Qué tener en cuenta en el universo de depositaría actualmente

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¿Qué aspectos de la directiva de los fondos alternativos (AIMFD) hay que mejorar y cómo puede ayudar el depositario a las gestoras?, ¿podría extenderse la labor del depositario a nuevos vehículos, como los bonos garantizados?, ¿cuándo será una realidad el pasaporte europeo del depositario? A estas y otras cuestiones responden los participantes de Insights Depositaría sobre temas regulatorios que cuenta con participantes de BNP Paribas, BBVA y CACEIS.

La revisión de la directiva AIMFD es uno de los temas regulatorios que más preocupa a las gestoras, según se refleja en los resultados de la I Encuesta de Depositaría y Custodia de IIC en España de Funds People. La Comisión Europea ha puesto a consulta la revisión de esta directiva, que finaliza el próximo mes de enero, que trata aspectos como la clasificación de inversores, obligaciones de transparencia y acceso a los FIA por los inversores minoristas.

La normativa de fondos alternativos ha funcionado bien en términos generales, y logrado en gran medida sus objetivos de establecer un marco de supervisión eficaz, si bien existen aún enfoques nacionales distintos lo que dificulta la prestación de servicios en otro Estado miembro, según explica Nuria Alonso, responsable de Soluciones de Clientes en BNP Paribas Securities Services.

Esta revisión de la directiva no consideramos que vaya a ser "revolucionaria" y forma parte de un conjunto de medidas publicadas por la Comisión Europea para conseguir la Unión del Mercado de Capitales. La crisis de Covid-19 ha hecho que sea más urgente cumplir con todo este paquete normativo, ya que la financiación basada en el mercado es esencial para la recuperación de la economía europea, y el crecimiento a largo plazo. Las diferentes normas nacionales sobre los fondos de inversión de deuda y la accesibilidad insuficiente a los datos del mercado por parte de los supervisores crean dificultades para que los supervisores controlen el riesgo para la estabilidad financiera y preserven la integridad del mercado; estas serán algunas de los objetivos que se recogen en este paquete de medidas, apunta Nuria Alonso.

La responsable de Soluciones de Clientes en BNP Paribas Securities Services detalla algunos de los aspectos que afectarán a los gestores de inversión alternativa, como son por ejemplo el hecho de que se tengan que disponer de herramientas para gestionar la liquidez en toda la UE: "El gestor seguirá teniendo la posibilidad de utilizar a discreción su herramienta de gestión de riesgos, pero tendrá que elegir al menos una de las que se van a especificar en la normativa, algo que no ocurría antes. Sobre el alcance de la autorización para los gestores de este tipo de vehículos se ha visto que en algunos casos no era suficiente y se van a reforzar, por tanto, las estructuras de algunos de ellos y establecer protocolos adicionales en torno a los acuerdos de delegación de actividad".

"También se propone modificar ciertas obligaciones de reporting como es el Anexo IV de la directiva de fondos alternativos, para que las autoridades, cuando reciban la información, puedan tener más información sobre la práctica de estos gestores" igual que un aumento del flujo de información periódica de los gestores a los inversores para protegerles y permitir realizar un mejor seguimiento de los gastos del fondo de inversión añade Nuria Alonso.

Incrementar la armonización y mejorar la financiación

María Dolores Domínguez Haro, responsable de Disciplina en Depositaría en BBVA, incide en que el objetivo de la revisión de la AIMFD es incrementar la armonización entre los distintos países comunitarios y mejorar la financiación de las empresas europeas porque "los fondos de deuda, dentro del grupo de los fondos alternativos, funcionan como verdaderos vehículos de financiación para la economía".

Por otro lado, Domínguez Haro hace hincapié en la "tremenda avalancha normativa" que está sufriendo el sector y que ha convertido en "crucial" el papel que juegan los depositarios, al contar con una estructura de servicios jurídicos y de cumplimiento normativo, junto a la experiencia en el depósito de otro tipo de vehículos, como IIC o fondos de pensiones. "Hemos puesto a disposición de nuestros clientes y de las gestoras todo este expertise, estructura y equipos para acompañarlos, incluso desde el primer momento de creación de los fondos, y así irnos adaptando a los nuevos criterios de los supervisores y las nuevas exigencias normativas", asegura.

"Creo que los depositarios lo hemos hecho muy bien, hemos estado totalmente alineados con el supervisor, mantenemos contacto continuo con la CNMV, DGS y Gobierno Vasco. Y esa labor de acompañamiento unida a las soluciones novedosas, los recursos tecnológicos y sobre todo la experiencia que tenemos son nuestras bazas. El feedback que hemos recibido de entidades de capital riesgo o EPSV ha sido muy positivo en este sentido", añade Domínguez Haro.

Mientras, Alfonso de Pablos, responsable de Depositaría de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones en CACEIS, destaca que la propia directiva pone en valor la figura del depositario, que ha ayudado a la protección del partícipe y que es una figura clave de toda la cadena de la industria de fondos. "Los depositarios nos tenemos que poner esa medalla, lograr afianzar la función de control y porque ha quedado claro que jugamos un papel fundamental en los mercados financieros".

Las entidades se refuerzan

En pleno auge de los activos alternativos, las entidades se han reforzado para prestar mejores servicios. Domínguez Haro explica que BBVA ha puesto el foco en la necesidad de customizar los servicios bancarios que tenía implementados para la gestión tradicional. "Ha sido necesario adaptarlos a las necesidades operativas reales que tiene una entidad de capital riesgo y acompañar en el proceso desde el que se crea y constituye el mismo vehículo", expone.

"En los últimos años hemos visto surgir muchas gestoras independientes que están focalizadas a la gestión y aquí también hemos adaptado nuestros equipos de servicios jurídicos y de servicios bancarios a las necesidades que van teniendo esta esta tipología de vehículos. También hemos hecho un esfuerzo en el plano tecnológico, para agilizar mucho más los procesos de onboarding, entre otros motivos, porque la normativa de prevención de blanqueo es cada vez más exigente para todos los participantes del sector", añade.

La formación es clave

Además de la apuesta por la tecnológica, mejora continua y automatización de procesos, Nuria Alonso (BNP Paribas) hace referencia a la importancia de "la inversión también en personas". "Este segmento de mercado requiere de una mayor especialización, lo que implica invertir en los equipos y formación en este tipo de estrategias. Al tratarse de un segmento aún no tan maduro como el tradicional, la formación e inversión en capital humano es clave. Del mismo modo, acompañar a nuestros clientes proponiendo soluciones que les ayuden a adaptarse a todos los cambios sin que les suponga desviarse de sus actividades principales, es una de nuestras prioridades y forma parte de nuestro ADN, subraya Nuria Alonso.

Los depositarios, ¿los nuevos cover pool monitor?

El Real Decreto-ley 24/2021 de Bonos Garantizados, aprobado recientemente y que transpone la directiva europea 2019/2162 , establece la figura del cover pool monitor, cuya función consiste en vigilar que los bancos emisores de bonos garantizados (en España, fundamentalmente cédulas hipotecarias) cumplan en todo momento con la regulación que les sea aplicable. Pero ¿podrían los depositarios desarrollar estas funciones?

Alfonso de Pablos (CACEIS) recuerda cómo, en los últimos años, los diferentes reguladores han aumentado la protección del partícipe de los diferentes vehículos de inversión y han fomentado la transparencia del sector, incluyendo como refuerzo la figura del depositario, al atribuirle funciones de control, tanto en capital riesgo como en EPSV. "Esto nos ha obligado a hacer un esfuerzo por adaptar procesos y sistemas a un nuevo marco jurídico e, incluso, a nuevos activos subyacentes. Con anterioridad a esta normativa, este tipo de vehículos no tenían la necesidad de tener un depositario, por lo que nos vimos en la obligación de crear valor en la cadena y es algo que hemos conseguido con creces", señala.

"Ahora se presenta otro reto para las entidades depositarias y creemos que pueden ser buenas candidatas para ejercer esta función de órgano de control, aun teniendo en cuenta que es un vehículo diferente a los que estábamos acostumbrados. Supone una buena noticia porque amplían su gama de productos con servicios que aumentan la protección de los partícipes. Los depositarios, en general, cumplen con los requisitos impuestos en este último Real Decreto-ley en términos de formación, conocimiento, medios técnicos y, sobre todo, por el carácter independiente de las funciones operativas, comerciales y de gestión del riesgo del emisor de los bonos. El depositario está acostumbrado desde hace años a esta función de independencia, a cumplir con estrictas reglas de separación entre gestora y depositario", expone De Pablos.

El responsable de Depositaría de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones en CACEIS considera también que las funciones que atribuye la norma al cover pool monitor tienen cierta semejanza a las que ya viene desarrollando el depositario, "sobre todo en las cuestiones de vigilancia y supervisión, tanto de suscripciones y reembolsos, como comprobación de coeficientes, de límites o activos aptos; pero también en las funciones relacionadas con el reporting de revisión de informes periódicos a los reguladores".

La creación de valor para EPSV o capital riesgo

Los participantes de esta mesa redonda han incidido en la creación de valor que ha supuesto el depositario para las EPSV y entidades de capital riesgo. Domínguez Haro (BBVA) considera que la figura del depositario era algo "desconocida" al principio para este tipo de entidades, "pero el feedback ha sido muy positivo, hemos conseguido de verdad acompañar a las EPSV, ayudarlas en el día a día, al mismo tiempo que hemos desarrollado nuestras funciones de supervisión y control, demostrando que somos una garantía más en defensa del interés del partícipe". 

"La clave es ese binomio, el de ayudar a la gestora en su actividad diaria y vigilar y revisar que todos los procesos estén bien construidos y se desarrollan con normalidad en defensa del interés del partícipe", añade.

El pasaporte europeo del depositario: ninguna realidad a corto plazo

La introducción del pasaporte del depositario, se viene considerando como una opción, desde UCITS V. Sin embargo, no se ha visto factible introducirlo en estos momentos, debido a la falta de leyes de insolvencia y valores armonizadas dentro de la UE según señala Nuria Alonso (BNP Paribas). "Sin ese marco regulatorio común, no es factible por tanto establecer dicho pasaporte, apunta Nuria Alonso, quien afirma que en el pasado los reguladores sondearon el sentir de la industria y no recibieron apoyos en este sentido, debido a una posible concentración en el mercado de depositarios -algo que podría suponer una menor protección de los inversores- y, desafíos en la supervisión entre los reguladores.

En este sentido, la responsable de Soluciones de Clientes en BNP Paribas Securities Services explica que la posibilidad de nombrar un depositario en otro Estado miembro, debe ir acompañada de un mayor grado de colaboración en la supervisión ya que el depositario deberá estar obligado a cooperar no sólo con sus autoridades competentes, sino también con las autoridades competentes del fondo que lo ha designado y con las autoridades competentes del gestor que gestiona el fondo, en caso de que dichas autoridades se encuentran en un lugar diferente.

La opción que sí se ha contemplado y propone permitir el pasaporte del depositario es en aquellos casos en los que no exista una oferta competitiva de servicios de depositaría y que conlleve, por tanto, un aumento de los costes para los gestores de fondos alternativos y un mercado ineficiente. En estos casos, las autoridades competentes podrán permitir que los gestores contraten los servicios de depositaría ubicados en otros Estados miembros, menciona Nuria Alonso.

"A corto plazo, no esperamos que el pasaporte sea considerado en la agenda de los reguladores, aunque sí está sobre la mesa y probablemente se estudie en algún momento como parte de una revisión más genérica de toda la directiva, añade Nuria Alonso.

Los inconvenientes del pasaporte europeo

Para Alfonso de Pablos (CACEIS), la introducción del pasaporte "puede parecer una idea muy atractiva, sobre todo para completar la foto de unos mercados financieros europeos armonizados. Desde el punto de vista comercial, podría aumentar la competencia y un entorno de servicios más beneficiosos para los partícipes. No obstante, los resultados de la consulta para la revisión de la directiva AIFMD han puesto de manifiesto algunos riesgos de los que los depositarios ya hemos advertido en otras ocasiones".

En este sentido, De Pablos recuerda que los depositarios "siempre hemos dicho que la función supervisora requiere proximidad con el regulador, un contacto estrecho y constante que facilite la interpretación de la norma o el reporte continuo, entre otras cuestiones Esta cercanía ha fomentado el éxito del funcionamiento de la actividad del depositario y, en caso de implantar el pasaporte, habría que trabajar en soluciones para suplir la falta de proximidad".

En segundo lugar, "los procesos de transposición de la normativa europea en los diferentes países han provocado diferencias en las legislaciones de cada uno de los países -como en lo relacionado con los regímenes fiscales o el control de efectivo-, por lo que si la legislación no viene acompañada de un proceso de armonización de la norma donde se homogeneicen funciones, obligaciones y una estandarización de prácticas de mercado, puede ser que el pasaporte europeo esté llegando de una forma prematura".

En definitiva, para el responsable de Depositaría de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones en CACEIS, "el principio fundamental para el éxito de este pasaporte sería lograr unas prácticas de supervisión comunes y un marco normativo de la UE único, para que ningún inversor se sienta desfavorecido independientemente del país en el que decida invertir".