Tres razones por las que las acciones brasileñas son el mercado del momento

Fuente: Mateus Campos Felipe on Unsplash

Entre los mercados emergentes, Brasil brilla por sus perspectivas positivas para el segundo semestre. La fuerte caída de la inflación deja margen para recortes de tipos por parte del Banco Central de Brasil (BCB). Los temores a políticas fuertemente orientadas al gasto público, que se concretaron a principios de año con la toma de posesión de Lula, se han normalizado en estos primeros meses de gobierno del nuevo presidente. Por último, el mercado bursátil brasileño, pese a un repunte en abril y mayo, sigue beneficiándose de unas valoraciones históricamente bajas.

Descenso de la inflación y relajación monetaria a la vista

"Mientras que muchos mercados desarrollados siguen subiendo los tipos para frenar la inflación subyacente, el BCB ha mantenido los tipos en el 13,75% durante casi un año, habiéndolos subido de forma temprana y constante desde el 2% en marzo de 2021", afirman desde el equipo de gestión del DWS Invest Brazilian Equities, fondo con Rating FundsPeople 2023 de Itaú USA Asset Management. "Como resultado, los precios de los alimentos y la energía están cayendo con fuerza, situando el IPC por debajo del 4% y convirtiendo a Brasil en el líder mundial en tipos de interés reales", afirman. Basándose en estos datos, la gestora espera que el BCB comience a relajar su política monetaria en agosto o septiembre. "Esto supondría un fuerte impulso para la expansión múltiple, las entradas de capital y el rendimiento de las acciones", afirman.

Control del gasto público

Además, los gestores pusieron sobre la mesa una cuestión relacionada con el equilibrio político en el país sudamericano. Si, con la toma de posesión de Lula, los mercados habían previsto el riesgo del lanzamiento de un programa gubernamental dedicado al gasto público, este temor ha disminuido progresivamente a lo largo del año. Las tendencias populistas del presidente Lula han sido contenidas en gran medida por el BCB, el Congreso y el Tribunal Supremo, y el tan esperado marco fiscal, destinado a controlar el gasto y los niveles de deuda, se presentó finalmente a finales de marzo y está a punto de ser aprobado", afirman desde la casa gestora.

Valoraciones bajas

Por último, el equipo directivo señala que, incluso tras un repunte sustancial en abril y mayo, las valoraciones de las acciones brasileñas siguen siendo históricamente bajas. Todo ello mientras las perspectivas de beneficios mejoran para el cuarto trimestre y el ejercicio fiscal 2024 y el crecimiento del PIB supera las expectativas. "Las acciones brasileñas están respaldadas por las expectativas de relajación monetaria, una política relativamente estable, unas valoraciones atractivas y un posicionamiento favorable de los inversores", afirman desde la gestora.

Su preferencia está en empresas de orientación nacional, especialmente en sectores con mayor sensibilidad a los tipos de interés, como el industrial, el financiero y el inmobiliario. Con el fin de obtener una mayor exposición al ciclo de relajación previsto, en la cartera de DWS Invest Brazilian Equities el equipo gestor ha aumentado las posiciones en los sectores financiero, de consumo discrecional y sanitario. Mientras tanto, ha reducido ligeramente la gran sobreponderación en industriales y aumentó la infraponderación en materiales debido a un crecimiento más lento de lo esperado en China.