El nuevo producto se caracteriza por su diversificación global, con un enfoque especial en los mercados de América Latina.
La agencia de valores amplía su oferta con un nuevo producto. Denominado Value Tree Global Equities, se trata de un compartimento dentro de la sicav luxemburguesa Value Tree Umbrella Sicav, creada y gestionada por Value Tree AV desde 2016. Se trata del quinto subfondo dentro de la citada estrategia y estará disponible a partir del 18 de octubre.
Value Tree Global Equities es un fondo mixto global flexible que invertirá un mínimo del 51% en renta variable y un máximo del 49% en renta fija. Este fondo se caracteriza por su diversificación global, con un enfoque especial en los mercados de América Latina. En palabras de Eric Ollinger, presidente de Value Tree: “Esta iniciativa busca satisfacer las necesidades de nuestra creciente clientela en Latam, que ha experimentado un crecimiento notable en España en los últimos años. Estamos comprometidos en ofrecer un servicio personalizado y adaptado a las necesidades de nuestros clientes”.
No es el único cambio en la firma. Además del lanzamiento, el subfondo Value Tree Best Equities cambiará su nombre a Value Tree European Equities a partir del mismo 18 de octubre. No obstante, desde la agencia de valores aseguran que "el cambio se limita al nombre del subfondo, que mantendrá la estrategia de inversión desarrollada durante los últimos años. El objetivo de esta modificación es proporcionar una identificación más precisa de la cartera y reflejar con mayor exactitud su enfoque en las inversiones en acciones europeas".
Actualizaciones en Materia de ESG
En cumplimiento con el Reglamento de Divulgación de Finanzas Sostenibles (SFDR) de la Unión Europea, cuatro de los fondos de Value Tree Umbrella Sicav (Value Tree Defensive, Value Tree Balanced, Value Tree Dynamic y Value Tree European Equities), serán reclasificados como fondos de artículo 8.
El SFDR de la Unión Europea establece una serie de criterios para clasificar los fondos de inversión en función de sus principios de sostenibilidad, proporcionando una guía clara a los inversores interesados en inversiones alineadas con los criterios ESG (ambientales, sociales y de gobernanza). En este contexto, los fondos de artículo 6 se consideran no sostenibles, mientras que los fondos de artículo 8 buscan promover activamente la sostenibilidad y los criterios ESG en sus inversiones.
Desde Value Tree aseguran que están "comprometidos en seguir avanzando hacia un enfoque más sostenible y responsable en la gestión de activos, cumpliendo con los estándares de la industria".
Posicionamiento actual
De los 900 millones de euros que la firma maneja actualmente, unos 600 corresponden a la cogestión junto con la compañía CapitalAtWork, de la sicav luxemburguesa The Blue Global Fund SICAV. De los 300 restantes unos 200 millones están en carteras gestionadas mientras que otro 100 millones en la sicav. Pero no solo se dedican a la gestión, también cuentan con un servicio de planificación patrimonial a disposición de sus clientes, que en la gran mayoría son grupos familiares. "Intentamos anticipar los problemas de los clientes, optimizar su situación patrimonial y que estén tranquilos, algo difícil y que valoran mucho en estos momentos difíciles", asegura Eva Alonso, responsable de planificiación en Value Tree.
En lo que respecta al posicionamiento de las carteras, actualmente mantienen una visión positiva. Lucas Monjardín, director de estrategia y socio de la entidad, tranquiliza: "A largo plazo no va a haber una recesión importante". En renta variable, apuestan por el sector energético aunque con cautela. "Son compañías generadoras de caja y tienen capacidad para retribuir al accionista", explica Monjardín. Según el experto, aunque haya una contracción económica y el consumo caiga, los inventarios se mantendrán. Tesis que justifica por qué creen que son "empresas ganadoras a futuro". Además de dicho sector, también están concentrados en el farmacéutico y el industrial, con algunas compañías tecnológicas del sector de software y redes o asiáticas para apostar por el vehículo eléctrico.
En la parte de renta fija, Monjardín cree que los bonos de gobiernos todavía es pronto para posicionarse, excepto en coronas noruegas. Por eso prácticamente toda su cartera está en deuda corporativa, con una duración media de cinco años y una parte en High Yield. "Estamos en una situación irreal, se tendrá que ajustar al nivel actual de tipos de interés. Ahora bien, no se ha producido una recesión importante porque veníamos con impulso desde el Covid y las empresas tienen una fortaleza importante, con niveles de endeudamiento bajos, balances fuertes y el consumo ha contribuido. La desaceleración va a ser importante, pero no violenta", asegura.