonos son iguales, ni todos los fondos de renta fija están creados de la misma forma y con los mismos objetivos, pero lo cierto es que previsiblemente 2015 pasará a la historia como un año para olvidar en este mercado. Y, en un entorno en el que se avecinan subida de tipos de interés en Estados Unidos, no parece que el futuro se presente especialmente prometedor para esta clase de activo. Tras una tendencia que ha durado 30 años, las tires han caído a mínimos históricos. Desde 1964, el 96% de los días las rentabilidades de los bonos presentaban niveles más altos que los actuales. Es una forma de ver cómo de caro está el mercado. Cuando las tires son muy bajas el riesgo es mayor, ya que con un mero movimiento de solo un 1% de tir en algunos segmentos de mercado puedes llegar a perder hasta un 15% por la caída del precio del bono.

Esto hace que la renta fija sea actualmente una de las clases de activo más difíciles de gestionar. “La rentabilidad que ofrecerán los bonos será muy inferior a la que han ofrecido en el pasado. De eso no hay ninguna duda. En el horizonte nos esperan subidas de tipos de interés en Estados Unidos, que nosotros prevemos comenzarán en el primer trimestre de 2016. Sin embargo, lo importante aquí no es cuándo empezará la Reserva Federal a subir los tipos, sino el ritmo al que lo vaya a hacer. En este sentido, creemos será mucho más lento y paulatino que en ocasiones anteriores”, afirma Nick Gartside, jefe de inversiones de renta fija de J.P.Morgan AM en una presentación en Londres. Pero, a pesar de este entorno que se dibuja, Gartside afirma que existen segmentos del mercado en los que se puede conseguir retornos superiores al 5% durante los próximos doce meses.

Más allá de la deuda soberana está el crédito, un área en el que –según el experto- se puede encontrar valor, con balances saneados y tires superiores a la que ofrecen los bonos gubernamentales. Gartside cita tres categorías muy concretas dentro de este segmento del mercado. La primera es el high yield, tanto estadounidense como europeo. “Ambos mercados están repletos de oportunidades. En ellos se pueden encontrar oportunidades atractivas tanto desde un punto de vista de yield como de potencial comprensión de spread. En EE.UU, por ejemplo, los mínimos alcanzados por las tires a mediados de 2014 en torno al 5%, estas han vuelto a niveles del 7%. Hay que ser selectivos, pero desde un punto de vista técnico la fotografía es prometedora. Los vencimientos que tendrán lugar en 2016 son muy manejables, la ratio de default permanecerá baja y los nuevos emisores que están entrando en este mercado siguen sirviendo de apoyo”, explica.

En lo que respecta al mercado de high yield europeo, la tir que ofrece es inferior, si bien desde la firma aseguran que no son mercados comparables, ya que su composición es distinta. En el caso del high yield estadounidense, por ejemplo, el 46% de las emisiones tienen una calidad crediticia de BB (la máxima dentro del rango del high yield). Sin embargo, este porcentaje es 20 puntos superior en el caso del mercado de deuda de alto rendimiento europeo (65,4%). Además, el peso de los activos CCC o con un rating inferior es significativamente mayor en EE.UU (14,6%) que en Europa (6,7%). A nivel sectorial las composiciones también difieren. En EE.UU, telecos y tecnológicas (14,6%), energéticas (13,3%) y compañías de bienes de capital (12,5%) son las que cuentan con un mayor peso en el índice. En Europa, por el contrario, las principales ponderaciones corresponden a servicios financieros (27,4%) y a empresas industriales (15,4%).

Otro segmento de renta fija corporativa que encuentran interesante y donde creen se van a poder generar rentabilidades superiores al 5% en los próximos doce meses es en el mercado de bonos con grado de inversión, principalmente en lo que respecta a deuda de entidades financieras europeas. “El proceso de desapalancamiento en el que se encuentra inmerso el sector está creando oportunidades de inversión. Muchas emisiones son atractivas. Me refiero, por ejemplo, a los cocos, emisiones tier 2 o deuda bancaria senior”, asevera Garstide.

El tercer segmento de mercado en el que todavía encuentran oportunidades para generar rentabilidades mínimas del 5% a un año es la deuda periférica, principalmente de países como España o Italia. “El ímpetu en términos de crecimiento económico ha virado hacia los países periféricos. España es el mayor caso de éxito en la región. Ese mayor crecimiento económico todavía no está puesto en precio. Los bonos soberanos de España e Italia siguen cotizando a niveles atractivos en comparación a los bunds alemanes. No veo ninguna razón por la que el diferencial de 120 puntos básicos que actualmente existe entre el bono a diez años del Tesoro español y el bono alemán a diez años se estreche hasta el entorno de los 60 puntos básicos. Además, está el hecho de que la tir sigue siendo atractiva desde un punto de vista de valor relativo”, explica el experto.