En la parte de duración corta, que es un mínimo del 50%, tienen actualmente una asignación del 45%. En la parte oportunista (máximo del 50%) mantienen una parte larga del 53%, con coberturas del -27% en crédito en el mercado de préstamos apalancados de EE.UU y high yield europeo.
El Candriam Bonds Credit Opportunities es uno de los fondos de gestión alternativa más importantes en el mercado español. Gestionado por Philippe Noyard (en la imagen) y Patrick Zeenni y Nicolas Jullien, cogestores del producto, esta estrategia cuenta este año con Sello FundsPeople con la triple calificación (Favorito de los Analistas, Blockbuster y Consistente).
El Candriam Bonds Credit Opportunities se compone de dos motores de rentabilidad: una parte de duración corta y una parte oportunista. “La parte de duración corta (que es un mínimo del 50% del fondo) nos permite tener bonos de baja duración que se eligen en base a nuestras convicciones de mercado y nos permite tener una beta baja, alta liquidez y un carry atractivo. Tenemos una asignación en la actualidad de aproximadamente el 45% en este parte y un 5% adicional de efectivo. Continuamos monitoreando las oportunidades en el mercado para reforzar este parte”, explican a FundsPeople.
De otro lado, en lo que respecta a la parte oportunista (máximo 50%) incluye una parte larga de aproximadamente el 53% en nombres de crédito bien analizados, mientras que también mantienen coberturas de crédito (de aproximadamente -27%) en el mercado de préstamos apalancados de Estados Unidos (US Leveraged Loans) y en el mercado de high yield europeo. “Este segundo motor busca generar alfa y descorrelación con el mercado”, recuerdan.
En el equipo siguen centrados en la liquidez en el entorno actual, así como en las empresas que pueden capturar oportunidades en el nuevo mundo post-pandemia. “Aceleración de la economía digital, nueva movilidad, transición energética así como sectores tradicionales defensivos como el sector de la alimentación y la atención sanitaria. Por el contrario, continuamos siendo cautelosos entorno a los sectores cíclicos (autos, petróleo) en el contexto de la actual desaceleración macroeconómica”, indican.
Visión de mercado
Su visión de la situación macroeconómica es que la recesión parece haberse apoderado de los países desarrollados así como de ciertos países emergentes. “Las empresas sufrieron considerablemente en este contexto, ya que las operaciones se paralizaron y los ingresos y beneficios se vieron afectados. A pesar de la reapertura y el desconfinamiento, la amenaza de una segunda ola continúa existiendo, ya que ciertos países siguen luchando con un número creciente de casos. En este contexto, los fundamentales de las empresas se han deteriorado, y tanto las tasas de impago como los downgrades han aumentado considerablemente”.
Además, las tensiones geopolíticas continúan siendo omnipresentes, puesto que el populismo sigue apoderándose del panorama político, lo que da lugar a acontecimientos como guerras comerciales y duras negociaciones de Brexit. En opinión de los gestores, “las elecciones en los Estados Unidos serán sin duda una fuente de incertidumbre y volatilidad en los próximos meses”.
Por otro lado, consideran que la reacción de la política fiscal y monetaria ha sido abrumadora, ya que los bancos centrales han mantenido una postura de tipos bajos, han inyectado niveles significativos de liquidez y han anunciado fuertes programas de compra de bonos que incluyen crédito con grado de inversión e incluso ángeles caídos por parte de la Reserva Federal.
“Este apoyo sin precedentes los ha convertido en el prestamista y comprador de primer y último recurso y en el último respaldo de los mercados de crédito, y ha llevado al reciente repunte de los diferenciales y rendimientos tanto en el espectro de grado de inversión como de high yield. Este apoyo ha incitado a los emisores a refinanciarse y los mercados primarios han estado activos y bien apoyados. La oferta ha sido absorbida ya que la confianza de los inversores sigue siendo elevada”, destacan.
Lo que también están viendo en el contexto actual es que el COVID-19 ha acelerado las principales tendencias de los últimos años, entre ellas la digitalización, transición energética, comercio electrónico o trabajo desde casa. “Parece que estamos entrando en un nuevo periodo de adaptación que beneficia a la tecnología o la atención sanitaria y, en general, a los trabajos mejor adaptados a este nuevo contexto a expensas de los cíclicos, los sectores tradicionales, que necesitan recapitalizarse para asegurar la sostenibilidad de sus deudas o la formación tras los cambios en las necesidades de empleo”, concluyen los gestores de Candriam.