Wendy Cromwell (Wellington Management): “Vamos a tener que invertir más en adaptación, no solo en mitigación”

Wendy Cromwell. Wellington Management. Foto cedida.

El repaso a los resultados de la inversión sostenible en 2023 abre la conversación con Wendy Cromwell, responsable de Inversión Sostenible de Wellington Management. La directiva afirma que “a pesar de la resistencia hacia los criterios ambientales, sociales y de gobernanza (ESG), los flujos generales hacia los fondos sostenibles europeos fueron positivos en 2023”.

Cromwell añade que en Wellington "hemos tenido un año positivo para la inversión sostenible, si bien la mayoría de entradas se han producido en nuestros fondos artículo 9. Somos conscientes de que SFDR no es un sistema de etiquetado, pero de alguna forma los inversores asocian el artículo 9 con las mejores prácticas”. En este sentido, apunta que siguen con atención la regulación británica SDR, que sí incluye un sistema de etiquetado que puede resultar más claro. Sea cual sea el sistema, en su opinión “aplicar la lente de la sostenibilidad puede traducirse en buenos resultados para los clientes”.

IRA

Seguimos en EE.UU. con una cuestión sobre la supervivencia de la Inflation Reduction Act (IRA), regulación dirigida a combatir el cambio climático, en un año de incertidumbre en torno a las elecciones presidenciales. “Creo que IRA es una legislación muy interesante, proporciona incentivos adicionales a las empresas que ubican sus proyectos de energía limpia en comunidades energéticas tradicionales. Esto se reconoce como una forma de apoyar a las comunidades que serán más afectadas por la transición”, explica.

La ley no trata solo de centrarse en la transición, sino también en las personas que se verán afectadas. “Por eso es importante que sea justo, que existan alternativas y que se puedan mantener los empleos. Esta es la razón por la cual es poco probable que la IRA sea desmontada; beneficia principalmente a los estados donde observamos una resistencia hacia las inversiones sostenibles (ESG)”, explica. Es posible que otros subsidios estén en mayor riesgo, como los destinados a los coches eléctricos, pero Cromwell no cree que el IRA se vaya a desmantelar por completo.

El análisis en la base de la estrategia

Wellington Management tiene en la actualidad siete fondos artículo 9 y una gama más amplia de fondos artículo 8 y artículo 8 plus. “No tuvimos que hacer ninguna reclasificación, y tampoco hemos lanzado más fondos, a la espera de ver cómo evoluciona la regulación”, explica. La principal característica del enfoque de la inversión sostenible de Wellington es que se base en el análisis. “Pensamos que una base analítica base puede producir buenos resultados”, enfatiza.

Cromwell trabaja en Wellington desde hace 28 años. Antes de ser la responsable de inversión sostenible fue responsable del equipo de estrategia de multiactivos. “Yo aporto el punto de vista y la experiencia del gestor en distintos activos a la inversión sostenible. Se trata de considerar la sostenibilidad no solo desde la renta variable, sino de incluir crédito, soberanos, REITS, activos privados, materias primas. Cuando lideraba el grupo de multiactivos empezamos a investigar en temas de impacto en 2012 y lanzamos la primera estrategia en 2015”, señala.

Organización

A la hora de estructurar la inversión sostenible en la gestora, Cromwell se dio cuenta de que tanto los productos, como las herramientas, datos, reuniones con clientes y la interpretación regulatoria, todo lo relacionado con sostenibilidad pasaba por el departamento de análisis ESG, incluso habiendo otros departamentos especializados en datos, herramientas y productos. “ESG era el único tema en el que esto estaba sucediendo, porque era un entorno sujeto a constante cambio y evolución, así que decidimos integrar la sostenibilidad en otros departamentos, así como educar y crear roles especializados”, explica.

Ahora cuentan con un departamento específico de análisis ESG que está organizado por industrias. “Son parte de nuestros equipos sectoriales junto a los especialistas de renta variable y de crédito. Comparten una agenda, reuniones con compañías, así como los marcos de materialidad, son todos parte de un mismo equipo; pero entendemos que dedicar recursos a la inversión sostenible nos ofrece más información con mayor granularidad, además de una perspectiva diferente”, especifica.

Riesgos físicos y de transición

En Wellington también cuenta con un analista ESG de deuda soberana que analiza a los emisores con un modelo propio, en colaboración con los equipos de deuda global y emergente. “Hemos empezado a hacer engagement con los países emisores y está siendo muy interesante”. También tienen otro equipo destinado exclusivamente a los riesgos climáticos, que no está organizado por sectores, sino por los riesgos físicos y de transición, así que hay analistas especializados en los efectos de los incendios, de las tormentas, de las inundaciones, así como en los planes de transición de las empresas y la evolución hacia net zero.

"Junto con este equipo, hemos lanzado dos colaboraciones. Una de ellas es con el Centro de Investigación Climática Woodwell, una organización que estudia los riesgos físicos, con el objetivo de comprender mejor cuál será el impacto en la economía real. Además, en 2022, iniciamos un proyecto con el Programa Conjunto del MIT para entender mejor los riesgos de transición y las diferentes trayectorias posibles según cada sector”, explica.

Además, también cuentan con un equipo dedicado a la medición y gestión del impacto. “Este equipo analiza las estrategias de impacto, algunas de las cuales provienen de nuestra gama de productos de capital privado. Estas estrategias se centran en empresas cuyos bienes y servicios principales están destinados a resolver algunos de los mayores problemas mundiales. El equipo de medición y gestión del impacto (IMM) analiza los impactos del mundo real de las inversiones y cómo han evolucionado sus indicadores clave de rendimiento a lo largo del tiempo. Esto contribuye a la tesis de inversión para el emisor. Además, el equipo identifica la alineación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (SDGs) y las prioridades de engagement con cada empresa. Esta información la estamos extendiendo a otras estrategias que podríamos denominar “impacto-adyacentes”.

Productos y perspectivas

De entre su gama de productos, Cromwell destaca el Wellington Global Stewards Fund (fondo con Rating FundsPeople), que ya cuenta con cinco años de existencia, un fondo de renta variable global que ha ofrecido un buen performance tanto en retornos como en indicadores de sostenibilidad, con casi 2.000 millones (1.900 millones USD) de activos bajo gestión. Se concentra en unas 35 compañías con ROIC altos y con buenas prácticas en stewardship: consideración de los intereses de los stakeholders, gobernanza exigente y estrategia climática transparente.

Entre los retos, poder ofrecer más productos para la adaptación, no solo de mitigación. “Vamos a tener más sequías, más incendios, más inundaciones y vamos a tener que adaptarnos a esos entornos. Estamos viendo innovaciones en compañías que fabrican cristales especiales, generadores, medidores y sensores de agua y aire acondicionado, por ejemplo, y creemos que el engagement con ese tipo de compañías es un camino muy poderoso hacia adelante”, concluye.